Los pol¨ªticos opinan que es un plan contra la democracia
FELIPE GONZALEZ
? En primer lugar, la situaci¨®n hace pensar que existe un plan de desestabilizaci¨®n pol¨ªtica, cuyo alcance es dif¨ªcil medir. Cuando menos, intentar¨ªa impedir las elecciones o dificultarlas, y como m¨¢ximo, pretende una involuci¨®n pol¨ªtica violenta inmediata.Segundo: si esto es as¨ª, y hay indicios de que efectivamente lo es al Gobierno se le debe exigir la audacia pol¨ªtica y la firmeza suficiente para abortar este plan hasta el fondo, tomando las medidas necesarias.
Secretario general del PSOE:
Por ¨²ltimo, respecto a la Oposici¨®n, que por cierto est¨¢ inerme ante los acontecimientos y puede ser una de las v¨ªctimas fundamentales, puede y debe haber un llamamiento que tienda a impedir las acciones en la calle, qu¨¦ aunque son uso leg¨ªtimo de un derecho, pueden servir en estos momentos como pretexto a los responsables de ese plan para continuar su ola de violencia y su escalada de terror.?
ENRIQUE TIERNO GALVAN
?La ¨²nica soluci¨®n que se me alcanza para dar otra vez confianza al ciudadano y nos permitiese respirar con sosiego e intentar resolver la situaci¨®n econ¨®mica y los problemas sociales y pol¨ªticos, ser¨ªa un Gobierno de coalici¨®n nacional que casi, casi, no quiero dramatizar, tendr¨ªa los caracteres de un Gobierno de salvaci¨®n nacional.En ¨¦l deber¨ªan estar representadas todas las fuerzas pol¨ªticas que tienen una incidencia sobre la opini¨®n p¨²blica, desde la izquierda hasta la derecha. Soy optimista sobre la posibilidad de que otros partidos acojan favorablemente esta idea.
Presidente del Partido Socialista Popular: (Declaraciones a la agencia Europa Press)
En mi opini¨®n, la situaci¨®n ha rebasado los l¨ªmites en los que pod¨ªa solucionarse por respuestas pol¨ªticas parciales. Lo que hace falta es una respuesta pol¨ªtica de largo alcance. Por otra parte, no creo que esto lo solucionasen las medidas de fuerza, como, por ejemplo el estado de excepci¨®n. Est¨¢ demostrado que con estas medidas las cosas se solucionan por quince, veinte d¨ªas o, a lo sumo, un mes, pero no se arreglan de ra¨ªz, y el problema reaparece a la primera ocasi¨®n.
Por lo que respecta al Ej¨¦rcito, la mayor parte de ¨¦l, despu¨¦s de lo ocurrido, est¨¢ viendo con claridad que el problema no es de izquierdas ni de derechas, sino que sigue planteado en t¨¦rminos de fascismo y antifascismo. Como el Ej¨¦rcito no es fascista, parece que empieza a ver claro, ha superado ya lo de izquierdas y derechas. Yo creo que mantendr¨¢ la calma y la serenidad, y comprender¨¢ que no es un problema de rojos y blancos, de guerra civil, sino de unas bandas concretas que est¨¢n actuando en contra de los intereses de la naci¨®n. ?
JOSEP ANDREU ABELLO
?Creo que lo que ha ocurrido en Madrid es extremadamente tr¨¢gico y fruto de la violencia que debiera estar erradicada. El secuestro del teniente general Villaescusa y el atentado al despacho laboralista de la calle de Atocha son sucesos muy graves.Es urgente la creaci¨®n de un Gobierno de concentraci¨®n nacional que agrupe a quienes est¨¢n por la evoluci¨®n del franquismo y a la Oposici¨®n responsable. Este Gobierno, con el apoyo del pueblo, es el ¨²nico que puede actuar contra quienes usan el terrorismo contra. la democracia. ?
Ex presidente del Tribunal Supremo de Catalu?a en el per¨ªodo de la Generalidad
?Ante la salvaje escalada de violencia de los grupos fascistas, perfectamente planeada, para interrumpir el proceso democratizador e instaurar un Pinochet, es imprescindible que el Gobierno y las fuerzas democr¨¢ticas den una respuesta contundente que demuestre que los m¨¦todos terroristas no s¨®lo interrumpen el proceso democratizador, sino que al contrario, lo aceleran.Esta respuesta contundente, a mi entender, debe ser la formaci¨®n inmediata de un Gobierno de amplio consenso democr¨¢tico, en el que se sientan representadas todas las fuerzas pol¨ªticas y sociales que aspiran al restablecimiento de la democracia. ?
JOSEP BENET
Un grupo de matones an¨®nimos ha decidido imponer en nuestro pa¨ªs la pol¨ªtica del terror. Y ha decidido por su cuenta ofrecernos una alternativa apoyada en la violencia y basada en el miedo. Frente a las opciones ideol¨®gicas que hoy intentarnos defender desde los partidos pol¨ªticos, los matones de la violencia estar¨¢n hoy celebrando, desde el anonimato, el triunfo espectacular de su alternativa. Frente a quienes con mayor o menor ¨¦xito intentamos defender y razonar el modelo de sociedad y de Estado que propugnamos para el futuro pol¨ªtico del pa¨ªs, ellos pretenden desde la violencia crear el clima necesario para imponer sus m¨¦todos y alcanzar sus objetivos. Para que su ?operaci¨®n pol¨ªtica? tenga ¨¦xito hacen falta muertos y secuestros en escalada vertiginosa. Hace falta crear el clima de miedo y terror que desencadena la espiral de mas miedo y mayor violencia.Se pretende con esta ?pol¨ªtica? acallar a quienes queremos racionalizar la vida p¨²blica, a los que, deseamos discutir nuestras diferencias en un clima de libertades con orden p¨²blico y paz social. Se pretende en ¨²ltima instancia que carguemos con la responsabilidad de este clima de violencia que es, seg¨²n se argumenta, consustancial a nuestro temperamento e idiosincrasia. Se quiere que quede patente nuestra culpabilidad porque ?la libertad no es posible en nuestro pa¨ªs?.
