Pantano en Valsa¨ªn

En relaci¨®n con la nota de AEORMA publicada en el diario de su direcci¨®n del 8-9-76, le env¨ªo la siguiente nota, con el ruego de su publicaci¨®n:Varios o quiz¨¢ todos, de los m¨¢s de 5.000 firmantes de instancias de oposici¨®n al proyecto del pantano en la zona de los Asientos del pinar de Valsain, quisi¨¦ramos conocer la identidad y oscuros intereses de los caciques de la zona que nos han ?instrumentalizado?. En cualquier caso, es de se?alar que la oposici¨®n mencionada se ha llevado a cabo por cauces tan claros y democr¨¢ticos como la presentaci¨®n de instancias individuales, firmadas y con indicaci¨®n espec¨ªfica del n¨²mero del Documento Nacional de Identidad y domicilio de cada oponente. Cuando en 1976, cerca de 6.000 espa?oles responsables se oponen a un proyecto, razonando sus argumentos y ofreciendo soluciones alternativas, esperan que, si ese proyecto ha de realzarse, lo sea por razones t¨¦cnicas, econ¨®micas o biol¨®gicas m¨¢s convincentes, m¨¢s serias que una vaga acusaci¨®n de que la soluci¨®n alternativa haya sido ?engendrada por oscuros intereses que favorecen a los caciques de esta tierra?.

Las razones que se han expuesto repetidamente en gran parte de la prensa nacional, radio y televisi¨®n, se pueden resumir en tres grupos principales:

1) Econ¨®micas: El posible embalse en El Pont¨®n (soluci¨®n aconsejada en su d¨ªa por el ingeniero jefe de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Duero) albergar¨ªa 7.600.000 metros c¨²bicos de agua, frente a los 4.000.000 de metros c¨²bicos previstos para el situable en el pinar de Valsain. El horizonte de uso es mucho m¨¢s lejano en funci¨®n del m¨¢s lejano aterramiento. La rentabilidad, por tanto, en litros de agua y a?os de utilizaci¨®n por peseta invertida es incomparablemente mayor en el Pont¨®n.

2) T¨¦cnicas: Dado que el de Valsa¨ªn es un valle ?de artesa?, circundado por altas monta?as cubiertas de densa capa vegetal, el aterramiento total del pantano ser¨ªa muy r¨¢pido (se manejan datos como el de 15 a?os de uso), seg¨²n han demostrado diversos precedentes que se citan en la oposici¨®n al proyecto. Un pantano de poca profundidad en el centro de una cuneta rodeada por miles de hect¨¢reas de masa forestal, est¨¢ condenado a convertirse en una inmensa ci¨¦naga.

3) Ecol¨®gicas: El pinar de Valsain es, hoy, un pinar. Esta realidad que Perogrullo demostrar¨ªa con suma facilidad, parece ser desconocida para quienes afirman la necesidad de anegar 70 hect¨¢reas en funci¨®n de que antes de Carlos III eran terrenos de robledal. Hoy, por una serie de razones hist¨®ricas enjuiciables desde muy diversos puntos de vista, nos encontramos ante uno de los escas¨ªsimos bosques de Castilla (y de los mejores pinares de Europa) que ha formado un ecosistema cerrado donde, a pesar de las intensas -y a veces discutbles- talas a que est¨¢ sometido, se reproducen los pinos en forma natural a ritmo constante. Si en este pa¨ªs perder un ¨¢rbol es doloroso, mucho m¨¢s lo es sacrificar 100.000 e irrumpir en el bosque con un nuevo trazado de la N-601. Cuando este sacrificio resulta necesario en aras del bien com¨²n, no se puede, ni debe, interponer objeci¨®n ninguna. Cuando se trata de realizar alegando s¨®lo reivindicaciones (leg¨ªtimas, o no, es otro tema) o intereses particulares, debemos, los espa?oles, tratar de salvar el equilibrio ecol¨®gico de nuestro pa¨ªs por todos los medios de que dispongamos.

Los problemas particulares que AEORMA pueda tener con ADENA, el criterio que a la primera entidad le merezca la actuaci¨®n de la Asociaci¨®n para la Defensa de la Naturaleza, en relaci¨®n con las centrales nucleares, o los problemas del pueblo de Valdecasas, aun siendo muy respetables, creemos que no afectan ni aportan nada nuevo al problema establecido sobre la construcci¨®n o no de un pantano en pleno pinar de Valsam. Y esgrimir datos hist¨®ricos, de todos conocidos, sobre la Comunidad de Villa y Tierras de Segovia, no para reivindicar el dominio racional de un bosque; sino para acabar con parte de ¨¦l sin tener en cuenta otras opciones (no s¨®lo el lugar de El Pont¨®n. Ser¨ªa interesante que AEORMA se preocupara de conocer la opini¨®n de algunos doctores ingenieros de minas del Grupo Especializado en Aguas Subterr¨¢neas) nos parece no s¨®lo demag¨®gico, sino claramente antidemocr¨¢tico.