Visualizar, meditaci¨®n, inconformismo y fe, mucha fe: la f¨®rmula de la Badosa 2.0
La espa?ola, presente por primera vez en las semifinales de un grande, dice que ha crecido en todos los aspectos y destaca el trabajo psicol¨®gico como una de las claves
Siempre inconformista, la Paula Badosa de hoy dista mucho de aquella que ascendi¨® hace tres a?os al segundo pelda?o mundial y que hace cuatro conquist¨® un escenario de prestigio como Indian Wells. ¡°Me quedo con la de hoy, con diferencia¡±, responde tajante al planteamiento de EL PA?S. Una hora antes ha vencido por 7-5 y 6-4 (en 1h 41m) a Coco Gauff, la tres del mundo, y ha logrado por primera vez franquear la barrera de los cuartos despu¨¦s de dos intentos frustrados y acceder as¨ª a las semifinales de un grande, en las que se medir¨¢ con su amiga Aryna Sabalenka (6-2, 2-6 y 6-3 a la rusa Anastasia Pavlyuchenkova). Hoy tiene 27 a?os, unas cuantas heridas de guerra y dice estar haci¨¦ndose mayor, ya no ser esa tenista que irrumpi¨® de abajo y sorprend¨ªa. Hoy, remarca, es mucho m¨¢s completa. Una profesional de verdad.
¡°La de Indian Wells era una jugadora muy buena, pero, al final, sale de la nada, nadie la conoce; buenos tiros, fuerte f¨ªsicamente¡ La gente no me conoc¨ªa y ahora la situaci¨®n es diferente; ahora es mucho m¨¢s dif¨ªcil ganar los partidos porque saben qu¨¦ te molesta m¨¢s y c¨®mo juegas. Se ha visto hoy tambi¨¦n contra Coco [20 a?os]; ella sab¨ªa por d¨®nde iba a ir yo y viceversa. As¨ª que ahora se hace mucho m¨¢s dif¨ªcil ganar los partidos, porque conocen todos tus puntos fuertes y tambi¨¦n tus debilidades. Creo que la mezcla f¨ªsica, mental y ten¨ªstica de ahora es mucho mejor que la de entonces. Soy mejor en todos los aspectos¡±, se explicar la de Begur, que ocurra lo que ocurra se marchar¨¢ de Melbourne situada entre las diez mejores del circuito.
Badosa est¨¢ contenta. Mucho. Pero quiere m¨¢s. Para quienes no est¨¦n en el mundillo de la ¨¦lite, sea el deporte que sea, resulta dif¨ªcil comprender ese deseo permanente de ir a por m¨¢s y de que todo sepa a poco. La insatisfacci¨®n como fuerza tractora. La insaciabilidad. Le sucede a ella desde que comenz¨®. ¡°Me gustar¨ªa decir, y creo que a mi equipo tambi¨¦n¡±, matiza, ¡°que no tengo nada que perder el jueves, pero cuando ya est¨¢s ah¨ª, en las rondas finales, te sale toda la ambici¨®n porque eres consciente de todo lo que te ha costado llegar hasta aqu¨ª, as¨ª que no lo quieres desaprovechar¡±. De modo que le saca chispas a este presente de brillos australianos, alimentado con una victoria de m¨¦rito que subraya la l¨ªnea ascendente.
Dice Badosa que ¡°casi todos aprendemos a base de palos¡± y que detr¨¢s de la zigzagueante trayectoria que ha descrito ella desde que asomase por la ¨¦lite hay sencillamente pasi¨®n. Primero la depresi¨®n, luego las diabluras de la espalda. Doble encrucijada. Y ahora, la seguridad de que ha escogido el camino adecuado a base de reformularse y entender, pero sin perder la esencia. Los vientos huracanados est¨¢n ah¨ª, en la sombra; simplemente, transmiten desde su equipo, se trata de ¡°sacarles partido para que empujen a favor y no en contra¡±. Psicolog¨ªa.
¡°Siempre cre¨ªdo¡±
¡°Me llev¨¦ un palo muy grande en el US Open [cuartos] y me acuerdo sentarme y decir: bueno, tengo la suerte o la mala suerte de que el siguiente Grand Slam es dentro de cuatro meses, pero quiero volver a estar ah¨ª y tener la oportunidad¡±, introduce. ¡°Aprend¨ª de eso y, desde ah¨ª, cuando pas¨® todo eso, lo trabaj¨¦ mucho con mi psic¨®logo [Daniel de la Serna] durante la pretemporada; estuvimos trabaj¨¢ndolo mucho en persona, en Dub¨¢i [donde reside], poni¨¦ndonos mucho en la situaci¨®n, visualizando mucho; cada d¨ªa visualizo lo que quiero, cada d¨ªa medito, trabajo todo eso para estar en el presente¡±, contin¨²a la catalana, que ha encontrado un soporte imprescindible en su t¨¦cnico actual, Pol Toledo, para perfilar esta versi¨®n 2.0 mejorada.
En marzo de 2023 juntaron sus caminos a ra¨ªz de una carambola ¡ªun encuentro casual en Miami¡ª y, a partir de ah¨ª, todo ha sido crecimiento para ella. Le puso una fractura vertebral entre la espada y la pared, pero el contratiempo no hizo sino ahondar en la voluntad de la tenista de lograr lo que se propuso cuando empez¨® a pelotear de ni?a en la Costa Brava: hollar alguna cumbre. Con 18 a?os gan¨® el Roland Garros j¨²nior y luego recibi¨® la visita de los fantasmas. ¡°Me inflaron la cabeza, me dec¨ªan que era la nueva Sharapova y eso me hundi¨®. Me met¨ª en un hoyo. No estaba preparada¡±, contaba a este peri¨®dico en 2019, precisamente durante una charla en Australia, tierra de contrastes para ella; de esas dos semanas de encerrona obligada en un hotel por el coronavirus, al hermoso devenir del presente.
¡°Estoy muy orgullosa del camino que estoy haciendo¡±, transmite a los enviados especiales, a los que hace unos d¨ªas aseguraba que atraviesa por su momento de mayor equilibrio emocional y vital. Y es que, al fin y al cabo, se trata de ese mensaje que trata de inocularle su entorno: disfrutarlo, no sufrirlo. ¡°Ahora valoro m¨¢s las cosas¡±, a?ade, convertida ahora en la quinta espa?ola que progresa hasta la pen¨²ltima ronda de un major tras Lil¨ª ?lvarez, Arantxa S¨¢nchez Vicario, Conchita Mart¨ªnez y Garbi?e Muguruza. Hace un a?o hab¨ªa ca¨ªdo hasta el puesto 140? del ranking y la espalda le mantuvo medio curso sin jugar. Toc¨® fondo en la Caja M¨¢gica. Desde entonces, templanza, esfuerzo diario y la determinaci¨®n inquebrantable de intentarlo otra vez: ¡°Siempre he cre¨ªdo. Si hubiera dejado de hacerlo hubiese colgado la raqueta, y nunca lo acabo haciendo. El tenis es mi vida¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.