Alcaraz sortea la barrera del miedo
El n¨²mero tres reaparece con una victoria en Madrid y deja atr¨¢s ¡°un mes de incertidumbre¡± y ¡°muchas dudas¡± a ra¨ªz de su lesi¨®n muscular en el antebrazo
A sus 20 a?os, 21 en un abrir y cerrar de ojos ¡ªel 5 de mayo¡ª, Carlos Alcaraz sigue descubri¨¦ndose a s¨ª mismo y, a la vez, d¨¢ndose a conocer. ¡°Quiero mostrar mi personalidad. Todo el mundo conoce al Carlos Alcaraz tenista, pero es una versi¨®n distinta a c¨®mo soy fuera de la pista. Es una bonita historia que mostrar, la de un chico peque?o persiguiendo su sue?o y convirti¨¦ndose en n¨²mero uno del mundo. Quiero ense?ar a todo el mundo qui¨¦n soy¡±, contesta refiri¨¦ndose a la docuserie de Netflix que comenz¨® a grabarse en marzo en Las Vegas y que contin¨²a ahora en Madrid, donde un elenco de creadores, c¨¢maras y sonidistas le acompa?a por todas partes con steadys, focos, cables y p¨¦rtigas.
El murciano departe con los periodistas aliviado porque la prueba contra Alexander Shevchenko (6-2 y 6-1, en 1h 07m) ha salido a pedir de boca. Desde que sufri¨® el percance en el brazo derecho, despu¨¦s de competir en el Masters de Miami, a finales de marzo, arrastra un miedo que ha traspasado la frontera de lo f¨ªsico porque el dolor no termina de desaparecer y aunque las pruebas m¨¦dicas sean positivas, el temor a un mal mayor o a una reca¨ªda est¨¢ ah¨ª, latente, amenazante. ¡°Ha sido un mes bastante duro para m¨ª¡±, introduce. ¡°Vine sin saber qu¨¦ iba a pasar y ayer [por el jueves], cuando jugu¨¦ un set con Medvedev [en el entrenamiento], no not¨¦ nada y dije que estaba preparado para jugar. Hasta ayer estaba pensando en si iba a jugar o no. Hasta que llegu¨¦ aqu¨ª, no hab¨ªa cogido la raqueta en una semana¡±, prosigue el tenista, campe¨®n de las dos ¨²ltimas ediciones y que antes de desplazarse a Madrid hab¨ªa tenido que renunciar a Montecarlo y al God¨®; este ¨²ltimo, lugar en el que tambi¨¦n deb¨ªa defender los t¨ªtulos obtenidos los dos ¨²ltimos a?os.
No jugar en Barcelona supuso golpe an¨ªmico considerable para ¨¦l. Pese a no poder competir, Alcaraz se desplaz¨® hasta all¨ª para confirmar su ausencia y cumplir con un compromiso comercial. Cuenta un testigo de la escena que, refugiado bajo una gorra, dio vueltas a la piscina del club de Pedralbes durante casi una hora intentando procesar una situaci¨®n que, sin ser del todo nueva, ha ido mell¨¢ndole la confianza. ¡°Ha sido un mes de incertidumbre, sobre todo por no saber cu¨¢ndo iba a volver¡±, recalca. Sin excesivo convencimiento, el pasado fin de semana pasado aterriz¨® en las pistas de entrenamiento de la Caja M¨¢gica y desde entonces, ¨¦l, su t¨¦cnico Juan Carlos Ferrero y los especialistas que velan por que la m¨¢quina funcione a pleno rendimiento ¡ªel fisioterapeuta Juanjo Moreno y el preparador Alberto Lled¨®¡ª han ido sopesando qu¨¦ ruta tomar.
