El avi¨®n espa?ol retenido en Somalia lleg¨® a Zaragoza

En la madrugada de ayer lleg¨® al aeropuerto de esta ciudad el avi¨®n de la compa?¨ªa Actividades A¨¦reas Aragonesas que fue retenido durante tres d¨ªas en la capital de Somalia acusado de violar el espacio a¨¦reo de aquel pa¨ªs. Los cinco pasajeros que viajaban a bordo hab¨ªan desembarcado en Bruselas, por lo que s¨®lo llegaron los tres tripulantes encargados del avi¨®n: el piloto, Luis Alberto P¨¦rez Arias; el copiloto, Luis Cabr¨¦ Le¨®n, y el mec¨¢nico, Tom¨¢s Gallego Miranda.

Al poco tiempo de llegar el avi¨®n mantuvimos una entrevista con el piloto y copiloto del avi¨®n. De acuerdo con las declaraciones del capit¨¢n, hemos reconstruido del siguiente modo la sucesi¨®n de los hechos:Detenci¨®n del aparato

El aparato recibi¨® orden de tomar tierra en el aeropuerto de Mogadiscio cuando sobrevolaba territorio somal¨ª procedente de las islas Seychelles con destino a Yibouti, donde planeaba realizar una escala t¨¦cnica con destino a Teher¨¢n. Tan pronto como el avi¨®n tom¨® tierra, los pasajeros -tres belgas y dos brit¨¢nicos- y la tripulaci¨®n -tres espa?oles- fueron trasladados a un hotel de la capital en veh¨ªculos separados. Los tripulantes fueron mantenidos aislados en habitaciones individuales fuertemente custodiadas. La tripulaci¨®n permaneci¨® aislada durante casi todo el primer d¨ªa, al t¨¦rmino del cual se le comunic¨® que ser¨ªan sometidos a juicio por violaci¨®n del espacio a¨¦reo somal¨ª.

El juicio tuvo lugar al d¨ªa siguiente. El abogado defensor, de nacionalidad somal¨ª, hab¨ªa sido contratado por el embajador belga en Mogadiscio. El juicio tuvo lugar en lengua somal¨ª, con un p¨¦simo traductor ingl¨¦s. No se permiti¨® hablar al acusado se?or P¨¦rez Arias, y tampoco se le Permiti¨® alegar la documentaci¨®n internacional de vuelo que hab¨ªa dejado a bordo del aparato en el momento de ser detenido junto con el resto de la tripulaci¨®n.

En el juicio, que dur¨® seis horas, actuaron como testigos el controlador de vuelo del aeropuerto de Mogadiscio y el director somal¨ª de aviaci¨®n civil. El fiscal solicit¨® una pena de quince meses de prisi¨®n, pero la sentencia definitiva fue de cuatro a?os o pago de una multa de seis mil d¨®lares.

Para evitar ser trasladados a prisi¨®n pagaron un adelanto de quinientos d¨®lares, que les permiti¨®. permanecer un d¨ªa m¨¢s en el hotel. Para entonces los industriales belgas que viajaban a bordo del avi¨®n hab¨ªan realizado las gestiones necesarias para el pago del dinero, que debi¨® hacerse por conductos privados, pues las autoridades somal¨ªes se negaron a que el pago lo realizara la embajada belga.

Detenci¨®n injustificada

De acuerdo con las declaraciones que hemos recibido del capit¨¢n del avi¨®n, la detenci¨®n del aparato est¨¢ totalmente fuera de las normas de aviaci¨®n civil internacional. El Jeppesen Airway Manual no registra a Somalia como pa¨ªs que exija el permiso previo de sobrevuelo. Adem¨¢s, cabe hacer notar que cuando el avi¨®n se detuvo unos d¨ªas antes en la misma capital ya se hizo saber que planeaban volver por la misma ruta.

Todo esto hace suponer a la tripulaci¨®n que la detenci¨®n del aparato no ten¨ªa otro fin que la de obtener un rescate al igual que sucedi¨® hace dos a?os, cuando un DC-9 fue obligado a pagar mil quinientas libras esterlinas para poder abandonar el pa¨ªs.

Leo Tindemans -primer ministro belga- no viajaba en el avi¨®n, contrariamente a lo que han se?alado ciertos informadores; se nos ha desmentido expresamente que el primer ministro belga viajara en el avi¨®n detenido. Parece ser, sin embargo, que el se?or Tindemans realiz¨® alg¨²n viaje a bordo de este mismo aparato y por esa regi¨®n en fecha no muy lejana. Los tripulantes se negaron a dar m¨¢s detalles, limit¨¢ndose a se?alar que el se?or Tindemans no aterriz¨® en Somalia.

Sobre los viajeros del avi¨®n se nos ha dicho que eran hombres de negocios del sector del petr¨®leo que realizaron una gira por Oriente Medio y las islas Seychelles. La tripulaci¨®n se encuentra perfectamente y planea reincorporarse a su trabajo inmediatamente.