El freno de Sinner era Alcaraz, de nuevo finalista en Indian Wells

En ocasiones, el mejor de los remedios es un oportuno paso atr¨¢s, reducir una marcha y aplicar una de las cl¨¢sicas recetas universales: pararse y pensar. Rectificar si procede. Demandaba la escena un volantazo de Carlos Alcaraz, aturullado primero y desbordado a continuaci¨®n, sobrepasado por la arrolladora propuesta de Jannik Sinner hasta que lleg¨® el segundo set y encontr¨® la pausa, inspir¨® con fuerza, espir¨® como un drag¨®n y oxigen¨® un planteamiento que hasta es...

En ocasiones, el mejor de los remedios es un oportuno paso atr¨¢s, reducir una marcha y aplicar una de las cl¨¢sicas recetas universales: pararse y pensar. Rectificar si procede. Demandaba la escena un volantazo de Carlos Alcaraz, aturullado primero y desbordado a continuaci¨®n, sobrepasado por la arrolladora propuesta de Jannik Sinner hasta que lleg¨® el segundo set y encontr¨® la pausa, inspir¨® con fuerza, espir¨® como un drag¨®n y oxigen¨® un planteamiento que hasta ese momento hab¨ªa sido sumamente err¨®neo; lo que luego, bendito giro, tan simple y tan perfecta la maniobra, resultar¨ªa una genialidad. En Indian Wells, amigo m¨ªo, mando yo. Y la desorientaci¨®n cambi¨® de barrio. Cara larga del italiano, sin un solo rasgu?o en lo que iba de a?o, y la redenci¨®n del espa?ol: 1-6, 6-3 y 6-2 (tras 2h 05m). Ser¨¢ ¨¦l, pues, quien debata este domingo (22.00, Movistar+) con el ruso Daniil Medvedev, mismo escollo de hace un a?o, en busca de su segundo t¨ªtulo en el desierto californiano.

Raro, raro, lo de este a?o en Indian Wells, escenario de contratiempos y anomal¨ªas varias. Se acepta lo de la tormenta de arena, al parecer algo relativamente com¨²n, pero no tanto lo del episodio del jueves con las abejas ¡ªni rastro de ellas esta vez¡ª ni tampoco lo de este s¨¢bado, cuando nada m¨¢s comenzar el duelo entre los dos j¨®venes elegidos, el cielo se ennegreci¨® y la descarga de agua ¡ªcuatro o cinco d¨ªas al a?o debe de llover por all¨ª, dicen¡ª demor¨® tres horas la acci¨®n. Tres juegos hab¨ªan transcurrido, 17 minutos. De vuelta, Alcaraz pis¨® en falso, se desorden¨® y pag¨® car¨ªsimo el patinazo. Adem¨¢s de perder el servicio, merced a una doble falta, desenroll¨® una tupida alfombra roja para que Sinner gobernase todo ese primer parcial a placer, m¨¢s que encantado el italiano en ese cuerpo a cuerpo fren¨¦tico que ¨¦l, hoy por hoy, domina sin discusi¨®n. Entr¨® al trapo el murciano, cay¨® en la trampa y se vio bajo un chaparr¨®n de golpes tan desconcertante como breve. 36 minutos dur¨® el primer set.

Completamente descolocado, el de El Palmar encontr¨® alivio en el box, desde donde su t¨¦cnico, Juan Carlos Ferrero, le reclamaba desga?it¨¢ndose paciencia y m¨¢s paciencia. El giro. ¡°?Haz el punto largo!¡±. ¡°?Punto a punto, no pensemos m¨¢s all¨¢!¡±. ¡°?Bolas dentro y a jugar!¡±. ¡°?Sin prisa! Y cuando la tengas, ?decisi¨®n!¡±. El martilleo de consignas surti¨® efecto. El chico, todav¨ªa d¨®cil, capt¨® el mensaje y entendi¨® que la ¨²nica variable que ofrec¨ªa escapatoria era la de ralentizar, retroceder un par de metros y quitarle fuerza a la pelota; esto es, m¨¢s efectos, evitar la bola plana, m¨¢s alturas; un cambio de patr¨®n que obligara a pensar m¨¢s de la cuenta al adversario. Sinner, que asist¨ªa como un competidor en absoluto estado de trance ¡ª16 victorias consecutivas este a?o, 19 desde la pasada Copa Davis¡ª, se siente en su salsa en el territorio del v¨¦rtigo y el atropello, de la abreviaci¨®n, as¨ª que la reescritura del guion y la consecuente p¨¦rdida de mando le condujeron poco a poco hacia el colapso.

