C¨®mo un mensaje de Facebook desde Caracas hizo nacer la factor¨ªa de atletismo de Iv¨¢n Pedroso

La Fuente de la Ni?a es casi Maranello, una f¨¢brica de campeones desde cuyos muelles de reparto salen expr¨¦s valiosos productos a conquistar el mercado y la gloria del atletismo espa?ol, y el mundial. Al frente, en su oficina del estadio de atletismo de Guadalajara, esto es, paseando junto a los fosos de arena, por los pasillos de la zona de saltos, su m¨¢ximo responsable, Iv¨¢n Pedroso.

Yulimar Rojas, la campeona ol¨ªmpica y plusmarquista mundial de triple salto, descansa el fin de semana con una peque?a contractura en el psoas, as¨ª que Pedroso vol¨® el s¨¢bado a Par¨ªs para guiar en el meeting de la Diamond League hacia la victoria a Jordan D¨ªaz, el plusmarquista espa?ol (17,76m) y gran futuro del triple salto mundial, quien, con un salto de 17,66m, super¨® por un cent¨ªmetro al cubano Andy D¨ªaz y por 17 al campe¨®n ol¨ªmpico, Pedro Pablo Pichardo (17,49m). F¨¢tima Diame, la mejor saltadora espa?ola del momento, y Tessy Ebosele, subcampeona mundial y europea j¨²nior de triple salto, saltaron el jueves en Castell¨®n, y tambi¨¦n H¨¦ctor Santos, saltador de longitud que le pisa los talones a Eusebio C¨¢ceres, el mejor espa?ol, y Huang Changzhou, el mejor saltador chino. Solo la medallista ol¨ªmpica Ana Peleteiro, embarazada, descansa.

Es la factor¨ªa Pedroso, el grupo de entrenamiento del que sale la mejor calidad, los ferraris del salto. ¡°Desde un principio el objetivo era este, llegar a la elite como entrenador¡±, cuenta Pedroso, cubano de 49 a?os, quien, como saltador de longitud de 8,71m fue campe¨®n ol¨ªmpico en Sidney 2000 y nueve veces campe¨®n mundial, y que llevaba a?os viviendo en Guadalajara. ¡°Empec¨¦ en realidad hace 11 a?os entrenando a Teddy Tamgho [triplista franc¨¦s, campe¨®n del mundo en 2013, uno de los seis que en la historia han pasado de 18 metros]. Fue ¨¦l quien me dio toda la fuerza que tengo ahora para ejercer esta profesi¨®n, y ahora es mi socio en el grupo. Luego lleg¨® Ruth Ndoumb¨¦ [triplista espa?ola que se retir¨® joven tras una grave lesi¨®n de rodilla], y luego, por Facebook, cog¨ª a Yulimar Rojas...¡±

Y, entonces, de repente, como si la zona de saltos de la pista de atletismo, tan pegada a la A2, fuera en realidad un escenario en el que se representa una obra teatral, esplendor de auge de Iv¨¢n Pedroso, o algo as¨ª, la voz del campe¨®n cubano queda enterrada bajo el sonido abrumador del reguet¨®n que brota del gran altavoz que la mism¨ªsima Yulimar Rojas, la reina de los parajes, ha plantado en mitad del c¨¦sped. Y esa es la se?al para que ella, la mujer de los 15,74m, que alg¨²n d¨ªa ser¨¢n 16m, y nadie como ella, entre en escena.

Una chispa en Caracas inicia la gran explosi¨®n. Verano de 2015. Yulimar Rojas, una ni?a casi, una atleta de 14 metros con sue?os grandes, le env¨ªa a Pedroso un mensaje por Facebook. ?Me entrenar¨ªas? Sabe de Pedroso porque un par de veranos antes, viendo el Mundial de Mosc¨² por la tele, vio a Tamgho, ganador, abrazarse al cubano, su entrenador, y se dijo ya entonces, quiero que me entrene ese hombre. ¡°No, imag¨ªnate. Yo abr¨ª la brecha para que todos se decidieran... Enviar el mensaje, recibir el s¨ª, luego venir a Espa?a, empezar a entrenar en 2016, entrar en los planes de Iv¨¢n, la veteran¨ªa del maestro, lo que ¨¦l sab¨ªa...¡±, dice Rojas. ¡°Ha sido la mejor decisi¨®n. A ra¨ªz de esa decisi¨®n mira todo lo que ha pasado... Todos han decidido venir a este equipo. Y los resultados hablan por s¨ª solos. Eso es lo que te da el m¨¦rito, lo que hace que tu nombre est¨¦ en boca de todos¡±.

Y siguiendo el rastro de Yulimar maravillosa llegaron a la f¨¢brica de triplistas el portugu¨¦s Nelson ?vora, campe¨®n ol¨ªmpico en Pek¨ªn 2008, y su pareja entonces, Ana Peleteiro, que a¨²n buscaba estabilizarse despu¨¦s de la crisis que sigui¨® a su t¨ªtulo de campeona mundial j¨²nior en 2012. ¡°Es incre¨ªble, ?no? No lo hab¨ªa visto de esa forma, pero me enorgullece, me hace sentir privilegiada. A ra¨ªz de esos buenos logros que hemos logrado juntos, ha venido Ana, ha venido Nelson, ha venido todos los chicos de este a?o. Hemos creado un grupo bastante maravilloso, bastante unido, y a pesar de todo nos llevamos todos muy bien. Es lindo haber sido el comienzo de todo esto¡±, dice la campeona ol¨ªmpica de Tokio. ¡°Y me siento la l¨ªder de todos, s¨ª. Iv¨¢n me lo deja ver de esta forma, ?sabes? Por ejemplo, a veces cuando no concordamos en el tema de ir a Venezuela, que es uno de los puntos ah¨ª un poco a tratar, ir a mi pa¨ªs y pasarme del tiempo que tengo estipulado para tener vacaciones, entonces Iv¨¢n me dice, Yulimar, t¨² eres la l¨ªder, tienes que dar ejemplo, tienes que estar aqu¨ª tal d¨ªa que yo te diga, que todos te ven a ti, todos te ven como la base del equipo, s¨ª, s¨ª. Es eso. Yo tambi¨¦n me considero as¨ª. Trato de ser constante, de no bajar nunca el nivel, y mantener un respeto en el equipo. Estoy muy contenta de estar en este equipo. Me siento la l¨ªder, me siento la mam¨¢, la m¨¢s veterana...¡±

