Las cuentas de Joan Laporta
El presidente gana tiempo y disfruta tanto del momento que puede justificar la salida de G¨¹ndogan por una cuesti¨®n deportiva con consecuencias econ¨®micas y no por razones econ¨®micas que afectan tambi¨¦n a las deportivas
Las cuentas son muy f¨¢ciles de explicar con el marcador a favor, incluso se puede presumir de que si no son mejores es porque no se ha querido, como bien sabe Laporta. El presidente habl¨® desde el liderato de la Liga para los socios y tambi¨¦n para la oposici¨®n que se empieza a visualizar por entender precisamente que los n¨²meros no cuadran y est¨¢ en riesgo la salud del Bar?a. Ya se sabe que no es lo mismo contar que interpretar un balance econ¨®mico, sobre todo cuando hay de por medio un traspaso de poderes, como se vio precisamente el d¨ªa que Laporta dio paso a Rosell en 2010. El mandatario saliente presumi¨® de beneficios y el entrante denunci¨® una deuda que acab¨® en una acci¨®n de responsabilidad tan mal planteada que se convirti¨® en un boomerang para Rosell y dio la raz¨®n a Laporta.
El presidente siempre ha sido un administrador tan discutido como elogiado es su criterio deportivo desde el fichaje de Rijkaard y despu¨¦s de Guardiola con el asesoramiento de Cruyff. Ahora aspira a acertar con Flick por m¨¢s que adjudique el fichaje del entrenador alem¨¢n a Deco en un intento de reivindicar la figura de un director deportivo que act¨²a condicionado por la falta de liquidez del Bar?a. No ha habido m¨¢s fichaje que el de Dani Olmo y el de Pau V¨ªctor porque no se dio la posibilidad de inscribir a ning¨²n futbolista m¨¢s en la Liga. La hoja de ruta de Laporta desde su regreso ha estado presidida por el mercadeo, por mover varios jugadores y por la fuente inagotable de recursos de La Masia, convertida ahora mismo en el pilar no solo de los equipos inferiores, sino tambi¨¦n de la plantilla profesional de Flick.
Ya se ver¨¢ qu¨¦ pasa en invierno en funci¨®n de la Liga y de la Champions. Laporta gana tiempo y, por ahora, disfruta tanto del momento que puede justificar la salida de G¨¹ndogan por una cuesti¨®n deportiva con consecuencias econ¨®micas y no por razones econ¨®micas que afectan tambi¨¦n a las deportivas, de acuerdo al relato del propio futbolista a su regreso a M¨¢nchester. El presidente sabe de todas maneras que para el club es m¨¢s f¨¢cil obtener recursos cuando el equipo funciona que en los momentos de apuro vividos la pasada temporada, saldada en blanco y con el adi¨®s de Xavi, el sucesor del destituido Koeman. No hay que olvidar tampoco que la instituci¨®n empezar¨¢ a celebrar en noviembre su 125 aniversario y que la afici¨®n ya podr¨¢ volver durante la temporada a un Camp Nou reformado y convertido en uno de los iconos de Barcelona.
La activaci¨®n social ya se nota en Montju?c despu¨¦s de un a?o de excedencia y tambi¨¦n en distintos grupos cr¨ªticos con la gesti¨®n de Laporta. El presidente tuvo un recuerdo velado para ambos: estuvo muy generoso con los socios, a los que la crisis no les ha costado ni un c¨¦ntimo a pesar de ser propietarios del club, y vigilante con la oposici¨®n y con los que a su entender quieren el mal del Bar?a. Los que discrepan de Laporta subrayan precisamente la p¨¦sima gesti¨®n del presidente y por tanto necesitar¨¢n m¨¢s n¨²meros que palabras, una vez que ya se ha visto que las mentiras caducan en el Camp Nou. No deber¨ªan olvidar en cualquier caso que el presidente domina el aparato y las claves necesarias para ejercer su mandato por dif¨ªcil que resulte gobernar al Bar?a.
Laporta ha ganado las elecciones y tambi¨¦n las ha perdido, promovi¨® una moci¨®n de censura y tambi¨¦n sufri¨® una en contra y ahora mismo, camino de los fastos azulgrana que han despertado a los presuntos precandidatos, parece sentirse m¨¢s a gusto que nunca en un cargo que ha dise?ado a su medida y que apenas necesita de compa?¨ªa despu¨¦s de la salida del club de centenares de ejecutivos y algunos directivos llegados en 2021. El presidente ni siquiera necesit¨® citar a Nico Williams para adornar su ¨²ltimo discurso ni admitir que, a fin de cuentas, una vez apuradas las palancas y las hipotecas, sigue faltando el mismo dinero de siempre, aquel que ahora llegar¨¢ m¨¢s r¨¢pido y mejor porque el Bar?a es l¨ªder de la Liga.
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