¡°Me achaco haber sido demasiado predecible en algunos puntos¡±, lamentaba luego el de San C¨¢ndido. ¡°Hice las mismas cosas una y otra vez, y pienso que esto me ha condenado. Esa es la lecci¨®n que extraigo hoy, el tenis es un deporte de equilibrio; a veces eres demasiado directo y en ocasiones es bueno pararte. He fallado muchas derechas¡±, prolongaba el n¨²mero tres, que se hab¨ªa impuesto en los dos ¨²ltimos cruces ¡ªcon Pek¨ªn, octubre, como referencia m¨¢s cercana¡ª y pod¨ªa haber aumentado la brecha an¨ªmica en caso de ganar. Ahora, sin embargo, el cara a cara est¨¢ igualado (4-4) y Alcaraz puede sacar pecho porque no hab¨ªa quien lograra ponerle freno a Sinner, campe¨®n en Australia y tambi¨¦n en R¨®terdam; incontestable hasta que ¨¦l corrigi¨® sobre la marcha, reaccion¨® con inteligencia en el plano estrat¨¦gico ¡ªesos dos pasos atr¨¢s en las devoluciones y la reducci¨®n de potencia en los tiros, recurso muy nadaliano¡ª y dio con el buen camino para enderezar un pulso al que no le falt¨® la espectacularidad y un par de envites deliciosos en la red.

¡°Me he mantenido fuerte mentalmente, esa es una parte muy importante de este deporte. Tienes que estar fuerte de cabeza para superar este tipo de partidos. He cambiado un poco mi juego, y creo que ha funcionado muy bien¡±, apreciaba el ganador, que gracias al triunfo salvaguard¨® el segundo puesto mundial que le hubiera arrebatado el rival en caso de un desenlace contrario. ¡°Ten¨ªa que defenderme mejor de lo que lo hice en el primer set, meter m¨¢s bolas dentro e intentar mantenerme fuerte. Cambi¨¦ mi estilo en los restos, estaba m¨¢s al fondo de la pista, metiendo m¨¢s restos y planteando intercambios largos. En el primer set comet¨ª errores en la segunda, tercera o cuarta bola, y contra alguien como Jannik eso no es posible¡±, agreg¨® Alcaraz, quien a sus 20 a?os ¡ªdos menos que Sinner, cosecha de 2001¡ª sigue aprendiendo e intenta a?adir a su paleta de brillos una mayor gama de soluciones; es decir, tener un plan B o un C, si lo requieren las circunstancias.

¡°Est¨¢s preparado para sus golpes espectaculares, pero ense?¨® m¨¢s cosas. Cambi¨® unas cuantas cosas hoy, t¨¢cticamente, que deber¨¦ tener en cuenta para las pr¨®ximas veces. Tengo que mejorar cosas para intentar ganarle de nuevo¡±, incidi¨® Sinner, que en la tercera manga se dio un buen trompazo contra el asfalto al tratar de cazar una dejada. ¡°Lo he notado en el codo, pero esto es deporte¡±, prosigui¨®; ¡°aqu¨ª su pelota bota mucho. Debo entender por qu¨¦ he cometido errores en determinadas ocasiones [15 en realidad, por los 13 de la otra parte] y por qu¨¦ fui tan predecible. Mereci¨® ganar, estoy feliz por ¨¦l y le deseo lo mejor para ma?ana¡±.

Ahora, el espa?ol opta a revalidar el t¨ªtulo logrado el a?o pasado en el desierto californiano. Lo har¨¢ en su sexta final de un Masters 1000, la primera que alcanza en este 2024 ¡ªindependientemente de la categor¨ªa del torneo¡ª y a su vez, la primera que disputar¨¢ desde la que perdi¨® contra Novak Djokovic en Cincinnati, agosto. Como sucediera la temporada pasada, enfrente estar¨¢ de nuevo el guerrillero Medvedev, que remont¨® al estadounidense Tommy Paul en la segunda semifinal (1-6, 7-6(3) y 6-2, tras 2h 24m) e intentar¨¢ compensar el desnivel actual entre ambos. ¡°Si juego contra ¨¦l¡±, advert¨ªa Alcaraz antes de saber contra qui¨¦n se medir¨ªa este domingo, ¡°s¨¦ muy bien c¨®mo hacerlo. Nos hemos enfrentado varias veces [3-2 a su favor] y s¨¦ qu¨¦ estrategia utilizar, aunque no voy a decirla¡±. En cualquier caso, adquiere valor en su libreto el triple concepto: pararse, pensar, rectificar. Interpretar adecuadamente los momentos. Porque el tenis va mucho m¨¢s all¨¢ de lo bonito.

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