Marc M¨¢rquez conquista el GP de Australia por delante de un Jorge Mart¨ªn que ampl¨ªa su liderato

Si hay un maestro en complicarse la vida y dar espect¨¢culo, ese es Marc M¨¢rquez. El ocho veces campe¨®n del mundo lo ten¨ªa todo de cara en Phillip Island, uno de sus circuitos fetiche, para luchar por la victoria. Y vaya si luch¨®. El piloto de Gresini subsan¨® con otra remontada magistral y un bonito duelo con Jorge Mart¨ªn, m¨¢s l¨ªder del certamen gracias a su segunda posici¨®n en el GP de Australia, un resbal¨®n en la partida que le hizo caer de la segunda hasta la decimotercera posici¨®n. En el podio, pero lejos, les acompa?¨® Pecco Bagnaia.

El 93 ten¨ªa uno de los mejores ritmos de la parrilla y la tensi¨®n de la batalla por el Mundial oprim¨ªa a sus dos grandes rivales sobre la pista. Pero el destino quiso complicarle las cosas, como ya ha ocurrido en m¨¢s de una ocasi¨®n esta campa?a. La inocente maniobra de retirarse el ¡®tear-off¡¯, la tira de pl¨¢stico que protege de la suciedad la visera del casco, en la parrilla de salida provoc¨® que su moto patinara como un potro salvaje, descontrolada. De todos los sitios posibles, aquel plastiquillo se peg¨® a la rueda trasera y casi manda al traste su carrera y la de alg¨²n otro que ven¨ªa por detr¨¢s disparado. ¡°Siempre pasa algo. Nunca me quito el ¡®tear-off¡¯ ah¨ª, porque puede pasar esto, pero ten¨ªa una mancha grande y no ten¨ªa otra¡±, coment¨® el ganador.

Controlando los coletazos de la Ducati Gresini, M¨¢rquez hizo magia para aguantar en el grupo delantero en el primer giro, salvando la papeleta y consolid¨¢ndose en la s¨¦ptima plaza ya en la tercera curva. Por delante, Mart¨ªn sonre¨ªa y repet¨ªa el guion de su s¨¢bado perfecto al otro lado del mundo, saliendo como un tiro y escap¨¢ndose de inicio. Por detr¨¢s, Marco Bezzecchi y Pecco Bagnaia acechaban. El primero ten¨ªa todas las de perder, sancionado con una vuelta larga tras su embestida a Maverick Vi?ales el s¨¢bado. El segundo, apretaba los dientes para intentar acercarse a su gran rival por el campeonato a cuatro pruebas del final.

Con Bezzecchi en fuera de juego en la cuarta vuelta, Mart¨ªn ya le quitaba un segundo al defensor de la corona gracias a su explosividad de inicio. Por detr¨¢s, sin embargo, M¨¢rquez ya hab¨ªa iniciado la operaci¨®n remontada. Se zamp¨® a Enea Bastianini para empezar, y luego supo aprovechar la distracci¨®n de Bezzecchi para colarse a Brad Binder y colocarse cuarto en la cuarta vuelta. La mitad del trabajo hecho en un abrir y cerrar de ojos. Pero quedaba lo m¨¢s dif¨ªcil.

Cuando dio caza a Franco Morbidelli y se situ¨® en posici¨®n de podio, en la sexta vuelta, estaba a 1,7 segundos de distancia del l¨ªder de la prueba y el certamen, a uno del campe¨®n del mundo. ¡°Por un momento pens¨¦ que ser¨ªa imposible alcanzar a Jorge¡±, reconoci¨® luego. Liberado y con espacio, M¨¢rquez empez¨® a firmar vueltas r¨¢pidas y a presionar a los dos aspirantes a la corona de 2024. En la d¨¦cima vuelta, ya estaba pegado al col¨ªn de Bagnaia, y un error de Mart¨ªn permiti¨® que el grupo delantero se compactara y se desataran los fuegos artificiales.

El turin¨¦s oli¨® sangre en la vuelta 12 y se col¨® por el interior de la curva cuatro, un cl¨¢sico, al madrile?o, que inmediatamente se la devolvi¨®. El catal¨¢n, siempre pillo, aprovech¨® la confusi¨®n para meterle la moto al que ser¨¢ su pr¨®ximo compa?ero en el equipo oficial de Ducati. De verse ganador a pasar a la retaguardia, Bagnaia ya no dio problemas a los dos pilotos m¨¢s fuertes del fin de semana, que terminaron por sacarle m¨¢s de nueve segundos en l¨ªnea de meta. ¡°Ellos han estado mejor que nosotros, y hoy era dif¨ªcil conseguir m¨¢s. Sab¨ªa que era un circuito en el que Jorge iba m¨¢s r¨¢pido, siempre ha sido as¨ª. Ahora vamos a dos trazados que se me dan bien a m¨ª¡±, conclu¨ªa el tricampe¨®n del mundo.

El ritmo demoledor de los dos de cabeza ensalz¨® las virtudes de un M¨¢rquez con maquinaria del a?o pasado y el valor de un Mart¨ªn que no se arrug¨® ante los ataques del piloto de la parrilla m¨¢s experimentado en este tipo de batallas. Uno no ten¨ªa nada que perder, el otro todo lo contrario. Tras una persecuci¨®n al l¨ªmite de 12 vueltas, el 89 se fue un pel¨ªn largo en la cuatro y el 93 aprovech¨® para colocarse l¨ªder a cuatro giros del final. El aspirante al t¨ªtulo, no conforme, le devolvi¨® la tostada usando la mayor velocidad punta de su Ducati pata negra para rebasarle sobre la l¨ªnea de meta. Termin¨®, sin embargo, por ceder otra vez en la cuarta curva del circuito, a tres vueltas de la conclusi¨®n, levantando la moto para evitar un contacto tras el adelantamiento m¨¢s agresivo de la jornada del ocho veces campe¨®n del mundo.

¡°Marc no ten¨ªa nada que perder, y cuando lo volvi¨® a intentar pens¨¦ que apretar de m¨¢s era tomar demasiados riesgos¡±, apunt¨® Mart¨ªn desde el parque cerrado. ¡°Quer¨ªa la victoria, quer¨ªa ganar. He intentado romper la carrera, pero no he podido y hasta me he asustado, porque casi me caigo. Me he despistado con una gaviota y luego me ha pasado Pecco. Eso me ha servido para ponerme las pilas y contraatacar, pero Marc ten¨ªa algo m¨¢s en esas dos ¨²ltimas vueltas¡±.

La tercera victoria del a?o para M¨¢rquez confirma que ha sido capaz de volver a su mejor forma y conserva intacto su gen ganador a las puertas de su a?o de rev¨¢lida con la Ducati oficial que ha elevado a cotas impresionantes el rendimiento de los dos actuales cabecillas del certamen. Por su parte, el decimotercer podio de Mart¨ªn le permiti¨® ampliar un poco m¨¢s, a 20 puntos, la ventaja sobre Bagnaia a la cabeza de un Mundial que sigue en un pa?uelo y muy igualado, si bien la victoria moral es para el espa?ol en este decimos¨¦ptimo asalto del campeonato.