La inesperada pasi¨®n de Fernando Torres

Los juveniles del Atl¨¦tico de Madrid concluyen el calentamiento que Fernando Torres (Fuenlabrada, 38 a?os), su entrenador, ha seguido atentamente a pie de campo. Mientras los chavales trotan hacia la caseta con el mismo rostro de trascendencia que los profesionales, el ne¨®fito t¨¦cnico se para en la escalerilla que conduce a los vestuarios para dejarse fotografiar y firmar aut¨®grafos.

A los pies del mito rojiblanco que se forja en los mismos escenarios de los que a principios de siglo brot¨® como una gran promesa del f¨²tbol espa?ol, varias botellas de agua reposan esparcidas por el ¨¢rea t¨¦cnica del campo principal del Centro Deportivo Wanda de Alcal¨¢. Minutos despu¨¦s, tras dar la charla prepartido, Torres emerge y recoge uno por uno los envases desparramados por la hierba. Lleva una hoja enrollada en su mano derecha a la manera de los entrenadores universitarios del baloncesto estadounidense. No se desprende del papel en todo el partido, convertido en un improvisado bloc de notas cada vez que aprecia un lance a analizar o a repasar concienzudamente con los analistas. Junto a estos tambi¨¦n visionar¨¢ las im¨¢genes grabadas con el dron que sobrevuela el terreno de juego. ?Qui¨¦n lo iba a decir?

Torres nunca tuvo entre sus planes de futuro ser entrenador. Tras retirarse, su nuevo camino en el f¨²tbol apuntaba m¨¢s a la direcci¨®n general o deportiva de un club que a los banquillos. Por sorpresa, una ma?ana comunic¨® a Bah¨ªa, su agencia de representaci¨®n, que quer¨ªa apuntarse a los cursos de entrenador de la Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol. Torres pensaba que le vendr¨ªan bien para el proyecto de las escuelas de f¨²tbol que ten¨ªa entre manos y la covid-19 paraliz¨®.

Ni ¨¦l mismo, ni nadie de su entorno pens¨® que el veneno del banquillo le iba a enganchar tanto hasta quemar horas y horas para destripar el juego y a su equipo. ¡°Cuando comenz¨® el curso, ¨¦l dice abiertamente que no quiere ser entrenador y que nunca entrenar¨¢, que se ha retirado, que le gusta seguir form¨¢ndose, pero no hace cuentas para ser entrenador¡±, recuerda Israel L¨®pez, director de la Escuela Nacional de Entrenadores. ¡°Nadie lo esperaba, es hasta obsesivo¡±, dice Abraham Garc¨ªa, que entren¨® a Torres en edad juvenil. Recientemente se encontraron en Majadahonda y fue invitado a seguir sus entrenamientos. ¡°Vi mucha normalidad. Trata de igual a igual a sus colaboradores y est¨¢ muy metido en las din¨¢micas. Tiene una atenci¨®n individual con los jugadores, lo que no todos hacen¡±, relata Garc¨ªa, que tambi¨¦n asisti¨® a una recolecci¨®n de botellas desparramadas por la hierba del campo de entrenamiento del Cerro del Espino de Majadahonda: ¡°Ese es Fernando y los valores que trata de transmitir a los chicos¡±. En su debut el curso pasado, en un derbi ante el Real Madrid saldado con derrota (0-1), Torres no pudo evitar una arenga muy de Luis Aragon¨¦s, su gran referente junto a Rafa Ben¨ªtez. ¡°No quiero a nadie en el suelo, cabeza alta¡±, espet¨®.

