Yulimar Rojas: ¡°Soy un ave f¨¦nix renacida de la mejor manera, m¨¢s fuerte, con mejor brillo¡±
La campeona ol¨ªmpica y plusmarquista mundial de triple salto desprende jovialidad y alegr¨ªa en su primera entrevista 11 meses despu¨¦s de romperse el tend¨®n de Aquiles. Hoy vuelve a competir


Marzo enga?a, se promete de primavera y es invierno gris, viento oscuro, en la pista de atletismo de Guadalajara al mediod¨ªa, pero, progresivamente, seg¨²n aumenta el volumen de una m¨²sica que llega de la calle, ¡°b¨¦same en la boca¡±, pide Pedro Arroyo, crece la luz. Se acerca la reina, Yulimar Rojas. ¡°Antes de verla, oir¨¢s que llega¡±, ha advertido H¨¦ctor Santos, atleta de longitud en eterna lucha contra una lesi¨®n, y sonr¨ªe pese a ello, y m¨¢s cuando, y ya la m¨²sica atruena y son ahora Machi & Daddy cantando ¡°p¨¢same la botella, voy a beber en nombre de ella¡±, la atleta feliz, bailarina, incapaz de estar quieta un segundo, pisa la pista. Y ni la seriedad de trabajador concienzudo de Iv¨¢n Pedroso resiste la prueba. Todos r¨ªen. Est¨¢ Yulimar. Mochila en los hombros, loro gigantesco atronador en la mano derecha, gafas at¨®micas, con tejadito para la nariz. Ha vuelto. Que se haga la luz. Un junco (1,93m y 72 kilos) que mueve al viento, que lo hace bailar con ella, mientras calienta al ritmo de la salsa en el centro de la pista. Hace casi 11 meses, el 12 de abril de 2024, la imbatible plusmarquista mundial de triple salto (15,74m), campeona ol¨ªmpica, siete veces campeona mundial, se rompi¨® el tend¨®n de Aquiles del pie izquierdo en un entrenamiento. Operaci¨®n en la cl¨ªnica Cemtro por los doctores Pedro Guill¨¦n y Tom¨¢s Fern¨¢ndez Ja¨¦n, recuperaci¨®n y rehabilitaci¨®n en CAR de Sant Cugat a manos del fisioterapeuta Miquel ?ngel Cos. As¨ª, hasta diciembre pasado, ocho meses. Adi¨®s, Par¨ªs. Adi¨®s, sue?os. Bienvenidas, pesadillas. Pese a la luz, pese al sol, frente a ella, preguntando, la aprensi¨®n es inevitable. ?Qui¨¦n es ahora Yulimar? ¡°Soy la misma, la misma, siempre alegre, entusiasmada, con deseo, con hambre de triunfo, siendo la misma ni?a jovial, aut¨¦ntica, cari?osa, sencilla y con un entusiasmo en la pista que contagia a quien sea¡±, dice, pausada, un segundo entre cada palabra, con tiempo para saborearlas. Es la primera entrevista que concede la atleta venezolana desde que se rompi¨®. Apenas dos meses y medio despu¨¦s de recibir el alta, Yulimar Rojas, de 29 a?os, se siente nueva, completa, competitiva. Vuelve a saltar. Longitud solo. El domingo, en el pabell¨®n de Salamanca.
Pregunta. ?C¨®mo definir¨ªa su estado de ¨¢nimo en su regreso?
Respuesta. Ahorita, estar de nuevo en la pista, es un privilegio, un honor y, sobre todo, una profunda felicidad, una sensaci¨®n de paz que me da estar nuevamente con mi vida, que es esto, el atletismo. Mi raz¨®n de ser, mi felicidad.
P. ?Qu¨¦ recuerda de aquel 12 de abril?
R. Me encontraba muy bien, estaba teniendo unos excelentes entrenamientos, estaba incre¨ªble, pero, en un momento, todo se desvaneci¨® as¨ª [chasca los dedos] en un crac, porque no lo ves venir. Es algo que puede suceder, as¨ª sea que est¨¦s caminando por la calle y te falle el pie un poco, y zas. Yo tampoco es que sintiera molestias en el tend¨®n. Fue as¨ª, de la nada, pero ahora lo entiendo como algo que ten¨ªa que pasar para darme cuenta de que a¨²n queda mucho que dar, que esto es solo el comienzo de una nueva Yulimar, rejuvenecida, reconfortada, recompuesta y con mucha hambre de triunfo, con muchas ganas de seguir triunfando, de seguir dejando huella en el atletismo.
