Juan Marichal: perfil de un intelectual espa?ol
Su obra historiogr¨¢fica dedica especial atenci¨®n al per¨ªodo republicano
Ha estado pasando unos d¨ªas de vacaciones en Espa?a Juan Marichal, uno de los grandes intelectuales de la cultura espa?ola de ahora mismo. No hace mucho califiqu¨¦ a Marichal como uno de lo escritores m¨¢s responsables y veraces de la cultura espa?ola e ultramar. Su obra importa y mucho para quienes quieran conoce de veras el tremendo entramado -lleno de geniales aciertos y pat¨¦ticos errores- de la vida nacional en estos dos ¨²ltimos siglos.
?Hombres de Espa?a /ni el pasado ha muerto./ ni est¨¢ el ma?ana/ -ni el ayer, escrito. ? Con estos versos de Antonio Machado iniciaba Juan Marichal el pr¨®logo de su libro sobre Aza?a. Y en ellos creo que queda reflejada admirablemente la intencionalidad de la labor historiogr¨¢fica de Marichal. Exiliado pol¨ªtico en 1938, la obra de Marichal es una reflexi¨®n aguda y, comprometida sobre las realidades espa?olas. avizoradas siempre desde una perspectiva de futuro. Marichal contempla en su obra esperanzadamente el porvenir espa?ol, que propugna como integraci¨®n generosa de todo lo valloso de nuestro pasado nacional.Juan Marichal es tinerfe?o. Naci¨® en 1922 en una familia burguesa activamente republicana. Su trayectoria biogr¨¢fica fue marcada decisivamente por la Segunda Rep¨²blica y por los Posteriores acontecimientos hist¨®ricos que lo llevaron al exillo.Ten¨ªa nueve a?os cuando llego la Rep¨²blica. Sus familiares ven¨ªan con mucha frecuenc¨ªa a Madrid. donde ten¨ªan intereses comerciales. En 1935 fijan su residencia en la capital de Espa?a. Juan Marechal contin¨²a en Madrid sus estudios de hachillerato cuando estalla la guerra civil. Para nuestro escrito el per¨ªodo republicano constituye una de las ¨¦pocas m¨¢s interesantes de la historia de Espa?a. En aquellos cinco a?os coexistieron tres generaciones de la importancia de la del 98, la de Ortega y la de Garc¨ªa Lorca. Marichal me ha manifestado: ?La cultura espa?ola alcanz¨® entonces un nivel creador diflclimente repetible, una universalidad y una originalidad que nos parecen ahora incre¨ªbles dentro de un clima abierto de renovaci¨®n espirltual.?
La guerra civil cient¨ªfica a Marichal fuera de Espa?a: Par¨ªs, Casablanca y M¨¦xico fueron las primeras etapas del exilio de Marlchal. En la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico cursa los estudios de filosof¨ªa y letras. Era un momento excepcionalmente bueno de aquella UnIversidad. en la que ensenaban rnuchos catedr¨¢ticos de las Universidades de Madrid y Barcelona que hab¨ªan huido del fascismo. En aquella facultad Marichal trabaj¨® especialmente con los profesores espa?oles Jos¨¦ Gaos y Joaqu¨ªn Xirau y con el historiador mexicano Edmundo O'Gorman a quien considera insustituible para el conocimiento del pensamiento iberoamericano.
Tradici¨®n liberal
Nuestro escritor marcha con una beca a la Universidad de Princeton para estudiar con Am¨¦rico Castro. de quien Marichal es aventajado disc¨ªpulo. En Princeton escribi¨® su tesis doctoral sobre Feijoo, por quien sent¨ªa gran inter¨¦s como precursor de la tradici¨®n liberal espa?ola. Marichal ha manifestado p¨²blicamente en muchas ocasiones y muy diversos escenarios su vinculaci¨®n radical a la tradici¨®n liberal espa?ola. entendida como talante y actitud de renovaci¨®n en la convivencia. En alguna ocasi¨®n ha dicho que tiene en preparaci¨®n un volumen que titular¨¢ significativamente Generaciones y semblanzas liberales. No sabernos en qu¨¦ habr¨¢ parado este proyecto.Desde 1946 reside en los Estados Unidos, donde ha impartido durante todos estos a?os cursos de literatura e histor¨ªa Intelectual de los pueblos de lengua espa?ola. Actualmente profesa en Harvard. Marichal gusta de decir que la universalidad la vitalidad y la expansividad de la cultura espa?ola lo convirtieron en el exilio en el legatorio afortunado de una fabulosa herencia hist¨®rico-cultural que ha llenado su vida y, a la que cree haber aportado algo.