¡°Le cortas las venas y sangra Atl¨¦tico¡±, dice Lauren, exjugador del Mallorca y del ¨²ltimo Arsenal que conquist¨® la Premier League. El internacional camerun¨¦s es compa?ero de promoci¨®n de Torres, como Arbeloa, Duscher, Gorka Iraizoz, Ibagaza o Miguel Torres. ¡°Ser¨¢ un gran entrenador para cualquier club porque tiene una gran capacidad para transmitir, conocimiento y sabe lo que quiere. Con eso llega muy bien al jugador¡±, abunda Lauren, que desde hace un a?o trabaja mano a mano con Arsene Wenger como t¨¦cnico de desarrollo del f¨²tbol en la FIFA. ¡°Lo que m¨¢s me llam¨® la atenci¨®n como alumno, creo que hay una cosa que marca mucho a Fernando, es que el nivel de exigencia personal que tiene lo lleva al l¨ªmite, incluso al l¨ªmite. Quiere mejorar constantemente, quiere exponerse constantemente. Par¨¢bamos las clases, era hora de ir a comer y ¨¦l segu¨ªa erre con erre con la tarea¡±, rememora Israel L¨®pez.

¡°Estuve hablando por tel¨¦fono con ¨¦l hace poco y le percib¨ª muy ilusionado¡±, asegura Rafa Ben¨ªtez, ¡°con las cosas muy claras para desarrollar sus ideas vali¨¦ndose de las tecnolog¨ªas. Ha sido muy receptivo en esa l¨ªnea, porque ahora hay muchos datos y no todo el mundo sabe manejarlos¡±.

En su primera temporada, Torres gan¨® la Liga. En esta, su equipo es l¨ªder empatado a puntos con el Real Madrid y esta tarde se juega en Mil¨¢n, ante el juvenil rossonero, la segunda presencia consecutiva en la final a cuatro de la Youth League. La preparaci¨®n del duelo impidi¨® a Torres asistir el pasado mi¨¦rcoles al homenaje que el club le ofreci¨® a Diego Pablo Simeone por ser el entrenador con m¨¢s partidos en la historia del club. Grab¨® un mensaje en su despacho para el que fuera su compa?ero y t¨¦cnico con una pizarra de imagen de fondo.

¡°A Fernando le gusta analizarlo todo como ¨¦l cree y luego escuchar nuestra opini¨®n y preguntarnos. Tambi¨¦n es muy pasional¡±, cuenta su segundo, Ricardo Ortega, hijo de Palito M¨ªnguez, extremo del Atl¨¦tico de principios de los a?os ochenta. Ambos se conocen desde que compartieran vestuario en las categor¨ªas inferiores del Atl¨¦tico.

Ortega, como pocos, puede responder a la gran pregunta sobre las principales influencias que puede tener un exjugador que cuenta con una larga relaci¨®n de variopintos t¨¦cnicos de primer nivel que le dirigieron: Ben¨ªtez, Ancelotti, Mourinho, Simeone, Aragon¨¦s, Bianchi, Del Bosque... ¡°El que m¨¢s le ha marcado ha sido Luis Aragon¨¦s. Le ayud¨® a entender el f¨²tbol, a formarse, y con Rafa Ben¨ªtez dio un salto de calidad en su carrera¡±.

¡°M¨¢s que por los entrenadores que tuvo, creo que lo que ten¨ªa era una claridad sobre cu¨¢l era su filosof¨ªa de juego y a partir de aqu¨ª, c¨®mo ¨¦l la quer¨ªa trasladar y llevar a cabo en su equipo, tanto a nivel de filosof¨ªa de juego, incluso por demarcaciones de lo que quer¨ªa de cada uno de sus futbolistas. Para m¨ª uno de sus grandes potenciales es la capacidad de mejora que tienen sus jugadores futbol¨ªsticamente y emocionalmente¡±, advierte Israel L¨®pez.

Torres no tiene prisa por dar el salto a los banquillos profesionales. Lo normal es que la temporada que viene siga al frente del juvenil rojiblanco tras la renovaci¨®n por un a?o de Luis Garc¨ªa Tevenet como entrenador del Atl¨¦tico B, que milita en Segunda RFEF. ¡°En su carrera como jugador, siempre ha sabido elegir bien los momentos¡±, advierte Abraham Garc¨ªa.

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