Miembro del secretariado de la Assemblea de Catalunya
Con esta pol¨ªtica de terror, en este clima de violencia se aspira a convencer a la opini¨®n p¨²blica de que los verdaderos culpables somos quienes aspiramos a un r¨¦gimen democr¨¢tico. Los que matan para impedir las libertades, quienes asesinan por esta ?noble? causa son, por el contrario, patriotas idealistas, defensores a ultranza de nuestras tradiciones y valores raciales. Y quienes creemos que las libertades ?las necesitamos simplemente para ser hombres? somos los verdaderos traidores, los culpables de la violencia que ellos practican por nuestra culpa. Esta es la dial¨¦ctica en juego.
JOAQUIN GARRIGUES
Pero habr¨¢ que decir con claridad desde ya que somos unos cuantos los que estamos dispuestos, en cualquier situaci¨®n y circunstancia, a seguir defendiendo las ideas que hagan posible las libertades p¨²blicas en esta tierra.
Presidente Federaci¨®n Partidos Dem¨®cratas y Liberales:
?Mi condena m¨¢s absoluta. Pero no basta con condenar los hechos, sino que hay que buscar las causas y procurar imponer los remedios. Durante los ¨²ltimos a?os del franquismo ha habido una proliferaci¨®n de servicios polic¨ªacos y de espionaje dependientes de diversos ¨®rganos gubernamentales, lo cual no favorec¨ªa su actuaci¨®n legal, dispersaba sus esfuerzos, dedic¨¢ndose a veces unos funcionarios a espiar a los otros, e introduciendo un factor de indisciplina en las fuerzas gubernamentales de orden p¨²blico.?Es. preciso acabar con esa grav¨ªsima anomal¨ªa, restablecer en los cuerpos de polic¨ªa y cuerpos armados la satisfacci¨®n interior y la disciplina a rajatabla, para que nunca pueda creer la opini¨®n p¨²blica que hay n¨²cleos de delincuentes pol¨ªticos que cuentan con la simpat¨ªa de personas o entidades que deben velar por el orden social.
JOSE MARIA GIL ROBLES
?Para mi es incomprensible que habiendo le¨ªdo declaraciones de personas y entidades que preconizaban la violencia e incluso la muerte, no se hayan producido procesamientos por inducci¨®n cuando se han cometido los cr¨ªmenes. ?
Presidente Federaci¨®n Popular Democr¨¢tica:
?La s¨²bita agravaci¨®n del orden p¨²blico registrada en las ¨²ltimas horas, no es producto de unas coincidencias fortuitas, sino que m¨¢s bien pertenecen al desarrollo de un plan minuciosamente concebido y ejecutado. Aqu¨ª de lo que se trata es evitar que Espa?a recupere su plena soberan¨ªa de pueblo independiente.Cuando el proceso de transici¨®n se encamina hacia una etapa decisiva con las elecciones, generales a 120 d¨ªas vista, se desencadena una gran operaci¨®n de violencia, asesinatos, secuestros y matanzas colectivas que buscan un mismo fin: el desequilibrio del sistema empujando a la Monarqu¨ªa a renunciar a la democracia e intentando resucitar los viejos y tr¨¢gicos esquemas del enfrentamiento de 1936 con la guerra civil al fondo.
JOSE MARIA DE AREILZA
En estas horas graves y peligrosas, es deber de todos los grupos pol¨ªticos y de todos los ciudadanos responsables apoyar sin reservas al Gobierno en su noble, empe?o de seguir adelante con firmeza en el proceso de la transici¨®n.?
Dirigente Partido Popular:
?Lamento profundamente todo lo ocurrido, que es s¨ªntoma de unos prop¨®sitos que resultan cada vez m¨¢s claros de impedir el tr¨¢nsito pol¨ªtico hacia la instauraci¨®n de la democracia en nuestro pa¨ªs.Resulta obligaci¨®n de todos un comportamiento equilibrado y un apoyo al leg¨ªtimo ejercicio de la autoridad, de tal modo que se haga imposible la realizaci¨®n de aquellos prop¨®sitos.?
PIO CABANILLAS
?La ¨²nica alternativa a la violencia es la democracia. Debemos tener el coraje, la decisi¨®n y el sentido de responsabilidad necesarios para seguir adelante. La sociedad espa?ola debe unirse frente al extremismo violento.?
Dirigente Partido Popular
?Soy contrario a toda violencia, venga de donde venga y la ejerza quien la ejerza. ?
FRANCISCO FERNANDEZ ORDO?EZ
?Estimo que ¨¦ste es un momento en el que tanto el Gobierno como la Oposici¨®n deben dar pruebas de serenidad y responsabilidad, ya que por todo lo que est¨¢ sucediendo da la impresi¨®n de que hubiera fuerzas en este pa¨ªs que quieren interrumpir el proceso de cambio, creando una atm¨®sfera de tensi¨®n en la que sea justificable cualquier aventura. En estos momentos, tanto el terrorismo como los secuestros, como las brutales represiones, s¨®lo pueden ser deseadas y provocadas por los adversarios de la democracia.Todas las fuerzas pol¨ªticas, desde el centro hasta la izquierda, y la derecha verdaderamente civilizada, deber¨ªan estudiar seriamente c¨®mo contribuir a crear la atm¨®sfera de calma y distensi¨®n que el pa¨ªs necesita."
Presidente Federaci¨®n Socialdem¨®crata
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