Marichal se mueve un poco a caballo entre la historia y la cr¨ªtica literaria. En suscursos de literatura presta especial¨ªsima atenci¨®n al entorno socio-hist¨®rico en que se produce la obra literaria. Y cuando ense?a historia pone enfasis en una cosa tan importante como es el estilo. Precisamente su primer librose titul¨® La voluntad del estilo. Este primer libro de Marichal compone tina suerte de historla del ensayismo espa?ol desde el siglo XV ha ta nuestros d¨ªas. tomando como l¨ªnea de enlace v punto de referencia el estilo, La voluntad de estilo. Para Marichal la elaboraci¨®n de un estilo participa del car¨¢cter dram¨¢tico de toda vida humana y se reduce. finalmente a un conjunto de aceptaciones y rechazos ante las posibilidades expresivas, comunicativas de un idioma.
Aza?a y Negr¨ªn
Fruto de su inter¨¦s por la Rep¨²blica es la edici¨®n de las Obras completas de Aza?a. que iban precedidas de sustanciosos pr¨®logos recogidos posteriormente en el volunlen La vocaci¨®n de Manuel Aza?a. Marichal sigue empe?ado en su obra historiogr¨¢fica sobre el per¨ªodo republicano. No se vea en esto una a?oranza irrealista ni mucho menos un af¨¢n revanchista. Nada m¨¢s apartado del talante y la pretensi¨®n de Marichal. que quedan admirablemente relleja dos en el pr¨®logo de La vocaci¨®n de Manuel Aza?a: ?Por supuesto, el historiador de la Espa?a contempor¨¢nea una de las ¨¦pocas m¨¢s universales y genuinarnente historiables de la naci¨®n espa?ola ha imponerse una rigurosa honestidad intelectual y un m¨¢ximo de comprensi¨®n objetiva. Este imperativo normal dir¨ªase de toda labor de reconstrucci¨®n hist¨®rica. cobra mayor fuerza ¨¦tica en el caso de la historia de Espa?a contempor¨¢nea por la cuant¨ªa misma de la sangre derraada: y al deber de la ecuanimidad se a?aden el de la humildad y el de la comprensi¨®n. La historia espa?ola-moderna -tan hab¨ªtualmente maltratada por sus propios moradores. que parecen limpiarse de culpas al practicar dolorida y cotidiananiente la autodifamaci¨®n nacional- s¨®lo podr¨¢ ser reconstruida por hombres de paz. con esperanza constante y con voluntad de entender al pr¨®jimo.?Otra figura de la Republica por la que siente gran atracci¨®n Marichal es por su paisano, el camirlo Juan Negr¨ªn hombre de ciencia al que los acontecimientos espa?oles llevaron a la acci¨®n pol¨ªtica. Marichal trabaja sobre este controvertido personaje e incluso han aparecido ya en Espa?a concretamente en la revista Triunfo algunos apuntes sobre la personalidad de Negr¨ªn Recuerdo que estos d¨ªas pasados Marichal me dijo: ?La vida p¨²blica de Negr¨ªn coincide casi integramente con el per¨ªodo de la guerra.?
Juan Marichal emparent¨® en Norteam¨¦rica con el pocta Pedro Salinas al casarse con su hija Solita Precisamente sobre la poes¨ªa de Salinas versa su ¨²ltirno libro aparecido en Espa?a, Tres voces de Pedro Salinas. En la bibilograf¨ªa de Marichal hay que rese?ar asimismo El nuevo pensamiento pol¨ªtico espa?ol. aparecido en 1966 conjunto de ensayos que se refieren a las ideas pol¨ªticas surgidas en Espa?a desde el t¨¦rmino de la guerra civil. y que ha encontrado muchos problemas de censura aqu¨ª. Seg¨²n noticias editoriales, Juan Marichal prepara actualmente una historia intelectual y pol¨ªtica de la Espa?a contempor¨¢nea (1909-1939)
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