Pulso entre la federaci¨®n y las futbolistas: Montse Tom¨¦ ofrece una lista de 23 jugadoras sin saber cu¨¢ntas acudir¨¢n a la llamada

El caso Rubiales y la crisis del f¨²tbol espa?ol est¨¢n lejos de resolverse. Incluso ahora que Espa?a ya cuenta con una lista de 23 convocadas para los pr¨®ximos partidos de la Nations League: contra Suecia este viernes 22 y frente a Suiza el martes 26. Nadie parece tener la certeza, sin embargo, de que las 23 vayan a presentarse este martes en Las Rozas despu¨¦s de que 15 de ellas difundieran un comunicado insistiendo en su negativa a vestir la camiseta de La Roja. La Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol (RFEF) y las jugadoras espa?olas, que emitieron el viernes pasado un comunicado exigiendo cambios profundos en el seno de la instituci¨®n, miden fuerzas en un pulso todav¨ªa sin fin. Un pulso que se recrudeci¨® cuando pasadas las 10 de la noche un buen n¨²mero de futbolistas, entre ellas muchas de las estrellas del ¨²ltimo Mundial, como Aitana Bonmat¨ª, Alexia Putellas, Irene Paredes o Cata Coll, adem¨¢s de otras de las que renunciaron a ir a ese torneo como Mapi Le¨®n o Patri Guijarro, y as¨ª hasta una quincena de jugadoras, insistieron en la idea de que no quer¨ªan ser convocadas con Espa?a.

Pese a que nada hab¨ªa cambiado desde el viernes, pese a que las futbolistas no informaron a la federaci¨®n de un cambio de postura, la nueva seleccionadora, Montse Tom¨¦, ofreci¨® su lista de 23 convocadas como si nada. Cit¨® a la mayor¨ªa de mundialistas e incluy¨® a otras como Mapi Le¨®n o Patri Guijarro, dos de las m¨¢s beligerantes en la crisis de las 15 -cuando una quincena de futbolistas renunci¨® a la selecci¨®n si no se produc¨ªan cambios estructurales en el femenino-; adem¨¢s, hizo creer en su alocuci¨®n posterior que la federaci¨®n hab¨ªa alcanzado finalmente un acuerdo con las jugadoras. No es as¨ª.

La RFEF entend¨ªa que las futbolistas son convocables porque en ning¨²n momento (hasta esta noche) expusieron por escrito su negativa a vestir la camiseta de La Roja: ¡°Mostraron su malestar, demandaron una serie de cambios, pero no renunciaron a la selecci¨®n¡±, se?alan desde Las Rozas. Y, puesto que de acuerdo con la Ley del Deporte hay que acudir a la llamada de la selecci¨®n, la federaci¨®n ha convocado a ¡°las mejores¡±. ¡°Las mejores futbolistas con las que podemos afrontar los partidos de una competici¨®n nueva y que nos prepara para estar en unos Juegos Ol¨ªmpicos¡±, en palabras de Tom¨¦, que utilizaba en la conferencia de prensa conceptos como empat¨ªa, confianza o comunicaci¨®n, que aseguraba haber hablado con las jugadoras y declaraba: ¡°Creemos que la manera de ayudarlas es estar cerca de ellas y escucharlas¡±.

En la lista de Tom¨¦, por cierto, no est¨¢ Jenni Hermoso, la delantera a la que bes¨® sin su consentimiento el ya expresidente de la RFEF Luis Rubiales. ¡°Comienza una etapa nueva¡±, expresaba en varias ocasiones Montse Tom¨¦, que ha explicado la ausencia de la delantera: ¡°Hemos cre¨ªdo que esta es la mejor manera de protegerla¡±. La federaci¨®n y las futbolistas hab¨ªan acercado posturas en las ¨²ltimas horas acerca de las reivindicaciones de las deportistas para mejorar sus condiciones de trabajo y poner fin a la etapa de Rubiales y el exseleccionador Jorge Vilda al frente del organismo. Sin embargo, ni las mundialistas respondieron a la ¨²ltima oferta de la federaci¨®n presidida hoy por Pedro Rocha, ni cambiaron de opini¨®n (mayoritariamente) tras anunciarse la lista de Tom¨¦.