La recuperaci¨®n puede ser buena con las m¨¢quinas, con el trabajo con el fisio, pero si no la trabajas desde el coraz¨®n y desde la cabeza, se va a complicar
P. Habla ahora tan contenta que hasta parece que la recuperaci¨®n fuera un periodo de felicidad¡
R. Pero al principio cost¨® mucho, doli¨® mucho. No entend¨ªa por qu¨¦ me estaba pasando eso a m¨ª justo en el momento que menos quer¨ªa que me pasara algo [a solo cuatro meses de los Juegos de Par¨ªs, en los que deb¨ªa defender el oro ol¨ªmpico de Tokio] pero, ya casi un a?o despu¨¦s de mi lesi¨®n, estoy completamente recuperada, tanto en la parte interna, la parte mental, como en la parte externa.
P. ?C¨®mo fue tener que vivir en Barcelona e ir al gimnasio para recuperarse?
R. Fue duro. Al principio, el hecho de verme as¨ª, en muletas, el hecho de tener que irme de mi casa, de mi gente, y empezar una nueva etapa con [el fisioterapeuta] Miquel ?ngel... no me lo cre¨ªa. Recuerdo el momento que llegu¨¦ al CAR para directamente ya empezar la recuperaci¨®n. Fui al servicio m¨¦dico, me devast¨¦ y me entr¨® un desespero total que solamente lo pude calmar con l¨¢grimas y fue duro. No s¨¦, nunca te esperas eso. Nunca piensas que algo as¨ª te pueda suceder, tan sana que estaba haciendo mi carrera. Psicol¨®gicamente te golpea.

P. ?C¨®mo lo super¨®?
R. Fue como una conquista. El proceso de estar con Miquel ?ngel, de ir poco a poco congeniando ¨¦l y yo, de ir logrando la cercan¨ªa para que la estad¨ªa en Barcelona y el proceso de recuperaci¨®n fuesen m¨¢s r¨¢pido. La recuperaci¨®n puede ser buena con las m¨¢quinas, con el trabajo con el fisio, pero si no la trabajas de aqu¨ª, desde el coraz¨®n y desde la cabeza, va a tardar m¨¢s, se va a complicar. El trato en Barcelona, la amabilidad, el cari?o, la admiraci¨®n¡ Estaba rodeada de campeones y yo, al verme all¨ª, al principio me sent¨ª as¨ª como que, bueno, ser¨¢ que voy a encajar all¨ª con los chicos, c¨®mo va a ser el trato, pero a medida que fue pasando el tiempo, fui sinti¨¦ndome m¨¢s a gusto y cada d¨ªa que pasaba era un d¨ªa m¨¢s que me sent¨ªa con m¨¢s hambre y anhelando volver y de que llegara el momento de estar en el sitio que me corresponde.
P. ?Le dejaron poner su m¨²sica alta?
R. S¨ª, s¨ª, eso era todos los d¨ªas. Todos dec¨ªan ¡®d¨®nde est¨¢ Yulimar¡¯; cada vez que escuchaban algo dec¨ªan ¡®ah¨ª viene Yulimar¡¯, porque lo primero que se escucha es la m¨²sica. Al momento que dej¨¦ el CAR, la mayor¨ªa de las personas que estaban all¨ª, sobre todo las que limpiaban, dec¨ªan: ¡®Te vamos a echar de menos, vamos a extra?ar esa felicidad. Te queremos ver compitiendo, te queremos ver as¨ª feliz¡¯. Yo creo que hice muchos amigos all¨ª, me hicieron sentir como en casa, y, a pesar de que haya sido un proceso de recuperaci¨®n y de sanaci¨®n, para m¨ª pas¨® volando.
P. Usted, que hace f¨¢cil lo imposible, ?ha descubierto que es fr¨¢gil, que lo suyo no es magia?
R. Claro... ?Sabe qu¨¦?, las lesiones son complejas y cuando vas a un quir¨®fano, nunca sabes qu¨¦ va a pasar. Nunca sabes si van a hacer un gran trabajo, si el proceso de operaci¨®n ser¨¢ ¨®ptimo. Buscamos la soluci¨®n en la parte quir¨²rgica para que el pie quedase con la mejor potencia posible y que la fisioterapia pudiera hacer su trabajo. Intentamos dejar la mejor potencia para que a pesar de que hubiera habido una rotura, mi pie y mi tend¨®n fuesen lo m¨¢s reactivos posible.
