La Coru?a pide 1.000 millones de indemnizaci¨®n por la "marea negra"
La marea negra ha invadido varias playas de la r¨ªa coru?esa, entre ellas la de Santa Cristina, muy pr¨®xima al casco urbano de la capital. El Urquiola petrolero siniestrado el mi¨¦rcoles, con 118.000 toneladas a bordo, sigue arrojando combustible al agua, aunque en cantidad decreciente. Hoy se intentar¨ªa el trasvase del crudo a un barco de Campsa si, como se prev¨¦ se ha conseguido controlar totalmente el incendio.
?El Gobierno tiene gran inter¨¦s en hacer todo lo posible para evitar la contaminaci¨®n o, si se produce, como es de temer, que tenga el menor alcance posible?, dijo a ¨²ltima hora de la tarde de ayer, en una rueda informativa, el subsecretario de la Marina Mercante, almirante Amador Franco, que hab¨ªa llegado poco antes a La Coru?a.Las acciones emprendidas hasta ahora consisten, fundamentalmente, en el empleo de 90 toneladas de detergentes y dispersantes y la colocaci¨®n en la r¨ªa de cercos de lona que sirven para aislar el petr¨®leo. Anoche se iba a intentar sofocar totalmente el fuego a bordo del barco, para iniciar hoy el trasvase del crudo.
Al propio tiempo la compa?¨ªa holandesa Smit International, colaborar¨¢ en las tareas de recuperaci¨®n del barco y eliminaci¨®n del petr¨®leo, para lo que utilizar¨¢, entre otras, dos bombas de achique procedentes de Inglaterra, consideradas como las m¨¢s eficaces del mercado mundial. Proseguir¨¢ tambi¨¦n el empleo de dispersantes, de los quese calcula que la aviaci¨®n militar transportar¨¢ hasta hoy m¨¢s de trescientas toneladas procedentes de numerosas provincias.
Peligro imprevisible
Las autoridades nacionales y coru?esas se muestran tranquilizadoras pero no pueden ofrecergarant¨ªas. Son muchos los factores en juego. El barco no se ha partido, pero no se descarta esta posibilidad si var¨ªa el tiempo. El petr¨®leo ha llegado solamente en pequenas cantidades a La Coru?a, pero depende de las corrientes marinas que las grandes bolsas que se nan formado vayan a parar a alta mar, o se acumulen en el litoral.
?Esperamos que Dios ayude un poco?, dec¨ªa el subsecretario al que acompa?aban el director general de Navegaci¨®n, gobernador civil y comandante de Marina de La Coru?a. ?A partir de las seis de la tarde de ayer -a?adi¨®- los tanques dejaron de manar a chorros y apenas lanzaban crudo al mar. Cree mos que en el Urquiola hay todav¨ªa de ochenta a noventa mil toneladas de petr¨®leo.?
El planteamiento optimista ei cuanto al petr¨®leo derramado que en versi¨®n oficial, no pasar¨ªa de 28.000 toneladas, ino se basa en niediciones objetivas, sino en apreciaciones sobre el consumo de la combusti¨®n. En La Coru?a, quiz¨¢ alarmados por el aspecto que ofrece la r¨ªa, son muchos los que estiman por. encima de las cincuenta mil toneladas el petr¨®leo la deriva, o que ha llegado a las costas. Un dato pesimista que carece igualmente de objetividad.
Jos¨¦ Ram¨®n Besada, que trabaja en el amplio equipo que lucha contra la marea negra, como miembro del Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa, quiso mostrarse igualmente tranquilizador en la rueda de prensa: "En el caso del Polycommander, siniestro ocurrido en Vigo hace seis a?os, se perdieron 14.000 toneladas. Ocurri¨® el cinco de mayo y en la festividad del Carmen, hab¨ªa terminado la pesadilla.?
Para el Carmen coru?¨¦s el experto no puede garantizar que suceda otro tanto. ?Sabemos muy poco todav¨ªa. Si el petr¨®leo llega a tierra, el lavado del litoral podr¨¢ hacerse r¨¢pidamente, pero es pronto, muy pronto, para aventurar resultados.?