La confecci¨®n de la lista se enmarcaba en una crisis latente desde la renuncia de 15 jugadoras en septiembre de 2022 y acentuada tras el beso que le plant¨® el ya expresidente Rubiales a Jenni Hermoso en plenas celebraciones por el t¨ªtulo mundial en S¨ªdney. Pocas horas despu¨¦s de ganar el Mundial, las jugadoras empezaron un plante que se ha prolongado hasta ahora. Y la RFEF respondi¨® este lunes con un nuevo comunicado en el que insist¨ªa en ¡°el compromiso p¨²blico adquirido [con las jugadoras] por la nueva direcci¨®n de la instituci¨®n¡±, ahora en manos del presidente interino, Pedro Rocha, delf¨ªn del dimitido Rubiales.

En una nota que hab¨ªan trasladado tambi¨¦n a las jugadoras, la federaci¨®n dice ser consciente ¡°de la necesidad de realizar cambios estructurales¡±, como las futbolistas exigen. Algo que, apuntan, Rocha ya ha comenzado a materializar en las ¨²ltimas fechas y les ha llevado a tomar ¡°decisiones dif¨ªciles en los ¨²ltimos d¨ªas¡±; tienen la convicci¨®n de que es ¡°necesaria una renovaci¨®n¡±. Por ello, a?ad¨ªa el comunicado, ¡°se insta a las jugadoras a sumarse a este cambio¡±. Pero las futbolistas vieron en esa nota un compromiso insuficiente.

La federaci¨®n, a trav¨¦s de la nueva interlocutora encargada de retomar las conversaciones, Loli Mart¨ªnez Madrona, ¨¢rbitra y delegada de Protecci¨®n de la Violencia Sexual en la RFEF, hab¨ªa dado un ultim¨¢tum a las mundialistas este pasado fin de semana. Deb¨ªan dar una respuesta antes de que terminara el domingo. Pero el reloj dio las 12 de la noche y en Las Rozas todav¨ªa no ten¨ªan noticias. Las jugadoras se fueron a la cama sin haber llegado a un acuerdo. Y sin acuerdo asistieron ayer al anuncio de la lista de convocadas por Tom¨¦.

Sobre la mesa las futbolistas contaban con una propuesta que la federaci¨®n entiende como m¨¢s que razonable. ¡°Hab¨ªan hablado sobre qu¨¦ hacer en todos los departamentos que se vieron involucrados en la gesti¨®n del caso de Jenni Hermoso. Pactaron de palabra que va a haber cambios y cu¨¢les van a ser esos cambios, pero ped¨ªan garant¨ªas de que ser¨¢ as¨ª. Las han enga?ado muchas veces antes¡±, se?alan fuentes del entorno de las campeonas del mundo. Las jugadoras no quer¨ªan dar un paso en falso. Por eso ped¨ªan que ese acuerdo quedara por escrito. Asumen que las destituciones y nuevos nombramientos no se pueden hacer de la noche a la ma?ana, pero quieren tener la seguridad de que no las est¨¢n embaucando, como ocurri¨® en su d¨ªa cuando se resolvi¨® la crisis de las 15 sin un compromiso firme de cambio. Se las presion¨® con la cercan¨ªa de la Copa del Mundo y result¨®. ¡°Pero para ellas el Mundial fue solo un par¨¦ntesis¡±, afirman las mismas fuentes. El compromiso de la RFEF lleg¨® en forma de comunicado. Y el comunicado no obtuvo respuesta antes de las 16.30, cuando apareci¨® Tom¨¦ por la sala de prensa de Las Rozas, sede de la RFEF.

Ahora, las jugadoras estudian qu¨¦ opciones legales tienen, conscientes de que negarse a una llamada de la selecci¨®n est¨¢ castigado con multa (de 3.000 a 30.000 euros) y hasta con retirada de la licencia.

