Piden centros de educaci¨®n para adultos
La educaci¨®n permanente de adultos ha sido uno de los temas que en los ¨²ltimos meses ha resaltado m¨¢s dentro de las peticiones de los vecinos, en lo que se refiere a educaci¨®n. La Asociaci¨®n de Vecinos de La Paz-Entrev¨ªas ha dirigido un estudio al ministro de Educaci¨®n y Ciencia en el que, aparte de otros temas, se muestra un profundo inter¨¦s por este tipo de educaci¨®n que est¨¢ olvidada en Madrid.
La situaci¨®n de la ense?anza en la zona sur de Madrid es el objetivo de un estudio remitido por la Asociaci¨®n de Vecinos de La Paz-Entrev¨ªas, al ministro de Educaci¨®n y Ciencia. ?Tras seis a?os de aplicaci¨®n de la Ley General de Educaci¨®n nada se ha conseguido en el terreno fundamental, especialmente en los planos econ¨®mico, de calidad y de continuidad, por citar algunos de los que m¨¢s directamente afectan a esta zona.?En el plano econ¨®mico, el estudio se?ala que el incumplimiento de la gratuidad es sistem¨¢tico en el aspecto de impartir la ense?anza y en el de libros y material de ense?anza de los alumnos. Esta asociaci¨®n de La Paz fue una de lasque se uni¨® desde el primer momento al movimiento surgido en todo el movimiento ciudadano contra la venta de libros de texto en los centros docentes. La denuncia formulada contra determinados centros en los que el a?o pasado se vendieron libros ha hecho que este a?o, al menos en centros estatales, se suspenda la venta.
El Ministerio de Educaci¨®n, seg¨²n el estudio antes referido, ha dedicado gran parte de sus presupuestos a subvencionar los centros privados ?de manera indiscriminada, il¨®gica y sin el necesario control de inversi¨®n-subvenci¨®n?. Todos los centros privados de la zona, sin exclusi¨®n, cobran a sus alumnos cantidades superiores a las permitidas, bajo diversos ep¨ªgrafes, como m¨¦dicos, cuotas de asociaci¨®n de padres de alumnos, formaci¨®n de expedientes o sic¨®logos. Estos centros privados obligan a sus alumnos a asistir a horas extraordinarias de clases para poder justificar con recuperaciones las cantidades que no perciben por subvenci¨®n.
?Este sistema es, lamentablemente, el mismo que siguen los centros estatales con sus permanencias, prohibidas por la ley, pero al parecer permitidas por la falta m¨ªnima de control de las inspecciones de Ense?anza General B¨¢sica.?
Se?alan los vecinos que los cr¨¦ditos concedidos por el Ministerio han permitido la financiaci¨®n de grandes editoriales, cr¨¦ditos incrementados al permitir que cada a?o aumenten los precios de los libros, autorizar reediciones para garantizar la venta anual y permitir, ?porque permitir es no sancionar?, la venta de libros en los colegios.
El planteamiento en el aspecto de calidad de la ense?anza es similar al antes expuesto. El informe critica la ley de selectividad, porque estiman que una calidad en la ense?anza obligar¨ªa a que cada alumno, a lo largo de su escolarizaci¨®n, ocupase aquellos puestos de trabajo para los que est¨¢ capacitado, condicionado exclusivamente por su capacidad intelectual. Para conseguirlo se apuntan varias opciones entre las que destaca la necesidad de un profesorado dedicado ¨ªntegramente a sus alumnos y, en consecuencia, retribuido de tal forma que no tenga que recurrir a las permanencias ni dedicarse a otras actividades. ?Este profesorado necesita disponer de las horas no lectivas que reclaman los alumnos de recuperaci¨®n, aqu¨¦llos que fueron promocionados por cuesti¨®n de edad o imperativo legal sin que se les tuviesen en cuenta su capacidad y asimilaci¨®n de contenidos.?
El apartado que m¨¢s preocupa a los vecinos de esta zona de Madrid, y en general a la mayor¨ªa de los barrios, deducible por sus constantes peticiones en este sentido, es el de la continuidad en los estudios. Se denuncia el caso de j¨®venes que terminan su escolarizaci¨®n b¨¢sica o que la terminar¨¢n en los pr¨®ximos a?os y que no pueden continuar sus estudios por cuestiones econ¨®micas, pero necesitan actualizaciones peri¨®dicas o simplemente desean entrar en campos de conocimiento no previstos por los programas oficiales de escolarizaci¨®n.
?La educaci¨®n para adultos establecida por el Ministerio hace seis a?os, funciona solamente en el plano legal. No se ha creado ni un solo centro de educaci¨®n permanente de adultos. En este barrio, al igual que en muchos otros de Madrid, apenas existen aulas de educaci¨®n permanente a pesar de que la vigente ley, en sus art¨ªculos 44 y 91 ofrece todo un abanico de posibilidades.
El estudio enviado al ministro de Educaci¨®n termina con un cap¨ªtulo de solicitudes que comienza con una urgente petici¨®n de que la gratuidad en la ense?anza se cumpla en todos sus aspectos. ?Que se supriman de forma definitiva las permanencias en los centros estatales y privados, as¨ª como las subvenciones a estos ¨²ltimos?, que ¨²nicamente significan el amparo a las empresas privadas cuando los presupuestos dedicados al mantenimiento de los propios centros estatales son lamentablemente insuficientes.?
Otra de las solicitudes es la de actualizaci¨®n real de las retribuciones del profesorado estatal y finalmente que, cumpliendo lo preceptuado en la Ley General de Educaci¨®n, habilite el Ministerio los cr¨¦ditos necesarios para crear centros de educaci¨®n de adultos a trav¨¦s de los cuales se garantice la continuidad de la formaci¨®n recibida en los a?os de escolarizaci¨®n obligatoria.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.