Los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs fueron un antes y un despu¨¦s. El nuevo ciclo ol¨ªmpico, cueste lo que cueste, va a ser para m¨ª
P. ?Y es as¨ª?
R. En el quir¨®fano de la cl¨ªnica Cemtro, los doctores Pedro Guill¨¦n y Tom¨¢s Fern¨¢ndez Ja¨¦n hicieron un gran trabajo. Hasta ahora no he notado la diferencia. En el proceso de recuperaci¨®n y en el entrenamiento he tenido unas sensaciones ¨®ptimas, y el tend¨®n y la capacidad para rebotar me han parecido como si no hubiese pasado nada. Las ansias que tengo de que llegue el verano para probarlo. Estamos haciendo tipos de salto, tipos de rebote, con dos pies, con pies juntos, con un pie, y responde muy bien. Mejor de lo que esperaba.
P. ?En qu¨¦ pie fue?
R. Fue en el pie del segundo bote, el pie del paso. Estas lesiones son m¨¢s complicadas cuando son en el pie de batida. As¨ª la mejora es m¨¢s f¨¢cil. Lo he visto reflejado en los entrenamientos, cada d¨ªa me voy sintiendo mejor.
P. ?C¨®mo afront¨® los entrenamientos con Pedroso?
R. Este invierno hemos estado trabajando la capacidad de reaccionar el cerebro ante el miedo, la sensaci¨®n de pisar y de tener algunas molestias, para ir perdiendo ese miedo e ir ganando confianza a la hora de saltar. Entrenar, entrenar, ganar, esta sensaci¨®n de que puedo tener confianza a la hora de correr, de que no va a pasar nada, de que psicol¨®gicamente ya el miedo a pisar est¨¢ superado. Esa es una batalla en la que muchos deportistas sufren, ya que la parte psicol¨®gica afecta... Hemos tenido la sensaci¨®n de que mejor¨¢bamos desde ese punto, siendo muy meticulosos con los detalles.
P. No compite desde septiembre de 2023, hace casi 18 meses, y en su regreso lo har¨¢ en longitud, no en triple. ?Por precauci¨®n?
R. Es sobre todo por intentar ganar confianza lo que queda de la temporada de invierno, que es supercorta. Intentar¨¦ clasificarme para los Mundiales indoor de China [21 a 23 de marzo]. Apenas me dieron el alta a finales de diciembre, ten¨ªa que volver a casa, adaptarme de nuevo al entrenamiento, volver con mi grupo. El proceso de readaptaci¨®n y de vuelta a los entrenamientos intensos lleva su tiempo, y aunque solamente han pasado dos meses, han valido la pena y han sido incre¨ªbles. El salto largo, aparte de que es la pierna que no ha sido tocada, me va a dar confianza. Competir me va a dar la serenidad para afrontar la temporada de verano de la mejor manera ya desde el primer momento. Pero no voy a dejar el triple.
P. Pese a todo su dolor, estuvo en Par¨ªs asistiendo todos los d¨ªas al estadio durante los Juegos.
R. Fue un impacto fuerte porque cada deportista tiene ese objetivo en el coraz¨®n. Fue duro porque hab¨ªa visualizado que iba a estar en la pista levantando la bandera de mi pa¨ªs en mi mejor momento... Pero creo que vivirlo de esa forma tambi¨¦n me ayud¨® mucho y me sent¨ª privilegiada de ser parte de la historia viendo como Tea Lafond conquistaba el oro. Yo estaba all¨ª aplaudiendo y sinti¨¦ndome feliz porque estaba cerrando una etapa. Estos Juegos Ol¨ªmpicos para m¨ª fueron un antes y un despu¨¦s. Estaba dejando atr¨¢s todo el dolor de la lesi¨®n, todo el dolor de la recuperaci¨®n, consciente de que estaba comenzando un nuevo ciclo ol¨ªmpico que, cueste lo que cueste, va a ser para m¨ª.
P. ?Y volar en Los Angeles 2028 como un ¨¢ngel?
R. Totalmente. Un ¨¢ngel. Un ave f¨¦nix renacido de la mejor manera, m¨¢s fuerte, con m¨¢s brillo. Un ¨¢ngel que emergi¨® de las cenizas y que ahora viene a recuperar lo que le pertenece, lo que s¨¦ que es m¨ªo, lo que me est¨¢ esperando para que vaya por ello.
P. ?Ha mantenido muy bien el peso gracias al baile?
R. Mi cuerpo es mi templo y ten¨ªa que hacer todo lo posible para que estuviera perfecto, mantenerme fina, y que a la hora de volver a las pistas no me costara tanto. Mi rutina siempre ha sido la misma. La autoestima, el carisma, la alegr¨ªa, eso tambi¨¦n influye a la hora de la recuperaci¨®n y del trabajo del peso.
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