Las condiciones del pr¨¦stamo del FMI a Gran Breta?a provocan la ca¨ªda de la libra
La libra esterlina conoci¨® ayer su crisis m¨¢s grave de los ¨²ltimos tiempos cuando descendi¨® en el mercado internacional de divisas por debajo de la equivalencia de un d¨®lar y sesenta centavos. En un momento lleg¨® a estar en un d¨®lar y 57 centavos. La raz¨®n para que se produjera este dram¨¢tico descenso fue el informe publicado el domingo en el Sunday Times, de Londres, acerca de las condiciones que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le ha impuesto a Gran Breta?a para garantizarle un pr¨¦stamo de cerca de 4.000 millones de d¨®lares.
Entre esas condiciones figuraba la promesa por parte brit¨¢nica de devaluar su divisa y dejarla en un d¨®lar cincuenta centavos.Aunque el FMI y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, desmintieron inmediatamente la noticia, en el mercado londinense cund¨ªa el desaliento ayer por Ia ma?ana.
Una devaluaci¨®n de ese g¨¦nero obligar¨ªa al Gobierno a romper el contrato social en virtud del cual asegura los salarios en un nivel fije y controla la subida de los precios, Las perspectivas de una ruptura del Gobierno con los sindicatos, que son los signatarios del citado contrato, han ayudado a que la esterlina descendiera hasta cifras alarmantes, en uno de los d¨ªas de p¨¢nico m¨¢s intensos que ha vivido la city desde los tiempos en que ¨¦l primer ministro conservador, Edward Heath decret¨® la semana laboral de tres d¨ªas en 1974.
El gobierno laborista no se ha tomado con excesivo dramatismo las noticias, porque sigue afirmando que la libra est¨¢ siendo considerada por debajo de su vales real y porque tanto los sindicatos como el ejecutivo del, partido han mostrado su apoyo incondicional a la pol¨ªtica econ¨®mica de la Administraci¨®n, que es la que hace surgir la desconfianza internacional.
Los laboristas saben, por otra parte, que una devaluaci¨®n de la libra del nivel anunciado har¨ªa m¨¢s atractiva la exportaci¨®n brit¨¢nica pero har¨ªa insostenible la vida del hombre de la calle en el Reino Unido.
El ministro de Hacienda, Healey, neg¨® ayer tarde en el Parlamento las informaciones de prensa. Dice que no ha habido ninguna precondici¨®n del FMI y que en todo caso la negociaci¨®n se empezar¨¢ a efectuar el mes que viene en Londres. En cualquier caso, sus seguridades no han satisfecho a la oposici¨®n, que le gritaron ?dimisi¨®n? con m¨¢s fuerza que nunca en los Comunes. Tanto en el Parlamento como en la prensa y en la city se piensa que hay mucho de cierto en los rumores acerca de la obligatoriedad de la devaluaci¨®n.
La crisis de la esterlina se intensific¨® a partir de abril, poco despu¨¦s de que el primer ministro Wils¨®n dejara su puesto ?por razones de edad?. Wilson, que fue sustituido m¨¢s tarde por Callaghar dice ahora que si ¨¦l hubiera previsto que esta situaci¨®n se iba a producir no se habr¨ªa retirado en aquel momento.
El mes pasado, el Banco de Inglaterra se vio en la necesidad de acudir de nuevo al FMI, que despu¨¦s de ciertas reticencias s mostr¨® favorable a la concesi¨®n d 4.000 millones de d¨®lares, sobre todo despu¨¦s de que aqu¨ª se situara el tipo de inter¨¦s en un 13% y se asegurara el recorte del gasto p¨²blico.
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