Pocos presos
Bueno, pues ya han quitado la materia reservada, pero a m¨ª me parece que est¨¢bamos mejor como est¨¢bamos, porque en seguida han empezado a saberse cosas que no conviene. Por ejemplo, lo de la poblaci¨®n pena? espa?ola. O sea que tenemos pocos presos, que lo ha dicho don Landelino Lavilla en el Consejo de Ministros. Y se creer¨¢ que ha hecho una gracia.El d¨ªa uno de este mes ten¨ªamos menos de diez mil presos en Espa?a. Habiendo tantos ladrones por la calle, tantas malesas, tantos soficos, tantos reaces, tantas redondelas, tantos piramidones y tanta Lockheed, a m¨ª me parece un esc¨¢ndalo que seamos el tercer, pa¨ªs con menos poblaci¨®n reclusa del mundo, o de Europa, o de donde aea. Pues don Landelino est¨¢ tan satisfecho, ah¨ª tienen, y lo ha soltado en el Consejo de Ministros como si hiciera una gracia, ya digo. En un pa¨ªs que cuenta con uno de los mayores ¨ªndices mundiales de fuga de divisas, no s¨¦ como se puede envanecer un ministro de Justicia de tener las c¨¢rceles desalquiladas. Por eso digo que est¨¢bamos mejor con la materia reservada. No te enterabas de las cosas y no te llevabas estos sofocos.
S¨®lo dos pa¨ªses, en el panorama internacional, tienen menos presos que Espa?a. Pues no s¨¦ qu¨¦ pa¨ªses ser¨¢n esos, pero all¨ª deben andar los bandidos subidos hasta en las copas de los ¨¢rboles, porque ya no cabr¨¢n en los caf¨¦s. Aqu¨ª, y eso que s¨®lo somos los terceros, te encuentras un defraudador de impuestos o un evacuador de capitales en cuanto sales a comprar el pan.
Que iba yo a comprar el pan, por cierto, y me encontr¨¦ a un esp¨ªa croata que tengo en la tele:
-Adem¨¢s de usted, est¨¢n prohibidos en A Fondo los se?ores Bardem y Gim¨¦nez Caballero. Y otros muchos que no recuerdo.
O sea la extrema izquierda y la extrema derecha. Las dos Espa?as. Entre las dos Espa?as, la televisi¨®n, ecl¨¦ctica, se queda en Prado del Rey.
-Y yo, que no soy de ninguna de las dos Espa?as, pero que tengo el coraz¨®n machadianamente helado, tambi¨¦n estoy prohibido. Congelado, que dicen en la tele, para mayor semejanza con la sentencia del poeta. Por el camino que vamos, van a ser m¨¢s los congelados por la censura que los congelados en Carabanchel y otros frigor¨ªficos nacionales.
?C¨®mo habiendo tanto especulador por la calle, tanto agionista, tanta suspensi¨®n de pagos y tanto telar sin lanzadera, se atreve don Landelino a romper la materia reservada y decirnos que en Espa?a ya casi no quedan presos? Nueve mil y pico a lo que parece. He estado echando cuentas. Entre gitanos, robagallinas, proxenetas, chorizas, mecheras, toco-mochos, amnistiados en tr¨¢mite y amnistiados sin tr¨¢mite, m¨¢s o menos me salen los n¨²meros. O sea que de los grandes delincuentes nacionales, no hay ni uno en la c¨¢rcel. Quitando el Lute, que m¨¢s que un delincuente es ya un daguerrotipo.
Lo que el pa¨ªs est¨¢ esperando de la justicia es la lista de la Lockheed, en defecto de otras listas que nunca existieron, para quedarse de una vez tranquilo sabiendo que los famosos regalos navide?os a los compradores espa?oles no fueron m¨¢s que anguilas de mazap¨¢n. Y lo que se nos da, de pronto, es la noticia desoladora de que las c¨¢rceles est¨¢n vac¨ªas. Pues que las llenen, que mano de obra criminal no falta. Y al se?or Lavilla que le pongan otra vez la materia reservada para que no nos d¨¦ m¨¢s estad¨ªsticas desmoralizadoras.
Me llama el gran realizador argentino Torre Nilsson, que quiere que hagamos una pel¨ªcula. Ya s¨¦ el tema que le voy a proponer: el Lute, que est¨¢ en el penal como el solitario de Spandau, en un pa¨ªs en el que no se puede dar un paso de tantos ladrones como andan por la calle. Sobre todo en las horas punta.
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