Esta noche, Dur¨¢n-Castellini: la "ciencia", contra el "punch"
Esta noche, en el Palacio de Deportes de Madrid, Jos¨¦ Dur¨¢n har¨¢ la primera defensa de su t¨ªtulo mundial de los superwelters (versi¨®n WBA). Su combate con el aspirante oficial, el argentino Miguel Angel Castellini, comenzar¨¢ entre las once y las once y cuarto de la noche, y ser¨¢ televisado en directo a Espa?a, Argentina, Uruguay, Chile, Colombia y Venezuela.El Dur¨¢n-Castellini se incluye en una velada que organiza el promotor espa?ol Mart¨ªn Berrocal y cuyo presupuesto se eleva a siete millones de pesetas. Ocupa el segundo lugar de un programa que ofrece tambi¨¦n los siguientes combates: Francis (tinerfe?o, campe¨®n nacional de los medios)-Hugo Carro (argentino, sparring de Castellini); Mimmoun Mohatar-Misako, (japon¨¦s, pr¨®ximo aspirante al mundial de los superwelters), y Evangelista- Rudi Lubbers.
La segunda juventud
Es muy frecuente que los grandes boxeadores lleguen a los t¨ªtulos mundiales en su segunda juventud, ¨¦poca que suele comenzar en ellos un instante despu¨¦s de que hayan a?adido a su cuenta corriente una bolsa suficientemente alta. A partir de entonces dejan de sentirse necesitados, pierden esa punta de coraje que diferencia a un suicida de un mercenario y, salvo algunas excepciones, prefieren economizar castigo a buscar gloria. Sobre el ring la llamada ?afici¨®n? no existe: el est¨ªmulo que mueve a los p¨²giles es el deseo de mudarse de un suburbio a un barrio residencial. Tras el factor ¨ªmpetu siempre hay un f¨¢ctor miseria.
Castellini y Dur¨¢n son dos hombres acomodados y, como otros boxeadores de primera l¨ªnea, tienen oficio para superar dignamente las situaciones, que en su profesi¨®n nunca son f¨¢ciles.
A pesar de todo, hay un momento supremo en el que los grandes p¨²giles son capaces de olvidar la equivalencia d¨®lar-peseta o d¨®lar-peso argentino para atender exclusivamente a salir del trance con dignidad. Y los campeonatos del mundo son, o deben ser, un largo momento supremo.
Si tratamos de medir la pelea Dur¨¢n-Castellini con patrones matem¨¢ticos, hemos de acudir a los historiales. Desde 1965, el aspirante ha disputado 74 combates, con 42 victorias antes del l¨ªmite, 17 por puntos, 10 por empates, 4 derrotas por la v¨ªa r¨¢pida y una por puntos. El espa?ol, que tiene treinta anos, uno m¨¢s que su rival, ha totalizado unos 70 combates, con tres derrotas, por puntos, media docena de ?nulos? dedor de 60 victorias, casi todas logradas al l¨ªmite.
Un duelo cl¨¢sico
Seg¨²n estos datos, van a enfrentarse un cient¨ªfico, Dur¨¢n, y un pegador, Castellini, con lo que estar¨ªamos ante un duelo citsico; ante un choque entre dos conceptos distintos del boxeo. Si nos atenemos a lo que han sido los combates hist¨®ricos entre hombres como Dur¨¢n y Castellini, el final es imprevisible.
?Cu¨¢l es el momento de forma y con qu¨¦ esp¨ªritu subir¨¢ al ring Jos¨¦ Dur¨¢n? Su preparaci¨®n ofrece toda clase de garantias; por otra parte, el combate se celebra en Madrid. Se puede asegurar que jam¨¢s alzar¨ªa el brazo, como hizo ante Dagge en Alemania; si pierde, ser¨¢ porque el otro ha sido m¨¢s certero o mejor que ¨¦l.
Esta noche el campe¨®n no va a ser un p¨²gil veterano, sino un chico madrile?o que pelea ante sus vecinos. Hoy, Dur¨¢n no va a salir al ring pensando en la bolsa ni en la vida.
?Y Castellini? ?Tendr¨¢ un car¨¢cter tan fr¨¢gil como se ha dicho? ?Ser¨¢ uno de esos deportistas que no pueden con el peso de la responsabilidad? Tenemos pocos datos sobre ¨¦l. Se sabe que est¨¢ bien preparado y se rumorea que evit¨® cuidadosamente al japon¨¦s Wajima (el campe¨®n al que destron¨® Dur¨¢n), a pesar de que pudo enfrentarse a ¨¦l antes que el espa?ol.
La t¨®nica del combate ser¨¢ ¨¦sta: Castellini avanzar¨¢ continuamente hacia Dur¨¢n con las manos un poco ca¨ªdas y basculando el torso. El espa?ol tratar¨¢ de fijar la pelea en la larga distancia con sus directos de izquierda. Una proporci¨®n notable de sus golpes llegar¨¢ al rostro de Castellini.
El combate va a tener un lance fundamental: cada vez que Dur¨¢n falle, Castellini tratar¨¢ de aplicarle un derechazo, mestizo de directo y crochet, que es su golpe de KO.
S¨®lo falta saber si el campe¨®n seguir¨¢ en pie o si doblar¨¢ la rodilla.
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