El quitarse esos miedos y apostar por el salto a la pista era un umbral ineludible que finalmente ha cruzado. Las horas de tratamiento y charlas han surtido efecto, y el murciano vuelve a estar en acci¨®n; no baja la guardia, pero de momento ha roto la barrera psicol¨®gica que le frenaba y las sensaciones obtenidas en el estreno fueron muy favorables. ¡°Ha sido un partido muy completo, a un gran nivel; me he sorprendido a m¨ª mismo. Lo principal era comprobar si iba a notar algo, y no ha pasado¡±, aprecia. ¡°Llevaba un mes entren¨¢ndome solo con el rev¨¦s, y por eso me ha salido un partido espectacular¡±, precisa. ¡°Y con la derecha [donde se localiza el da?o] le he pegado m¨¢s suave que de costumbre. Lo primero que pensaba era en no hacerme da?o, as¨ª que estoy muy feliz de haber jugado a este nivel¡±, agrega.
En contra de su esencia
Pese a competir con el cors¨¦ mental que todav¨ªa limita su drive, la primera intervenci¨®n ha liberado de alg¨²n modo a Alcaraz, que en la pr¨®xima estaci¨®n se enfrentar¨¢ al brasile?o Thiago Seyboth Wild, el 63? del mundo. ¡°Viene gan¨¢ndole a gente buena, as¨ª que vamos a ponernos las pilas¡±, previene el murciano, todav¨ªa un le¨®n enjaulado ¡°Ya jugu¨¦ con la bracera [malla compresora] en Wimbledon [2022] y despu¨¦s me la quit¨¦, as¨ª que no hay superstici¨®n. Pero s¨ª, siempre he sido un jugador que intenta pegarle fuerte, as¨ª que jugar m¨¢s relajado va en contra de mi esencia. Ahora mismo prefiero hacerlo as¨ª; antes quer¨ªa apretar m¨¢s de la cuenta y eso me perjudicaba, as¨ª que ahora no me pasa¡±, contin¨²a el n¨²mero tres del mundo, al que los reveses sufridos durante estos tres a?os en la ¨¦lite le han ayudado a conocer mejor c¨®mo reacciona su cuerpo.
Satisfecho, Alcaraz se retir¨® a media tarde del barrio de San Ferm¨ªn y despu¨¦s de pasar por su hotel, se dirigi¨® al Mes¨®n Txistu junto a su equipo y su c¨ªrculo familiar para cenar mientras segu¨ªa el duelo entre la Real Sociedad y el Real Madrid en San Sebasti¨¢n. ¡°Si mi fisio me dice que me la ponga [la bracera], yo me la pongo. Conf¨ªo plenamente en ¨¦l, as¨ª que obedezco¡±, afirma sin querer mirar m¨¢s all¨¢ del ¡°d¨ªa a d¨ªa¡±, aunque con la esperanza de poder incorporar el rodaje necesario de cara a Roland Garros. ¡°Cada vez que entro a pista quiero ganar, pero lo principal es no notarme el antebrazo. A la m¨¢s m¨ªnima que note algo, dudo que pueda seguir. Lo principal es no notar nada, y si me siento bien luego vienen el juego y los resultados. Quiero seguir sumando horas de competici¨®n sin molestias¡±, resuelve.
Entretanto, la altura de Madrid sigue aport¨¢ndole brillo a su juego. Encadena ya 12 triunfos en la Caja M¨¢gica, donde no cae desde que le batiera Nadal, el 5 de mayo de 2021, cuando alcanz¨® la mayor¨ªa de edad. El mallorqu¨ªn est¨¢ citado este s¨¢bado (no antes de las 16.00, Teledeporte y Movistar+) con el australiano Alex de Mi?aur, en un encuentro que podr¨ªa suponer su despedida. Y el heredero reclama: ¡°Quiero disfrutar lo m¨¢ximo posible de ¨¦l, s¨¦ que eso es lo que ¨¦l quiere y lo que le ilusiona. Est¨¢ trabajando para ser competitivo, y todas las veces que pueda hacerlo yo voy a estar ah¨ª para disfrutarlo. No tenemos que pensar en el m¨¢s all¨¢, vamos a vivir el momento¡±.
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