Esperanza para un arreglo pol¨ªtico con Gibraltar

Si alguno de los tres candidatos independientes pro espa?oles es elegido miembro de la c¨¢mara de la asamblea gibraltare?a, el nuevo Gobierno de Gibraltar habr¨¢ de contar en adelante con la opini¨®n de quienes preconizan negociaciones con Espa?a. El abogado Jos¨¦ Mar¨ªa Triay, que propugna la apertura inmediata de conversaciones para un acuerdo pol¨ªtico con Espa?a, se muestra seguro de su triunfo. Lo ¨²nico que mis partidar¨ªos tienen en duda es el n¨²mero que har¨¦ entre los 15 miembros de la c¨¢mara, dice por tel¨¦fono a Efe.Es m¨¢s incierta la suerte del otro abogado candidato, Eric Ellul, que apoy¨¢ndose en eiementos j¨®venes preconiza primero un acuerdo econ¨®mico, comercial y cultural con Espa?a, esperando que de ¨¦l se der¨ªve naturalmente el arreglo pol¨ªtico.

Como lo es la del hombre de negocios y tambi¨¦n candidato, Mesod Benady, quien contempla la aproximaci¨®n a Espa?a de, modo similar a Triay y basa su voto en hombre de mediana edad.

Todos los pron¨®sticos sobre estas elecciones a los 15 esca?os de la C¨¢mara de la asamblea se hacen en Gibraltar a ojo, al faltar sondeos y encuestas de opini¨®n, y son de gran fragilidad por poder decidir la suerte de un candidato un poco m¨¢s de 100 votos.

En efecto, los electores son 16.000 para los 15 esca?os que ocupar¨¢n a partes desiguales -ocho y siete, respectivamente- el Gobierno y la oposici¨®n.

Es casi seguro que el Partido Laborista de sir Joshua Hassan, el ministro principal saliente, volver¨¢ a formar gobierno sentando a sus miembros en los ocho puestos, o al menos con una coalici¨®n,

Desaparecido el Partido para la Integraci¨®n con Gran Breta?a, de Maurice Xiberras por haberle negado categ¨®ricamente la presencia el Gobierno brit¨¢nico, el reci¨¦n creado Movimiento Democr¨¢tico de Gibraltar podr¨ªa situar tres o cuatro miembros en la C¨¢mara y compartir la oposici¨®n con independientes.

The Financial Times las califica de cruciales para el futuro del pe?¨®n, y dice que tanto Londres como Madrid las contemplan con especial inter¨¦s por tratarse de una suerte de refer¨¦ndum.

Gran Breta?a y Espa?a siguen en sus posturas respectivas. La primera pretende que deben respetarse ante todo los deseos de los habitantes de este enclave de 5,8 kil¨®metros cuadrados, 29.927seg¨²n su estimaci¨®n. Espa?a reclama la soberan¨ªa y promete, en acuerdo con la ONU, el respeto a los intereses de los gibraltare?os una vez sea devuelto el pe?¨®n.