Vietnam, antes del fin
Olivier Todd es uno de los grandes reporteros franceses. Sus cr¨®nicas de guerra y paz en Le Nouvel Observateur son piezas cl¨¢sicas en el periodismo de nuestro tiempo. Suele mezclar la inspiraci¨®n literaria, con la descripci¨®n minuciosa de lo que ve, y la reflexi¨®n pol¨ªtica. Y ha logrado que sus ?papeles? no tengan el tono did¨¢ctico, falsamente progresista del ?Nouvel-Obs.?Todd ha publicado el a?o pasado en Francia una novela que obtuvo gran eco y mucho ¨¦xito. T¨ªtulo: Les canar¨¢s de Ca Mao (Los patos de Ca Mao). Ahora el libro se publica en castellano, seg¨²n traducci¨®n correcta de Manuel Bartolom¨¦.
Ca Mao es una pen¨ªnsula vietnamita, repartida militarmente entre las tropas del Gobierno de Saig¨®n y los guerrilleros del Vietcong. Tres periodistas (una fot¨®grafo inglesa, un reportero americano y otro franc¨¦s) escogen Ca Mao para introducirse en el reino de los hombres del interior (Vietcong), haza?a un tanto habitual entre los cientos de informadores y fot¨®grafos que durante m¨¢s de diez a?os hicieron de Vietnam su campo de operaciones. La novela relata, con maestr¨ªa y habilidad la historia de este viaje.
Todd Olivier: Los patos de Ca Mao
Librer¨ªa Editorial Argos Barcelona, 1976. 319 p¨¢ginas.
Resulta evidente desde el primer momento, para el lector que se enfrenta con el libro, que Todd intent¨® fabricar una obra de ¨¦xito, un best seller de gran magnitud. Primer valor aparente: la novela, siendo un best seller, es capaz sin embargo de interesar e incluso fascinar al cliente cultural m¨¢s exigente. Se lee de prisa, sin que el inter¨¦s baje de tono o la peripecia aburra. Claro que el autor ha puesto tambi¨¦n todos los ingredientes para que la novela llegue a un p¨²blico mayoriatria: referencias pol¨ªticas muy concretas, algo de violencia, una historia de amor y muerte, acci¨®n y reflexi¨®n, etc.
Segundo valor: Todd pretende con su libro ofrecer una lecci¨®n moral o desmitificar ciertos t¨®picos al uso. Tal vez por eso estos patos de Ca Mao provocaron en Francia una agria pol¨¦mica entre quienes se negaban a aceptar que el Vietcong utilizase ciertos m¨¦todos violentos y ciertas tesis dogm¨¢ticas copiadas de Hanoi para triunfar y quienes apoyaban las hip¨®tesis antimaniqueas de Todd. Semejante controversia se produc¨ªa, precisamente cuando en Vietnam estallaba la ¨²ltima bomba y se disparaban los ¨²ltimos tiros. Despu¨¦s, un muro de silencio ha ca¨ªdo sobre el atormentado pa¨ªs. A la barbarie made in USA parece haber sucedido el anonadamiento y la reeducaci¨®n made in Hanoi.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.