Pedroso oye tantas veces su nombre que se vuelve, mira, y entiende que es la se?al para que ¨¦l contin¨²e la narraci¨®n. ¡°Yuli es el centro del grupo, al igual que Ana tambi¨¦n. Y la presencia de Nelson desde que lleg¨®, al ser campe¨®n ol¨ªmpico, era muy importante para el grupo. Ahora todos se entrenan y miren a donde miren no hay un atleta que est¨¦ de relax, los atletas est¨¢n siempre con ambiciones, y esto es lo bueno que tiene el grupo, miren a donde miren siempre hay un atleta que est¨¢ entrenando a tope, y los anima a todos. Ana lleg¨® en un momento muy, muy especial, porque los atletas que tengo son atletas que est¨¢n encaminados, que tienen metas grandes, y Ana se incorpor¨® y poquito a poquito ya entr¨® en esa din¨¢mica de que quiere m¨¢s, quiere m¨¢s, y eso es lo que a m¨ª me interesa, m¨¢s que todo¡±, dice Pedroso. ¡°Me interesan solo los atletas con ambici¨®n, que no se entrenen solo porque quieren ganar alg¨²n dinero, no, quiero que sean de los que se entrenan porque les gusta, porque quieren llegar a lo m¨¢s alto, quieren ser los mejores. Eso es lo que busco en mis atletas¡±.

Y Yulimar a?ade, claro, que su ejemplo es la luz que deben seguir. ¡°Si Yulimar puede, yo puedo¡±, dice la saltadora venezolana, y que es as¨ª, con esa disposici¨®n mental, con la que llegan los nuevos que se han sumado este a?o, Diame, Santos, Ebosele¡­ ¡°Es as¨ª. Todo se puede lograr si trabajas para eso. Si lo tienes en mente, si nunca desistes, si nunca bajas los brazos, si nunca dices que no a nada... Por ejemplo, Iv¨¢n te dice, hoy, hoy tienes 12 de 150, o 12 de 120, o tienes multisaltos, y vamos a la loma, vamos a la arena... Y no hay un no, siempre hay unas ganas de hacerlo, de hacerlo, de hacerlo, y yo creo que eso marca la diferencia... Tienen mucha ambici¨®n de conseguir sus t¨ªtulos, y de hacerse un nombre en la elite del mundo¡±.

¡°Trato de que todos sean parejos. Tengo fuertes, tengo r¨¢pidos... Y trato de llevarles todo al mismo nivel... Ebosele es fuerte y estoy m¨¢s en la t¨¦cnica¡­¡±, explica Pedroso. ¡°Estoy haciendo con ellos el trabajo que hice yo con mi entrenador en Cuba, Mil¨¢n Matos, que nos fuimos un poco de los sistemas... Admir¨¢bamos la forma de trabajar de los americanos, que eran muy r¨¢pidos, y de los rusos, que eran todos muy fuertes. Al unirlo todo debes tenerlo todo parejo, ni muy fuerte, ni muy r¨¢pido, todo al par, y as¨ª es m¨¢s efectivo. Hay que escucharles constantemente a los atletas. Tambi¨¦n ellos saben todos los t¨ªtulos que yo tuve y todas las cosas que he tenido. Y yo siempre se lo digo, ?quieren tener todos mis t¨ªtulos? Pues tienen que entrenar. No relajo a nadie. Siempre mantengo la tensi¨®n, planteando objetivos m¨¢s dif¨ªciles. Y, ahora, mejor porque hay saltadores de longitud, triplistas, femeninas, masculinos... No es uno solo como antes... Mientras m¨¢s atletas de la misma especialidad est¨¦n juntos, el entrenamiento te sale autom¨¢ticamente, porque siempre miras al lado y ves, como diciendo, este lo est¨¢ haciendo bien, yo tambi¨¦n. Eso es lo bueno de tener un grupo as¨ª¡­¡±

¡°Yo no estar¨¦ nunca en una oficina, yo, siempre en la pista¡±, dice el jefe de todo eso. Y mira so?ador m¨¢s all¨¢ de la autopista que flanquea el estadio, y los camiones y su ruido¡­ Y del pasillo de al lado, en el que su compatriota Luis Felipe M¨¦liz entrena a otras futuras estrellas del salto, como el cubano Lester Lescay, campe¨®n ol¨ªmpico de la juventud, o el peruano Jos¨¦ Luis Mandros, y m¨¢s all¨¢, en el saltadero de altura, Javier Sotomayor trabaja con su hijo Jaxier. ¡°Estamos aqu¨ª de momento, y mi ni?a me ata aqu¨ª, pero que alguien lo vea y alguien me d¨¦ la oportunidad de montar una academia o algo¡­ pero tiene que venir alguien¡±.

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