La canci¨®n canaria, hacia la radicalizaci¨®n
Canarias se desliza por nuestro entendimiento basada en cuatro t¨®picos: Islas Afortunadas, donde todo est¨¢ barat¨ªsimo, existe un Teide en cada isla y un magn¨ªfico clima produce, entre otras cosas, tomates, pl¨¢tanos y tabaco. Los isle?os, ya se sabe, son gente agradable, de f¨ªsico favorecido y muy simp¨¢ticos.
Evidentemente, la canci¨®n no pod¨ªa verse libre de eso clich¨¦s. Junto a las melanc¨®licas fol¨ªas, nuestro conocimiento sobre ella apenas llega a la crucigram¨¢tica isa. Pero en los ¨²ltimos tiempos ha ido naciendo all¨ª una forma de expresi¨®n aut¨®ctona y popular, que no por desconocida, merece ser relegada al olvido.
Problemas, tradiciones
El nacimiento de una cultura aut¨¦nticamente canaria, se ve dificultada por las propias caracter¨ªsticas de las islas. La colonizaci¨®n que un d¨ªa sufrieron por parte de la Pen¨ªnsula —godos— ha permanecido en forma de dependencia. La antigua civilizaci¨®n guanche fue barrida e ignorada durante siglos y s¨®lo en ¨¦poca reciente, los artistas e intelectuales canarios, volcaron sus esfuerzos hacia su tierra, en vez de hacerlo hacia la Pen¨ªnsula. Se frena as¨ª el ¨¦xodo de intelectualidad canaria, que una vez llegada en el continente perd¨ªa con rapidez unas ra¨ªces, por lo dem¨¢s, escasamente definidas. Recientemente, naci¨® el Movimiento de Cultura Independiente Canaria, que trata de construir esa cultura partiendo de los restos casi arqueol¨®gicos de las manifestaciones guanches. Chirino, por ejemplo, incorpora a sus pinturas temas de clara inspiraci¨®n guanche, y con ¨¦l, otros muchos. Estos esfuerzos revierten ahora exclusiva hacia las mismas islas, lo que en algunos momentos ha producido un sentimiento de rechazo casi xen¨®fobo hacia todo cuanto venga de o salga hacia la Pen¨ªnsula. Esta sigue desconociendo los problemas de las islas y las posturas se radicalizan en espiral. La ¨²nica posibilidad de cortar este proceso ser¨ªa un acercamiento sincero a los problemas existentes, no en su ocultaci¨®n vergonzante.
Campo y ciudad
Las caracter¨ªsticas de Canarias hacen que la separaci¨®n entre campo y ciudad sean muy sutiles. En las islas se produce un fen¨®meno sin paralelismo en la Pen¨ªnsula.
Los recitales de canci¨®n popular, y m¨¢s ampliamente los sucesos culturales, son seguidos por el pueblo independientemente de donde se produzcan. Esto conlleva, el que, a falta de un idioma diferenciador y espec¨ªfico, la gente trate de aglutinarse en torno a un folklore com¨²n y generalizado. Los festivales suelen ser gratuitos y se realizan, por lo general, para recaudar fondos para despedidos o parados. Los grupos masivos, tipo Sabande?os, Arrieros, Granjeros o Los Viejos, alternan con otros m¨¢s reducidos, como Taburiente, Tiempo Nuevo, o Suso Junco o Pepe Paco. Estos grupos y cantantes, en su mayor¨ªa perfectos desconocidos, no pueden, obviamente, vivir de su trabajo art¨ªstico. Se dedican adem¨¢s a otras faenas, agrarias o urbanas, y sus discos, por tanto, son ¨²nicamente distribuidos en las islas. Estos nombres que he mencionado son enormemente populares en su tierra, pero este hecho s¨®lo puede manifestarse de una manera ?espectacular? cuando, como en marzo del 75, se producen actos masivos del tipo de Festival Canarias 75, en el Teatro Guimer¨¢, de Tenerife.
Influencias
Como he venido diciendo, la canci¨®n canaria busca denodadamente una identidad que la singularice. As¨ª, la mayor¨ªa de los cantantes hacen uso de formas directamente populares, a las que dotan de nuevos contenidos y letras. Sin embargo, la falta de profesionalidad generalizada les lleva muchas veces a realizar trabajos casi mim¨¦ticos. Desde este punto de vista, la principal influencia tal vez sea la de la m¨²sica suramericana, en especial la chilena. Otros cantantes, como Juan Carlos Senante, se ven mucho m¨¢s influenciados por la Pen¨ªnsula, siendo est¨¦ el principal fallo de su ¨²nico disco, por lo dem¨¢s, bien construido.
Las letras tratan aspectos t¨ªpicamente canarios, de los m¨²ltiples problemas que all¨ª existen, y ello en un tono agrio, altamente did¨¢ctico o panfletario, seg¨²n la expresi¨®n que se prefiera. En ellas se incluyen muchas veces nombres y lugares guanches, que al oyente peninsular le suena a chino, pero cuya significaci¨®n resulta bien clara: la recuperaci¨®n de una etapa hist¨®rica negada.
Futuro
Como puede deducirse del anterior contexto, el futuro desenvolvimiento de la canci¨®n canaria, su proyecci¨®n m¨¢s all¨¢ de las islas, se encuentra indisolublemente ligado al desarrollo de la situaci¨®n pol¨ªtica y social en que se encuentra inmersa. La lejan¨ªa de las islas y sus especiales caracter¨ªsticas imponen una dispersi¨®n grande y un oscurecimiento de la perspectiva con que la podemos contemplar. Se?alar as¨ª futuras l¨ªneas' de acci¨®n, nombres que destacar, figuras, no pasar¨ªa de constituir un voluntarismo clasificatorio sin muchos visos de acercarse a la realidad. La ¨²nica actitud posible es la de esperar con los o¨ªdos bien abiertos, no dej¨¢ndonos enga?ar por deformaciones oportunistas y, en ocasiones, demasiado t¨ªpicas.
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