Pan en Bilbao y normalidad laboral en Vizcaya
Vizcaya recuper¨® ayer la normalidad laboral en un doble frente: la puesta en libertad de los cuatro obreros detenidos la pasada semana devolvi¨® a sus puestos a los trabajadores de las grandes industrias, y, por otro lado, los panaderos llegaban tambi¨¦n a un acuerdo para fabricar de nuevo este producto de primera necesidad que ha faltado en Bilbao durante tres d¨ªas.
Por lo que se refiere al primero de los conflictos, iniciado 'hace nueve d¨ªas en se?al de protesta por los sucesos de Fuenterrab¨ªa, su desarrollo ha tenido altibajos hasta el punto de que en ocasiones se han enfrentado entre s¨ª los propios trabajadores. Mientras unos defend¨ªan la tregua acordada, para la segunda mitad de la pasada semana, otros manten¨ªan a ultranza la actitud de permanecer en huelga hasta que saliesen a la calle todos los detenidos con motivo de estos ¨²ltimos conflictos.
El lunes fueron puestos en libertad los cuatro detenidos, que hab¨ªan pasado a disposici¨®n del Tribunal de Orden P¨²blico, y los trabajadores decidieron poner punto final a una huelga que en sus momentos ¨¢lgidos ha llegado a tener a 120.000 trabajadores en la calle. La propia fuerza de los huelguistas ha desbordado en bastantes ocasiones a los dirigentes de las organizaciones sindicales, que pretend¨ªan dominar la situaci¨®n.
?La huelga de estos d¨ªas —han reconocido miembros de la COS—, ha venido a demostrar que es necesario un sindicalismo libre para que los trabajadores puedan dominar un conflicto de este tipo. O de una vez se consigue la libertad sindical o las huelgas que se organicen van a ser de tal naturaleza que ni la COS ni nadie van a poder controlarlas?.
Las declaraciones de la COS han constituido una autodefensa frente a quienes les acusaban, de haber acordado una tregua a espaldas de los trabajadores, al tiempo que ven¨ªan a reconocer su propia debilidad en los momentos actuales: ?Como organizaci¨®n ¨¦sta huelga nos ha cogido en cueros y la COS no ha estado a la altura que debiera, porque t¨² siquiera est¨¢ clara todav¨ªa su propia configuraci¨®n. Mientras no tengamos una legislaci¨®n que ampare un sindicalismo libre, s¨®lo podernos funcionar a un diez por ciento de nuestras posibilidades?.
Resuelta la huelga con una coordinadora de organizaciones sindicales que ha demostrado no tener la fuerza que tal vez cre¨ªan sus dirigentes, quedaba pendiente el conflicto del pan, que pese a su menor importancia econ¨®mica, s¨ª ha tenido una inmediata repercusi¨®n en la calle.
Despu¨¦s de una marathoniana reuni¨®n que finaliz¨® ayer de madrugada, empresas y trabajadores llegaban por fin a un acuerdo. En la ¨²ltima instancia, los obreros han conseguido pr¨¢cticamente todas sus peticiones: que se les reconozcan oficialmente los domingos libres, que se les abone la jornada ¨ªntegra del domingo por las dos horas extraordinarias que trabajan los s¨¢bados y que no se despida, a los correturnos de los obradores'. En estas condiciones las panader¨ªas, de Bilbao tuvieron por fin pan ayer por la ma?ana.
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