Investigaci¨®n
Sobre el accidente no ha habido posibilidad de esclarecer c¨®mo ocurri¨®. Alg¨²n informador coru?¨¦s intentaba salvar al puerto labor en la que le ayudaron las autoridade¨¢: Las caracter¨ªsticas de la r¨ªa, en opini¨®n del subsecretario y el comandante de Marina, no fue ron la causa del siniestro, porque muchos barcos como el Urquiola han hecho escala en La Coru?a con anterioridad. ?Tal vez fue un fallo humano -ventur¨® el almirante Franco- como dicen ustedes, pero esto no significa que fuera un fallo culpaple.?
EL PAIS plante¨® al subsecretario un problema sobre el que se ha especulado: seg¨²n algunos tripulantes, si el Urquiola hubiera recibido ¨®rdenes de llegar a puerto, al chocar por primera vez, la cat¨¢strofe no habr¨ªa tenido la magnitud que ha alcanzado. ?Esas son c¨¢balas -dijo Amador Franco- pudo salvarse o producirse un desastre mucho mayor. Quien decide en esos momentos, tiene que buscar alternativas en una combinaci¨®n de seguridad y eficacia. En este tipo de accidentes, en general siempre prima la seguridad.?
Esta y otras dudas podr¨¢n ser resueltas, quiz¨¢, en la investigaci¨®n iniciada por el Juzgado de Marina de La Coru?a, ante el que ayer prestaron declaraci¨®n los tripulantes.
En el contacto con las autoridades, tampoco se aclar¨® si ser¨¢n voladas las rocas que se supone hay en la zona del siniestro. ?Ni siquiera tenemos constancia de que existan tales rocas?, fue la respuesta.
Oficialmente, poco antes de las nueve de la noche, solamente las playas de Santa Cristina y Bastiagueiro estaban contaminadas. Realmente el petr¨®leo ha llegado a vatias. En un recorrido de nueve kil¨®metros por la pen¨ªnsula de Mera, frente a La Coru?a, se comprueba que el setenta por ciento de la zona est¨¢ afectado por la marea negra. Tambi¨¦n hay muestras de petr¨®leo, todav¨ªa muy reducidas, en la playa de Riazor, en pleno coraz¨®n de La Coru?a.
El turismo se va a resentir; tendr¨¢ su verano negro, como ha dicho el presidente del Sindicato de Hosteler¨ªa. Tambi¨¦n la pesca: solamente la producci¨®n marisquera de la r¨ªa del Pasaje, al parecer totalmente afectada, puede superar, seg¨²n c¨¢lculos oficiosos, los doscientos millones de pesetas; anuales. Seg¨²n el t¨¦cnico del Instituto de Oceanografia, la pesca de bajura no tendr¨¢ problemas.
Zona catastr¨®fica
El Urquiola, a dos millas de la milenaria Torre de H¨¦rcules, ha perdido el aspecto t¨¦trico que ten¨ªa el mi¨¦rcoles. La gran columna de humo negro ha desaparecido., Desde tierra no es perceptible el fuego, ya muy escaso, pero s¨ª se observan grandes manchas de petr¨®leo que se desplazan lentamente sobre las aguas de la r¨ªa.
Los coru?eses, muchos de los cuales han encontrado oxidada la parte de chapa de sus veh¨ªculos, sobre la que cay¨® petr¨®leo mezclado con agua de lluvia, consideran que ser¨¢ muy dif¨ªcil superar las consecuencias del accidente. Ayer, pasadas las diez de la noche, el Ayuntamiento reunido en sesi¨®n extraordinaria, acordaba solicitar la declaraci¨®n de zona catastr¨®fica petici¨®n a la que se han sumado diversas representaciones. Tambi¨¦n piden que la armadora del petrolero y las compa?¨ªas aseguradoras. indemnicen el lucro cesante, como poblaci¨®n tur¨ªstica y veraniega, con una cantidad de mil millones de pesetas y que el Gobierno desplace a La Coru?a, a los ministros de Trabajo, Marina e Informaci¨®n y Turismo, para que conozcan directamente los da?os.
?El Gobierno se ha tomado el mayor inter¨¦s -ha dicho el almirante Franco a EL PAIS- y por eso estoy aqu¨ª, aunque mi presencia no vaya a a?adir eficacia a las operaciones. Vamos a colaborar con la Marina en la valoraci¨®n diaria de las p¨¦rdidas, para exigir a las compa?¨ªas aseguradoras las indemnizaciones que sean justas.?
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