La izquierda ha revalidado su triunfo en la segunda vuelta

El pasado domingo por la noche empez¨® en Francia la campa?a electoral por las legislativas, que se celebrar¨¢n en marzo del a?o pr¨®ximo, salvo que fuesen adelantadas, posibilidad poco probable como consecuencia de la victoria municipal de la uni¨®n de la izquierda.

El ¨¦xito de la oposici¨®n ha representado un fracaso para la mayor¨ªa de derechas que gobierna, pero muy particularmente para el presidente, Valery Giscard d'Estaing, y para su primer ministro, Raymond Barre.El primero, al ?apadrinar? al ministro de Industria, Michel d'Ornano, como candidato a la alcald¨ªa de Par¨ªs, hab¨ªa profetizado: ?Chirac no ser¨¢ alcalde de Par¨ªs.? El primer ministro, dos d¨ªas antes del escrutinio del domingo, hab¨ªa lanzado un solemne llamamiento a los franceses para que votaran por la mayor¨ªa, es decir, ?por una buena gesti¨®n de nuestra ciudad y por la tolerancia?. El resultado negativo ha colocado a las dos ?cabezas? del Estado en una situaci¨®n pol¨ªtica, cara a las legislativas, que con unanimidad se considera muy seria.

Aunque las cifras definitivas a¨²n no se conoc¨ªan ayer, sobre todo las concernientes a los peque?os ayuntamientos, se calculaba en un 52 % el electorado que ha votado por la izquierda. El hecho pol¨ªtico m¨¢s importante lo constituy¨® el triunfo de la oposici¨®n en las ciudades de m¨¢s de 30.000 habitantes de 221 en total, 155 tendr¨¢n un alcalde de la izquierda.

El avance no s¨®lo ha sido del Partido Socialista, sino tambi¨¦n del Comunista: el primero pas¨® de 46 ciudades a 81, y los comunistas de cincuenta a 72.

A primera vista, las caracter¨ªsticas de las municipales m¨¢s politizadas de la historia de Francia fueron las siguientes: el primer secretario del Partido Socialista, Fran?ois Mitterrand, se perfila como el l¨ªder consolidado, no s¨®lo de la izquierda, por haber ganado a la mayor¨ªa gubernamental, sino en el seno de su partido, ya que ?sus hombres? han ocupado la mayor parte de las alcald¨ªas. Segunda nota destacada: Par¨ªs, de leyenda revolucionaria, se revel¨® el domingo como una isla conservadora. Tercera: las municipales han barrido el centrismo giscardiano y ?lecanuetista?. Cuarta: los llamados ?marginales? (ecologistas, "jobertistas? y gaullistas de izquierdas), en la segunda vuelta, votaron preferentemente por la izquierda. Quinta: rompiendo la tradici¨®n, los abstencionistas de la primera vuelta (el domingo votaron alrededor del 78 % de los electores) tambi¨¦n prefirieron la izquierda. Sexta: el electorado socialista, en la segunda ronda, vot¨® ¨ªntegramente por los comunistas, lo que ha confirmado que los slogans de miedo al PC y al colectivismo, temas electorales de la derecha, no han hecho efecto.