M¨²sica catalana de hoy
Hace unos d¨ªas, con motivo de la presentaci¨®n del Grup Instrumental Catal¨¢, en la Fundaci¨®n Joan Mir¨®, de Barcelona, ofreciendo un concierto homenaje a Robert Gerhard, Joan Brossa escrib¨ªa estas palabras: La l¨ªnea que arranca de Gerhard -el ¨²ltimo ejemplo de la cual es Mestres Quadreny- lleg¨® a ser en nuestra m¨²sica el camino del rigor y la claridad.Aunque ninguno de los m¨²sicos incluidos en esta grabaci¨®n participaron en el homenaje a Gerhard, de todo el disco, en conjunto, emana rigor constructivo, claridad mediterr¨¢nea, de una m¨²sica de c¨¢mara enormemente atractiva en su recogimiento.
Figura en primer lugar un Concierto para clave y cinco instrumentos (1968), de Josep Soler, gran l¨ªrico y sinfonista. Homenaje a Falla en la combinaci¨®n instrumental, se aleja del maestro gaditano por el procedimiento compositivo -serialismo- y las intenciones, privadas de cualquier recreaci¨®n del pasado, mel¨®dico o formal, de nuestra m¨²sica. La forma elegida es la cl¨¢sica del concerto y el tratamiento del clave, excelente, muy virtuoso a veces.
Josep Soler: concierto para clave y cinco instrumentos
AIbert Sarda: Isorritme.Xavier Benguerel. Capriccio stravagante. Carles Guinovart: Amalgama. The London Sinfonietta. Director. David Atherton. Clave: Harold Lester. Emi C 063-21309.
Albert Sard¨¢ basa su Isorritme en un factor estructural usado por algunos compositores medievales de la Ars Nova, como Guillaume de Machaut. Este factor isorr¨ªtmico podr¨ªa enunciarse, seg¨²n el autor, como la variaci¨®n constante de una o varias melod¨ªas mediante la repetici¨®n de un ritmo fijo. Para m¨ª la obra resalta por sus calidades t¨ªmbricas, realzadas por el empleo de la celesta.
El barcelon¨¦s Xavier Benguerel es uno de los compositores espa?oles de m¨¢s amplia proyecci¨®n internacional. Su obra, de acusada personalidad, se mueve dentro del post-serialismo y es bien conocida de los aficionados a trav¨¦s de numerosas grabaciones. El Capriccio stravagante (1973) para peque?a orquesta de c¨¢mara, concebido al modo de gran fantas¨ªa, tiene el calor imaginativo, el clima de contrastes tan buscado por el autor, enemigo de la m¨²sica intelectual y reflexiva, y partidaria de un orden din¨¢mico.
Finalmente, Amalgama (1971) de Carles Guinovart, cierra este hermoso disco con denso l¨ªrismo y profunda paz. Pocas veces la m¨²sica espa?ola contempor¨¢nea habr¨¢ contado con mejores int¨¦rpretes y mejor calidad de sonido en una grabaci¨®n. No hace mucho The London Sinfonietta y David Atherton sorprend¨ªan a los aficionados espa?oles con un espl¨¦ndido ¨¢lbum conteniendo la obra completa para conjunto de c¨¢mara de Arnold Sch?nberg.
El joven director brit¨¢nico, ganador de un Edison Award, ha hecho del conjunto London Sinfonietta, uno de los primer¨ªsimos del mundo, especialmente en lo que a m¨²sica contempor¨¢nea se refiere. Escuchando este disco nos ponemos a imaginar las versiones que Atherton podr¨ªa darnos de tantas obras de c¨¢mara espa?olas de las ¨²ltimas d¨¦cadas, para las que resulta imprescindible una interpretaci¨®n as¨ª.
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