La Juventus vuelve a su pasado m¨¢s oscuro
El club turin¨¦s, 17 a?os despu¨¦s del mayor caso de corrupci¨®n del ¡®calcio¡¯ por la compra de ¨¢rbitros, es castigada con 15 puntos en la clasificaci¨®n por alterar sus cuentas
El estigma de la corrupci¨®n persigue a la Juventus 17 a?os despu¨¦s del Calciopoli, lo que podr¨ªa considerarse el punto m¨¢s bajo de la historia del club turin¨¦s, condenado por comprar ¨¢rbitros y sentenciado a descender a Segunda Divisi¨®n. Desde entonces, m¨¢s all¨¢ de un buen pu?ado de triunfos y del intento de restauraci¨®n de la leyenda por parte del sobrino de Gianni Agnelli, el club no ha sido ya el que fue. Ahora un tribunal ha vuelto a decretar que el equipo turin¨¦s no juega limpio en los despachos. Esta vez se trata del caso de las plusval¨ªas, una ingenier¨ªa fiscal por la que la Juventus logr¨® cuadrar las cuentas hinchando el valor de jugadores de perfil medio que intercambi¨® con otros clubes italianos y de Europa. El mejor ejemplo, quiz¨¢, fue el trueque que realiz¨® en 2020 con el FC Barcelona: el bosnio Pjanic por el brasile?o Arthur. Ninguno de los dos lograba ya conmover a la grada de sus clubes, pero su tasaci¨®n lleg¨® a los 70 millones de euros.
La Juventus, esta vez, no ha tenido margen de defensa. El tribunal de apelaci¨®n ha castigado al club con 15 puntos menos en la clasificaci¨®n de este curso. Habr¨¢ recurso, pero no habr¨¢ reducci¨®n de la pena: solo podr¨¢ anularse o confirmarse la sanci¨®n. Un correctivo que liquidar¨¢ de un plumazo cualquier aspiraci¨®n en el campeonato y la alejar¨¢ radicalmente de los puestos europeos en la clasificaci¨®n. De hecho, ahora pasar¨¢ a tener 22 puntos y quedar¨¢ empatada con el Bolonia y el Empoli en la 11? posici¨®n. Adem¨¢s de sanciones al club, tambi¨¦n hay castigo para los directivos. El tribunal ha dictaminado dos a?os y medio de inhabilitaci¨®n para el director deportivo Fabio Paratici (hoy en el Tottenham); ocho meses para Pavel Nedved, m¨¢nager del club; y dos a?os para el expresidente Andrea Agnelli, que dimiti¨® hace poco en una suerte de detonaci¨®n controlada de la bomba que estaba por llegar.
El caso devuelve ahora a la Juventus a los tiempos su peor leyenda negra. Durante a?os, un grupo delincuencial encabezado por Luciano Moggi, director general del club desde 1994 hasta 2006, control¨® todos los estamentos del f¨²tbol italiano y manipul¨® sistem¨¢ticamente los resultados. ?rbitros, repetici¨®n de jugadas, comentaristas... En esos 12 a?os, la Vieja Se?ora de Tur¨ªn gan¨® siete t¨ªtulos de Liga. Pero la gloria se ti?i¨® r¨¢pidamente de verg¨¹enza, y el descenso a Segunda y el escarnio p¨²blico fue dif¨ªcil de borrar del imaginario colectivo hasta que lleg¨® Andrea Agnelli, sobrino del gran Gianni Agnelli, patr¨®n de la Fiat y de la mejor Juventus. Su mandato, pese a los 19 t¨ªtulos logrados (con nueve scudetti consecutivos), no consigui¨® levantar ninguna Champions, el objetivo prioritario y, en parte, motor de las tretas contables realizadas en los ¨²ltimos a?os para reforzarse con fichajes como el de Cristiano Ronaldo.
La Juventus, que puede recurrir la sanci¨®n, expiar¨¢ ahora su culpa como ya ha hecho en ocasiones anteriores. Sin embargo, cabe preguntarse tambi¨¦n por los otros clubes que recurrieron a la misma pr¨¢ctica en Italia -como el N¨¢poles- o en Europa -como el Manchester City y el Barcelona-. Si algo tiene la t¨¦cnica contable las plusval¨ªas ficticias es que se necesita de un colaborador al otro lado del intercambio para llevarlas a cabo. Habr¨¢ que ver ahora si el resto de pa¨ªses se toma tan en serio como Italia esta argucia financiera e investigan a los clubes que participaron con la Vecchia Signora en el embuste econ¨®mico.
El club deber¨¢ ahora comenzar un proceso de reconstrucci¨®n que, con toda probabilidad, pasar¨¢ tambi¨¦n por lo deportivo. Las inversiones en jugadores, sufragadas en parte con la t¨¦cnica de las plusval¨ªas ficticias, no han dado los resultados esperados. Ni Cristiano Ronaldo, contratado para ganar la ansiada Champions por m¨¢s de 100 millones de euros, ni el sergio Dusan Vlahovic, fichado a la Fiorentina el a?o pasado por 75 millones, han aportado el salto de calidad esperado. El regreso de Massimiliano Allegri al banquillo, art¨ªfice de los ¨²ltimos scudetti logrados, tampoco ha dado los frutos que el club imagin¨®. De hecho, el equipo viene de recibir cinco goles del N¨¢poles -primer clasificado de la Serie A- en la ¨²ltima jornada. La perspectiva, desde el puesto 11? de la clasificaci¨®n, no puede ser m¨¢s negra.
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