El trail revive la cuenca minera del Sil
La Carrera Alto Sil es el d¨ªa grande del a?o en varios enclaves en peligro de extinci¨®n demogr¨¢fico conectados por un recorrido de 34 kil¨®metros
Primout es la prueba de que la belleza de un lugar est¨¢ vinculada a lo que cuesta llegar a ¨¦l. Este enclave del municipio de P¨¢ramo del Sil (Le¨®n), con sus tejados de pizarra y casas vetustas a la orilla del r¨ªo hom¨®nimo, solo es accesible por una compleja pista forestal. ¡°Se puede llegar si no le tienes mucho cari?o al coche¡±, avisan los organizadores de la Carrera Alto Sil con el humor de que les caracteriza, pues su lema extraoficial es #quesejodan, en referencia a las sorpresas que reciben los corredores cada a?o. Precisamente por eso no se repite el recorrido, pero el paso por el pueblo del encanto es innegociable. Y el latido vuelve a sus calles, unos decibelios que superan a los de la fiesta de San Miguel el ¨²ltimo fin de semana de julio. As¨ª es c¨®mo el trail revive un museo del Bierzo en peligro de extinci¨®n demogr¨¢fico.
El ocaso de la miner¨ªa y el cierre de una central el¨¦ctrica en Anllares del Sil cuestionaron el futuro de muchos pueblos de la Sierra de Gistredo, una herida que no esconde el urbanismo caduco a los pies de la carretera que conecta el lugar con Ponferrada. Pero una idea pululaba por la mente de Lolo D¨ªez, un monta?ero que siempre tiene un chiste listo. En sus expediciones hablaba de una carrera que devolviera el pulso a la tierra que ve¨ªa morir d¨ªa a d¨ªa. El evento surgi¨® en 2009 con una prueba de treinta y tantos kil¨®metros con salida y meta en Santa Cruz del Sil, otra localidad de P¨¢ramo que tambi¨¦n pone en riesgo el coche, con una cuesta de a¨²pa y un par de curvas cerradas para dejar el veh¨ªculo en un amplio prado.
Su imagen de marca es precisamente ese parking improvisado repleto de veh¨ªculos: ¡°Nosotros vemos una cuenca minera, con todos los alojamientos llenos en temporada baja. Vemos la restauraci¨®n a rebosar de gente sonriente. Vemos consumo en los comercios de nuestra zona¡±. Una cita fija en el calendario ¡ªel ¨²ltimo fin de semana del invierno¡ª y el d¨ªa grande del a?o. Con una paella que revive a los m¨¢s de 500 corredores que se atrevieron a salir en una de las ediciones m¨¢s duras, pues casi la mitad del recorrido estaba cubierta de nieve, con tramos de m¨¢s de un metro de espesor. En ediciones m¨¢s apacibles, la cifra de inscritos roza el millar. Despu¨¦s del arroz, un DJ a media tarde y un concierto por la noche. Ni en las fiestas.
El invierno se agota con una carrera de 34,2 kil¨®metros y m¨¢s de 1.900 metros de desnivel positivo, con nieve desde el kil¨®metro 11 hasta despu¨¦s del 30, que corona a los campeones de Castilla y Le¨®n de 2024. No hay bares en Santa Cruz de Sil, solo un amplio garaje vecino a la plaza para recoger los dorsales. Desde all¨ª, con un speaker atronador, arrancan las hostilidades a las 9:00 horas, con un amplio material obligatorio para evitar disgustos: mallas por debajo de las rodillas, guantes, gorro o manta t¨¦rmica. La cosa empieza con un ramp¨®n asfaltado; poco despu¨¦s, en P¨¢ramo de Sil, con sus adoquines h¨²medos junto al r¨ªo, toca corretear una treintena de escaleras.
Pero Lolo cuenta este a?o con un aliado para su men¨² de torturas, esa nieve que evoca al alpinismo y que impide correr pendientes moderadas. Salir de la huella es una temeridad que hunde esa zapatilla tan transpirable y congela el pie. Mantener el equilibrio y seguir avanzando es tarea suficiente. La prueba es que el ganador, Jaime Romo, hizo 4h2m49s ¡ªMarta Mart¨ªnez fue la m¨¢s r¨¢pida con 4h14m14s¡ª en una carrera en la que el ganador suele bajar de las tres horas. Pedrosillo, a 1.838 metros de altitud, marca el techo del recorrido y el inicio de un descenso horrendo. Porque cuesta abajo no basta con andar: el trote es imperativo y facilita abandonar la huella. Rodillas atascadas en la nieve fr¨ªa, manos heladas cuando toca levantarse. Despu¨¦s, una bra?a paralela al cauce del r¨ªo: kil¨®metros y kil¨®metros corriendo entre piedras y agua, a veces por encima de las rodillas. ¡°?Ni un kil¨®metro bueno!¡±, resum¨ªa hastiado uno de esos corredores que deben beber medio litro de agua a la hora y mantener la energ¨ªa con geles de cafe¨ªna. As¨ª es el turista que resucita una cuenca minera, el que la siente en sus piernas.
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.