Gaullistas y giscardianos luchan por la alcald¨ªa de la capital francesa

La batalla por la alcald¨ªa de Par¨ªs, en v¨ªsperas de las municipales que tendr¨¢n lugar los d¨ªas 13 y 20 del pr¨®ximo marzo, enfrenta desde ayer, de manera aparentemente irreversible, a los dos grandes grupos de la mayor¨ªa gubernamental. Por un lado, el Rassemblement pour la Republique (RPR), de Jacques Chirac y, por el otro, a los partidos centristas, favorables a Giscard d'Estaing. Esta guerra con personalidades de primer plano como intermediarias, constituye el primer mano a mano pol¨ªtico serio entre el presidente y su antiguo primer ministro.

Respondiendo a la decisi¨®n unilateral de los grupos centristas que, inspirados por Giscard d'Estaing, lanzaron al ministro de Industria, Michel de Ornano, a la conquista de la alcald¨ªa de Par¨ªs, ayer el RPR de Chirac present¨® oficialmente sus candidatos propios para los dieciocho sectores en que est¨¢ dividida la capital. El car¨¢cter irreconciliable de las dos fracciones se manifest¨® con claridad en la declaraci¨®n hecha por los chiraquistas al anunciar sus listas, en la que se acusa al ministro de Industria de ser un factor de divisi¨®n, considerando su candidatura apresurada e ins¨®lita y, de manera indirecta, reproch¨¢ndole al presidente de la Rep¨²blica el haber colocado al RPR ante un hecho consumado, sin consulta previa.Paralelamente, Ornano respondi¨® afirmando: Nadie, m¨¢s que yo, puede pretender ser candidato de la mayor¨ªa. En estas condiciones, s¨®lo un milagro podr¨ªa realizar la uni¨®n entre chiraquistas y giscardianos en la primera vuelta. Olivier Guichard, ministro de Estado y ministro de Justicia, gaullista, parece que intervino ante el presidente para proponer una f¨®rmula de uni¨®n que reemplazase la encabezada por Michel de Ornano. Los nombres adelantados fueron los de Simone Veil, ministro de la Salud; Roger Frey, presidente del Consejo Constitucional y Bernard Lafay, actual presidente, del Consejo de Par¨ªs. Pero se pensaba que el remedio lleg¨® demasiado tarde.

Paris, desde 1959, ha sido un coto gaullista. De los 31 diputados con que cuenta la capital, dieciocho pertenecen al RPR. De los doce senadores, cinco lo son tambi¨¦n, igual que 34 de los noventa consejeros municipales. De las siete comisiones permanentes del Hotel de Ville (alcald¨ªa), cuatro est¨¢n dirigidas por chiraquistas. Esta lucha en el terreno municipal, entre las dos tendencias de la mayor¨ªa, deja entrever ya la esperanza que caracterizar¨¢ su combate por las legislativas.