El secretario general de la Diputaci¨®n aclara su postura

?La incompatibilidad en la que se me declara incurso y por la que se ha decidido incoar expediente disciplinario y la suspensi¨®n preventiva de empleo y sueldo est¨¢ solamente basada en una interpretaci¨®n subjetiva?, manifiesta en carta dirigida a EL PAIS, Francisco Ruiz, quien hasta ahora ha desempe?ado el cargo de interventor general de la Diputaci¨®n Provincial de Madrid, y que, por decisi¨®n del Pleno del pasado d¨ªa 29 de julio -ver EL PAIS del d¨ªa 30-, ha sido suspendido en el mismo, por considerar que era incompatible con su actuaci¨®n como consejero de Nuevo Banco.El se?or Ruiz contin¨²a diciendo que ?si, como es obligado, se hubiese instruido dicho expediente de incompatibilidad, se habr¨ªa acreditado el cumplimiento de las normas sobre la apertura de cuentas corrientes en los bancos por la Diputaci¨®n y el movimiento de los fondos en cuentas corrientes a la vista. Dicho movimiento es siempre efectuado por los tres claveros (presidente, interventor y depositario), lo que estimo habr¨ªa demostrado la compatibilidad de mi funci¨®n como interventor general de la Diputaci¨®n y mi cargo como consejero de una entidad bancaria?.

Adem¨¢s afirma que ?tambi¨¦n se habr¨ªan reflejado en ese expediente ciertas situaciones respecto a varios se?ores diputados, que a mi juicio, son totalmente correctas, pero que resultan claramente hom¨®logas a la situaci¨®n de incompatibilidad que se me atribuye?, y que ?igualmente se hubiera demostrado que ese saldo en cuenta corriente a la vista, de 900 millones de pesetas en Nuevo Banco que tan mal¨¦volamente se ha presentado a la prensa, se produjo solamente por unos d¨ªas, los suficientes para ordenar por los tres claveros que decidimos el ingreso, un reparto entre los 34 bancos en los que tiene cuenta corriente la Diputaci¨®n Provincial. Este tipo de operaci¨®n es puramente rutinaria, dentro de una Corporaci¨®n de las caracter¨ªsticas de la Diputaci¨®n Provincial de Madrid, y naturalmente, totalmente p¨²blica?.

El se?or Ruiz, finaliza diciendo que se reserva cuantas acciones le correspondan ante los Tribunales para la total reivindicaci¨®n de su nombre.