La patada con el tiempo cumplido que aleja a Irlanda de la historia

Se agotan los segundos en Twickenham y el p¨²blico hace temblar la catedral londinense cuando el colegiado inclina el brazo y da la ventaja a los suyos. Una patada asequible voltear¨¢ el marcador, pero los de blanco siguen embistiendo con ese colch¨®n. Cualquier error tiene indulto y Marcus Smith emboca el bal¨®n entre palos tras un bote pronto con el tiempo cumplido y pone el 23-22. Una patada que, cuanto menos, retrasa el alir¨®n de Irlanda y, sobre todo, le priva de su lugar en el pante¨®n del rugby, pues el XV del Tr¨¦bol aspiraba a ser la primera selecci¨®n en la historia del Seis Naciones que no solo defiende t¨ªtulo, sino que gana dos Grand Slams ¨Cvencer todos los encuentros¨C consecutivos. Pese al chasco, tiene en su mano llevarse el trofeo, algo que har¨¢ si gana el s¨¢bado a Escocia en Dubl¨ªn en la ¨²ltima jornada, pero su jaque a la historia se perdi¨® en la capital del imperio.

El peor partido de Irlanda en dos a?os termin¨® en derrota, por m¨¢s que Inglaterra se empe?¨® en no sellar el ata¨²d. La selecci¨®n que hab¨ªa marcado un abismo con el resto ¡ªno solo gan¨® sus tres primeros partidos, sino que lo hizo con el punto bonus ofensivo por anotar cuatro ensayos¡ª lleg¨® sin carga el¨¦ctrica a Londres ante un rival que impuso el estilo de juego: menos ritmo, m¨¢s pericia en espacios reducidos. Las descargas veloces con las que el XV del Tr¨¦bol somete a las delanteras rivales no aparecieron; se jug¨® en las trincheras, ensuciando balones, jugando al pie.

El XV de la Rosa puso una camisa de fuerza a su rival y recobr¨® su tocada autoestima tras dos victorias dubitativas ante Italia y Gales y una derrota en Edimburgo y es ahora la alternativa a Irlanda: tendr¨ªa que ganar con punto bonus en Par¨ªs y que el XV del Tr¨¦bol cayera ante Escocia sin sumar el bonus defensivo de perder por siete puntos o menos. Los escoceses y Francia ¡ªsi gana hoy con bonus a Gales¡ª llegar¨ªan con opciones matem¨¢ticas, pero no realistas, pues su asalto requerir¨ªa voltear una diferencia de puntos de +76 a favor de los verdes.

James Lowe, el gran anotador irland¨¦s, estuvo cerca de salvar el mal d¨ªa de su selecci¨®n con dos ensayos poderosos sobre la l¨ªnea de cal. El segundo, en el que impuso su talla ante el intento imposible de placaje del menudo Marcus Smith, pon¨ªa por delante a los suyos, pero Crowley fall¨® una conversi¨®n clave que hubiera obligado a los ingleses a ensayar para llevarse la victoria. Fue la en¨¦sima patada errada de una tarde fat¨ªdica para los pateadores, con George Ford fallando tr¨¢mites. La ansiedad inglesa se tradujo en un sinf¨ªn de errores no forzados, pero su dominio de la narrativa tuvo premio sobre la bocina.

Ese final ag¨®nico lo posibilit¨® Italia, que le allan¨® el trabajo a Irlanda convirtiendo al fin su notable mejora de los ¨²ltimos dos a?os en victoria ante Escocia (31-29). A la postre fue una patada de Palo Garbisi ¨Cfall¨® con el tiempo cumplido en febrero el golpe de castigo para una hist¨®rica victoria en Par¨ªs que finalmente termin¨® en empate¨C la que marc¨® la diferencia ante el entonces segundo clasificado, que hubiera obligado a los verdes a ganar con punto bonus ofensivo para llevarse el torneo de haber hecho lo propio en Roma.

Fue una demostraci¨®n de car¨¢cter de Italia, que aguant¨® sin desmoronarse ante una fluida primera hora del ataque escoc¨¦s, hilando el empuje de la delantera con la resoluci¨®n de sus felinos. Un partido que gir¨® de forma dram¨¢tica en los primeros compases de la segunda parte: de lo que parec¨ªa el ensayo decisivo ¡ªel cuarto¡ª de Horne a una revisi¨®n de video que llevaba la pelota un minuto despu¨¦s a la zona de marca escocesa: del 16-29 al 21-22.

Italia se subi¨® al tren an¨ªmico y aliment¨® las dudas escocesas, err¨¢ticos con el bal¨®n, incapaces de mantenerlo, de salir de su campo. Los locales transformaron el dominio territorial en ensayos en el apogeo de su delantera. El equipo condenado por sus errores encontr¨® la fiabilidad. Y la disciplina, rechazado el ¨²ltimo ataque escoc¨¦s sin permitir un golpe de castigo letal, sin que el ¨¢rbitro inclinara el brazo, como ocurri¨® en Londres. Es la primera victoria italiana en casa en un Seis Naciones en 11 a?os y su segunda desde 2015.

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