El poeta alem¨¢n oriental Reiner Kunze emigra a Occidente

A los tres d¨ªas de solicitar un visado para trasladarse a Occidente, el escritor germano oriental Reiner Kunze ha abandonado la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana con su familia. Kunze no militaba en ninguna organizaci¨®n pol¨ªtica, como era el caso del poeta y cantante Biermann, comunista, expulsado de la RDA a finales del pasado a?o. Sin embargo, algunas novelas escritas por Kunze y, sobre todo, sus poemas, que, seg¨²n propia interpretaci¨®n, reflejaban las con tradicciones entre la teor¨ªa pol¨ªtica y la pr¨¢ctica representada por los pol¨ªticos de la RDA, sufrieron medidas represivas por parte de la polic¨ªa oriental. Kunze, hijo de un minero, periodista, profesor en la universidad Karl Marx, de Leipzig, traductor del chino, trabajador ocasional en la agricultura y en una f¨¢brica de maquinaria pesada, fue perdiendo todos sus puestos laborales. S¨®lo en 1968 pareci¨® cambiar para ¨¦l la situaci¨®n al publicarse una antolog¨ªa po¨¦tica en laque aparec¨ªan algunos versos suyos.El traslado de Reiner Kunze a la RFA no ha sido forzoso, aunque ¨¦l mismo ha anticipado que explicar¨¢, una vez se reponga de una enfermedad, ?por qu¨¦ se vio obligado a abandonar su pa¨ªs?. Este escritor es el tercero que abandona la RDA desde mediados de noviembre ¨²ltimo, tras la expulsi¨®n de Biermann y el traslado a Occidente del tambi¨¦n escritor Thomas Brasch.

Mientras tanto un nuevo criterio se ha puesto en marcha dentro del Partido Socialista Unificado de Alemania Oriental. Las nuevas normas contra los delitos pol¨ªticos, aprobadas el 7 de abril por la C¨¢mara Popular de la RDA, entrar¨¢n en vigor el pr¨®ximo 5 de mayo. Tambi¨¦n Polonia parece dispuesta a reformar su normativa sobre delincuencia pol¨ªtica. El comit¨¦ central del PC polaco ha anunciado un ?nuevo curso ideol¨®gico? en lo relativo a ?delincuencia pol¨ªtica?. El jefe del partido, Edward Gierek, ha anunciado ante el VII pleno del comit¨¦ central que ?se emplear¨¢n todos los medios necesarios para desenmascarar a los detractores del Gobierno que pretenden debilitar los v¨ªnculos que unen a la naci¨®n con el socialismo?. Dado el alcance que ha logrado la postura cr¨ªtica de determinados ciudadanos en ambos pa¨ªses, hasta el punto de obligar a una reforma de las leyes vigentes -por lo que toca a la RDA, de 1968-, se da por seguro que se endurecer¨¢ la actuaci¨®n contra algunos disidentes, mientras que, en virtud de las nuevas normas, se abrir¨¢ una posibilidad a una cr¨ªtica ?constructiva? incluso desde sectores considerados como disidentes en los dos pa¨ªses citados.