La pura reivindicaci¨®n salarial no justifica un oto?o caliente / 1
?Posible oto?o caliente? S¨ª, muy posible y por tanto las medidas adoptar paliar¨¢n el grado de calor pero nunca el calor evidente que habr¨¢. Me explico: si ps¨ªquicamente, pol¨ªticamente, econ¨®micamente, etc, etc, estamos todos pensando en la viabilidad de un oto?o caliente es absolutamente imposible que de alguna forma, en alguna semana o en alg¨²n d¨ªa no haga calor. No olvidemos, hasta en eso de la climatolog¨ªa, lo que se llama ?el veranillo de San Mart¨ªn.? Hasta es to tenemos en pro de la l¨®gica del oto?o caliente.Otro tema, o subtema, es el grado de calor. Si hoy, a la vista de lo ocurrido en Espa?a desde el 21 de septiembre, alguien afirmara que el oto?o va a sar pastoril y po¨¦tico andar¨ªa fuera de ¨®rbita. Pero si hoy, con todo lo ocurrido y con lo que pueda ocurrir no se toman medidas para los pr¨®ximos meses, ese alguien (Gobierno, empresarios, trabajadores, ciudadanos) pondr¨¢n a Espa?a fuera de ¨®rbita. Y esto es grave. Y esto es gravisimo.
La pura reivindicaci¨®n salarial, as¨¦pticamente, no debe de ser causa, origen, motivo, ra¨ªz, excusa, justificaci¨®n para calentar el oto?o. Son l¨®gicas las discrepancias pero el di¨¢logo vence las dificultades.
Lo que si puede ser cierto, evidente es que la contrataci¨®n colectiva podr¨ªa ser aprovechada para el foll¨ªn o ffill¨®n. Y esto es as¨ª, porque fue as¨ª y esto es as¨ª mientras no adopte Don Gobierno las medidas que debe adoptar en aras del bien general de toda la comunidad.
Hay que remejarse. Lleg¨® la hora de olvidarse de posibles popularidades transitorias para lograr que el pueblo sea protagonista permanente, sea sujeto constarite en el quehacer nacional. No hay que jugar al temor a las elecciones si ello implica no tomar medidas ahora en aras de las elecciones. Hay que posibilitar las elecciones tomando medidas econ¨®micas, salariales, coyunturales, etc, etc. Porque de no hacerlo, quiz¨¢ no lleguemos a las eleccJones. Si, con serenidad digo esto. La pol¨ªtica puede ser un divertimento para justificar un ?no hacer hoy?. Pero si hoy no hace el Gobierno lo que debe de hacer, de verdad, muy de verdad que ma?ana no estar¨¢ este Gobierno y quiz¨¢ no est¨¦ nada. La econom¨ªa de Espa?a est¨¢ fatal. Y la culpa... tiene en una parte nombres y apellidos concretos. S¨ª. Hay que empezar a exigir ?responsabilidades de prestigio? a algunos ex ministros que no dieron casi ni golpe y el golpe que dieron lo dieron flojo o regular o mal o muy mal.
S¨ª, ya nos hemos cansado de tanto y tanto fracaso emocional con gentes que fueron esperanza para la econom¨ªa espa?ola y luego result¨® que nos han llevado al desastre actual. S¨ª, estamos ya en la necesidad de citar nombres y apellidos.
Pero... ?qu¨¦ podemos hacer? La reforma pol¨ªtica es obra y gracia del Gobierno. Y la direcci¨®n econ¨®mica tambi¨¦n. Nosotros podemos aportar un sacrificio hasta el l¨ªmite. Dispuestos y con todo inter¨¦s y esfuerzo. Porque, ego¨ªstas en definitiva, nosjugamos el futuro nuestro, vuestro y de todos.
Con la actual inflaci¨®n de costes, nuestros problemas de exportaci¨®n pueden convertirse en grav¨ªsimos. Me dicen que en bastantes sectores estamos pagando salarios iguales o mayores que en Europa o que en bastantes pa¨ªses europeos. Aparte ideas de justicia, el tema tiene gravedad que nadie discutir¨¢. ?Qu¨¦ hacer con l¨ªneas cortas de producci¨®n, productividad baja, inflaci¨®n de costes y paros y huelgas? Hay que tomar medidas dr¨¢sticas. Hay que imponer una pausa para permitir un respiro, una reflexi¨®n y un nuevo planteamiento. Pausa evidente, impuesta.
Hay que luchar codo con codo y dirigidos por el Poder. Y si el Gobierno no quiere o no puede, el oto?o y el invierno ser¨¢ el principio del fin.
Reitero que estamos dispuestos al sacrificio cierto y concreto. Pero todos deberemos saber ya si tenemos posibilidades de luz. Y en esto el Gobierno, como en casi todo, tiene la palabra.
Existe un problema de informaci¨®n de arriba a abajo. Hay que decir cual es nuestra situaci¨®n econ¨®mica. Y urge. Insisto, hay que explicar al pueblo, nos tienen que explicar la gravedad que tiene nuestra econom¨ªa. Y entonces, entenderemos las cosas. Hasta entonces, todos tenemos derecho a dudar.
Y a base de dudas no construimos ni el hoy ni el ma?ana. No entiendo la floj¨ªsima informaci¨®n ?made in Gobierno? sobre multitud de cosas. No es posible querer explicar algunos hechos muy graves en notas brev¨ªsimas y a posteriori de lo sucedido. Mal. Mala informaci¨®n y por tanto, posibilidad de que nos deformen otros.
Medidas complejas, pero. y con esto acabo, explicadas al pueblo con detalle. Y con un previo reconocimiento de que alg¨²n Gobierno se equivoc¨® en su pol¨ªtica econ¨®mica. El ser humildes no vendr¨¢ mal. Todo lo contrario. Medidas muy dif¨ªciles pero para una Espa?a en momento muy dif¨ªcil. Para Lina Espa?a que, en definitiva, nos la estamos jugando. Y Espa?a est¨¢ por encima de si ma?ana me votar¨¢n, de si dejar¨¦ de ser popular, de si caer¨¦ bien o mal.
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