Luis Rubiales en la Audiencia Nacional: ¡°Yo no soy un superior, el beso fue consentido; la agarr¨¦ porque las manos se me quedaron all¨ª arriba¡±

En su declaraci¨®n en la Audiencia Nacional, donde acudi¨® como imputado por un delito de abuso sexual y coacciones tras el beso a Jennifer Hermoso en la final del mundial del 20 de julio, Luis Rubiales, expresidente de la RFEF, insisti¨® una y otra vez en que el beso fue consentido. Y asegur¨® que en ning¨²n momento falt¨® el respeto a Hermoso porque le pidi¨® permiso. As¨ª lo refleja un audio de parte de la declaraci¨®n que ha publicado El Espa?ol.

En dicha declaraci¨®n y ante la pregunta del abogado de Jenni Hermoso de si conoc¨ªa la existencia de un protocolo antiacoso en la selecci¨®n espa?ola, Rubiales dice que ¨¦l ya no es presidente de la Federaci¨®n. ¡°He explicado antes que hay un enlace con FIFA para estas cuestiones¡±. Insiste el abogado si, con independencia del protocolo de FIFA, existe un protocolo igual en la entidad en la que Rubiales era el m¨¢ximo responsable. Y le pregunta tambi¨¦n si recibi¨® formaci¨®n espec¨ªfica, ley¨® y firm¨® expresamente ese protocolo. ¡°Se nos explic¨® a todos y tambi¨¦n a m¨ª¡±, contesta.

Y sigue: ¡°D¨ªgame, ?en ese protocolo antiacoso est¨¢ autorizado el poder dar un beso o pedir consentimiento para darle un beso a una jugadora?¡±, se le pregunta. ¡°Pero mire, si lo he hecho con jugadores. Mire, vamos a ver, yo¡­ de verdad¡­ ganamos un mundial, y hay muestras de afecto. Esto no es que alguien ha llevado a una oficina a alguien a escondidas, a darle un beso por la fuerza. Es que fue algo tan natural, a la luz de millones de ojos, entre dos personas que han estado conviviendo mucho tiempo. Entonces, meter una pregunta orientada, para¡­ ?est¨¢ autorizado?¡±, se arranca Rubiales.

Y contin¨²a: ¡°No hay nada autorizado ni desautorizado, son comportamientos, dentro de una celebraci¨®n totalmente extraordinaria, preguntado por mi parte, con consentimiento, explicado tambi¨¦n por la otra parte nada m¨¢s terminar el partido e ir a la prensa, que lo explic¨® Jenni a la prensa antes de todo esto, antes de entrar al vestuario, haciendo directos en redes sociales en el vestuario. Pues, hombre, yo creo que la cuesti¨®n es evidente desde ese momento hasta que llegamos a Espa?a, donde sigue manteniendo lo mismo. Que no ha querido salir [en el v¨ªdeo de disculpas que ¨¦l public¨®, y para el que supuestamente coaccion¨® a la jugadora para que saliera acompa?¨¢ndolo], no ha querido salir, pues sal¨ª yo solo, me hubiera encantado que hubiera salido porque seguramente se hubiera aclarado todo¡±.

En realidad, cuando Jenni Hermoso llega al vestuario, la pregunta es: ?Qui¨¦n se ha besado?¡±. ¡°A ver¡­¡±, dice ella. Y matiza: ¡°Pero no me ha gustado, ?eh?¡±. ¡°?Y qu¨¦ has dicho?¡±, le preguntan. ¡°Pues vale¡±, dice ella. ¡°Pero, ?qu¨¦ haces, t¨ªa?¡±. ¡°Pero, ?qu¨¦ hago yo?¡±, responde Jenni. Se r¨ªe, nerviosa y dubitativa. Y el d¨ªa 26, en un comunicado, dej¨® claro que hab¨ªa sido v¨ªctima de una agresi¨®n y se hab¨ªa sentido vulnerable.

Le insiste el abogado de Hermoso a Rubiales en la declaraci¨®n: ¡°Con independencia de la euforia que est¨¢ comentando, la pregunta, si es tan amable, se la vuelvo a repetir¡­¡±. Le interrumpe el expresidente la RFEF: ¡°Pero es que no hay cuestiones concretas de si se puede o no se puede¡±. ?Usted por el protocolo antiacoso cree por el contexto que dice ese protocolo antiacoso que usted como superior y m¨¢ximo responsable de la federaci¨®n¡­? Vuelve a interrumpirle Rubiales: ¡°Pero es que yo no soy superior, ustedes est¨¢n diciendo que soy superior, es que mire usted¡­¡±.

Vuelve a preguntarle si el beso fue consentido. Rubiales insiste en que s¨ª; que por supuesto, que ella ¡°se fue muerta de risa¡± y d¨¢ndole ¡°dos cachetes en el costado y ri¨¦ndose adem¨¢s¡±. Niega tambi¨¦n que diera un brinco sobre ella.

¡ª?Usted le pidi¨® el consentimiento?

¡ªPor supuesto

¡ª?Y por qu¨¦ le agarr¨® la cabeza?

¡ªPero vamos a ver, si ya lo he dicho, se me quedaron las manos all¨ª arriba, igual que se me hubieran quedado abajo; y la efusividad, ella tambi¨¦n me est¨¢ apretando a m¨ª por la espalda.

¡ª?Usted considera que a una persona que tiene agarrada de la cabeza puede dar el consentimiento libremente?

¡ªHombre, pues s¨ª, s¨ª lo considero.

¡ª?Lo hizo con alguna otra jugadora? No.

¡ªMire, Jenni fall¨® un penalti faltando 20 minutos, sufrimos mucho porque hubo 12 minutos de descuento, vino contenta, pero con cara¡­ le dije: ¡®no pienses m¨¢s en ese penalti, de verdad, venga, sin ti no hubi¨¦ramos ganado el Mundial¡¯. Y se dio as¨ª, porque cuando te toca la loter¨ªa o se acaba una guerra, imag¨ªnese si se acaba la guerra en Ucrania, esa efusividad y esa espontaneidad¡­ le pregunt¨¦, pese a todo, y ella me dijo que vale.

Es solo parte de una declaraci¨®n que se alarg¨® poco menos de una hora, seg¨²n el citado medio. Y en la que Rubiales, adem¨¢s de insistir en que el beso fue consentido, se escuda en el contexto para justificar su reacci¨®n, motivada por la euforia de ganar el Mundial.

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