Aitana recupera el toque de Espa?a ante Suecia
La jugadora, suplente tras un proceso febril y el enredo con Tom¨¦ en el duelo ante Italia, ordena a la selecci¨®n para voltear el envite ante Suecia
Parec¨ªa que Espa?a hab¨ªa perdido el f¨²tbol, las ideas, el rumbo. Parec¨ªa tambi¨¦n que Suecia, herida en su orgullo porque por primera vez no estar¨¢ en unos Juegos, era demasiado para la selecci¨®n, desnortada ante la presi¨®n y el f¨²tbol f¨ªsico y de transiciones del rival. Pero estas jugadoras no entienden lo que significa bajar la cabeza ni la voz, capaces de silenciar a quien se le ponga por delante. Anoche, en una Rosaleda repleta ¡ªr¨¦cord de espectadores (15.896) en un duelo de la selecci¨®n, superados los 14.194 que en septiembre llenaron el Nuevo Arc¨¢ngel de C¨®rdoba¡ª, gran parte del m¨¦rito fue de Aitana, que sali¨® al tapete y orden¨® el juego, recuper¨® el toque perdido. Y volte¨® un duelo que parec¨ªa perdido. Lo parec¨ªa.
Despu¨¦s del ¨²ltimo guirigay de la selecci¨®n, cuando Aitana advirti¨® de que no estaba lista para jugar la segunda parte ante Italia, y de que desde el cuerpo t¨¦cnico no reaccionara a tiempo, al punto de que el equipo encaj¨® un gol al jugar con una menos, y se quebr¨® para perder su primer duelo en la Liga de las Naciones, Tom¨¦ opt¨® ante Suecia por no darle la titularidad a Aitana, la reciente Bal¨®n de Oro. Si bien es cierto que ha pasado por un proceso febril y que Espa?a no se jugaba nada en La Rosaleda, no contar de inicio con ella ni con Paredes result¨® chirriante. Seis jugadoras del Madrid coparon la alineaci¨®n y no funcion¨®.
Suecia no era un rival balad¨ª, la n¨²mero uno del r¨¢nking, tambi¨¦n la oponente a la que nunca se hab¨ªa batido hasta las semifinales del pasado Mundial. ?xito que se repiti¨® al abrir boca en esta Liga de las Naciones, cuando Espa?a estaba de lo m¨¢s zarrapastrosa, pues las jugadoras apenas hab¨ªan dormido entre negociaciones y desvelos, ocupadas en exigir sus derechos despu¨¦s de que el expresidente Luis Rubiales hubiera besado sin consentimiento a Jenni Hermoso en los festejos de la Copa del Mundo. Enredo morrocotudo que se presupon¨ªa definitivo. Pero cuesta que La Roja transite por la l¨®gica que desde fuera se le atribuye al mejor equipo del globo. Y Suecia se la neg¨® desde el primer minuto. Le bast¨® un saque de esquina porque no hay equipo que ponga mejor el lazo a esas jugadas; Asllani pone los centros con crema e Ilstened los remacha. En esta ocasi¨®n, sin embargo, Zigotti se tir¨® en plancha y emboc¨® el esf¨¦rico, lo que descascarill¨® a Espa?a en tan solo 38 segundos.
No se apoc¨® La Roja, con callo ante las adversidades. Salma fue la primera en avisar con un centro-chut que no cogi¨® puerta; Olga la sigui¨® con una de sus incursiones con un disparo que solo la cruceta se atrevi¨® a desmentir; y despu¨¦s se juntaron: un centro de Olga lo cabece¨® Salma a la red.
Aunque el empate no conllev¨® sosiego porque Suecia, siempre f¨ªsica y de f¨²tbol de arrebato, con una presi¨®n asfixiante, resolv¨ªa que en vez de pases cortos y ataques largos lo suyo son ataques cortos y pases largos para expresarse en las segundas jugadas. En una de esas, Blackstenius se puso el sombrero de copa al recibir de espaldas al borde del ¨¢rea y filtrar un pase interior para Asllani, que desgaj¨® a Misa con una picadita. Cabezas gachas y barbecho para la duda, para entender si de verdad se rompi¨® algo con Italia, quiz¨¢ esa inercia ganadora forjada entre penurias. No era as¨ª.
Ocurre que sin Aitana ni Alexia ¡ªlesionada¡ª no hay para¨ªso; m¨¢s que nada porque ante Suecia las l¨ªneas estaban separadas, el bal¨®n no ten¨ªa un ¨²nico due?o ni corr¨ªa a la velocidad que habit¨²a, y Tere Abelleira no pod¨ªa con todo el trabajo de construcci¨®n. As¨ª lo descubri¨® cuando trat¨® sin ¨¦xito jugar un bal¨®n desde la ra¨ªz. Mal pase (y buena presi¨®n de Asllani) y bola recuperada por un rival que enlaz¨® con Blackstenius, que con media oportunidad te hace una. Otro gol, otra bofetada y, casi una m¨¢s que Misa evit¨® con una manopla colosal a disparo lejano de, claro, Blackstenius.
Espa?a transitaba en la indefinici¨®n, pues su f¨²tbol era m¨¢s individual que coral. Mariona y Jenni, que s¨ª chutaron sin ¨¦xito, no se subrayaban entre las l¨ªneas porque Suecia cerr¨® los pasillos interiores para regalar los exteriores. Faltaba juego de dentro para fuera, profundidad de las laterales. Y eso corrigi¨® Tom¨¦ en el segundo acto porque Athenea pronto prolong¨® su idilio con el gol, cinco tantos en el torneo. Alcanz¨® con un pase de Jenni para la carrera de Olga; un centro que Athenea defini¨®. Ese era el camino, ese que alumbr¨® Aitana al ponerse las botas. El f¨²tbol entonces cogi¨® color y forma, con Aitana en la sala de m¨¢quinas, con las l¨ªneas estrechas y de la mano, con el f¨²tbol cocinado por dentro y exprimido por fuera, con remates de Salma, Athenea y hasta Aitana, despu¨¦s con goles de Mariona y Fiamma. Ahora toca descansar porque las semifinales est¨¢n a la vuelta de la esquina ¡ªel sorteo es el 11 de este mes y se jugar¨¢ entre el 21 y 28 de febrero¡ª, tambi¨¦n darle a la pausa y encontrar la paz. Y si es con Aitana en el campo, mejor.
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