La federaci¨®n hab¨ªa asumido el primer punto de los cinco que exig¨ªan las jugadoras: la remodelaci¨®n ¡°del organigrama del f¨²tbol femenino¡±, que deber¨ªa contar, adem¨¢s de con una seleccionadora, Tom¨¦, con una direcci¨®n deportiva y una persona responsable de las categor¨ªas inferiores, a imagen y semejanza de las estructuras de la selecci¨®n masculina. Pero, adem¨¢s, las jugadoras ped¨ªan una reestructuraci¨®n profunda del ¨®rgano federativo, as¨ª como depurar responsabilidades de entre todas las personas que no protegieron a Hermoso tras el incidente en S¨ªdney. Por ahora, solo ha salido el ya exseleccionador Jorge Vilda, adem¨¢s de Rubiales, obligado a dimitir por la presi¨®n social y pol¨ªtica.

Depurar responsabilidades

En el comunicado emitido por las futbolistas el pasado viernes, estas apuntaban en cinco puntos a una serie de personas y cargos de la RFEF, exig¨ªan una limpia. En los despachos de Las Rozas asumen que algunas de esas demandas responden a lo sucedido en el ¨²ltimo mes, a c¨®mo se comportaron y se movieron algunas de las personas m¨¢s cercanas al ya expresidente Luis Rubiales. Por ejemplo, Rub¨¦n Riveira, director de marketing, y Albert Luque, director deportivo de la selecci¨®n espa?ola, amigo y mano derecha de Rubiales. Riviera y Luque viajaron a Ibiza a finales de agosto para presionar a Hermoso y otras jugadoras para que apoyaran la versi¨®n del todav¨ªa entonces presidente. Entienden los federativos que las jugadoras exijan depurar responsabilidades en ese sentido. Sin embargo, ellas apuntan muchos otros nombres, conocidos en la casa, a pesar de no haber dado p¨²blicamente sus nombres y apellidos, y no en todos esos casos se ha argumentado por qu¨¦ los quieren fuera, explican desde Las Rozas. Ellas, sin embargo, consideran que todos esos cargos identificados estuvieron implicados de alguna u otra manera en la gesti¨®n del caso Rubiales y el beso no consentido a Jenni Hermoso: en los comunicados publicados, las presiones a la jugadora, sus familiares y sus compa?eras, en el descr¨¦dito a la futbolista madrile?a y su desprotecci¨®n ante un caso de abuso de poder. Ah¨ª entran otros nombres propios: Andreu Camps, secretario general, o Pablo Garc¨ªa Cuervo, director de comunicaci¨®n, que ya quedaron muy debilitados a ojos de las futbolistas tras la gesti¨®n en la crisis de las 15, por su dureza con aquellas a quienes en su d¨ªa se llam¨® rebeldes y se tach¨® de ¡°ni?atas¡±.

Por eso, porque algunos se creen v¨ªctimas de un ajuste de cuentas, la federaci¨®n les ha pedido a las jugadoras que identifiquen a esas personas a las que se?alan y que justifiquen sus acusaciones, de tal manera que se pueda abrir un expediente disciplinario para comprobar dichas acusaciones y tratar de resolver el problema. ¡°No se puede echar a un pu?ado de gente sin saber antes exactamente qu¨¦ ha pasado¡±, se?alan fuentes federativas. Mientras tanto, la RFEF se ha comprometido, de entrada, a que no aparezca ninguna de esas personas por las concentraciones de la selecci¨®n femenina, la primera, inminente, ante la celebraci¨®n del partido de la Nations League contra Suecia el pr¨®ximo viernes.

En el comunicado emitido este lunes, que es el mismo que se ha trasladado a las futbolistas, la federaci¨®n concluye: ¡°Garantizamos un entorno seguro a las jugadoras y apostamos por un clima de confianza mutua para que podamos trabajar juntos y logremos que el f¨²tbol femenino siga progresando con mucha m¨¢s fuerza. Debemos comenzar a lucir la estrella que con tanto esfuerzo las internacionales han conseguido¡±. Es as¨ª, con esas palabras de concordia y con un compromiso p¨²blico de cambio, como la federaci¨®n intent¨® resolver la crisis desatada por el caso Rubiales. Todav¨ªa falta por ver, sin embargo, si las 23 jugadoras acuden a la llamada de Tom¨¦. Especialmente despu¨¦s de sentirse, de nuevo, presionadas por una federaci¨®n que las incluye en una lista en la que no quieren estar.

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