Posible cadena perpetua para los miembros del grupo Baader-Meinhof
El proceso contra los tres dirigentes principales de la organizaci¨®n Baader-Meinhof ha concluido en un momento poco propicio para un enjuiciamiento sereno del fen¨®meno del terrorismo. Andreas Baader, Gudrun Ensslin y Carl Raspe pueden ser condenados, cada uno, a tres cadenas perpetuas, lo que equivaldr¨ªa a una permanencia en la c¨¢rcel para toda la vida, puesto que en la Rep¨²blica Federal Alemana no existe la pena de muerte.
A lo largo de 190 sesiones llenas de vicisitudes, el n¨²cleo terrorista alem¨¢n m¨¢s activo ha visto c¨®mo, por extra?as intervenciones desde el poder, se les retiraba un juez que reclam¨® mejores condiciones penitenciarias; se impon¨ªa un veto a determinados abogados defensores partidarios de ofrecer una visi¨®n m¨¢s amplia del fen¨®meno terrorista, y se presentaba, como el testigo principal a un antiguo militante del RAF (fracci¨®n del llamado ej¨¦rcito rojo), al que, seg¨²n los abogados, se hab¨ªa prometido la inmunidad.Las escuchas policiales y el asesinato del fiscal supremo, Buback, han terminado por convertir el ?proceso del siglo? en Alemania Federal en un cap¨ªtulo nada luminoso para el Estado. Se espera que el pr¨®ximo mes el tribunal de Stuttgart que sigue el caso dicte sentencia contra los tres acusados, para los que, como medida extraordinaria, se construy¨® una prisi¨®n especial con las m¨¢ximas medidas de seguridad.
El grupo Baader-Meinhof y los n¨²cleos constituidos despu¨¦s a imagen suya han provocado una grave crisis en la conciencia ciudadana. El asesinato del fiscal Buback, implicado tambi¨¦n en el, caso Baader-Meinhof, ha sido una ocasi¨®n propicia para que el Gobierno demuestre que tiene tanto inter¨¦s como la oposici¨®n democristiana en combatir. los brotes de terrorismo, presentados ahora como una verdadera ?conjura internacional? orientada a ?desencadenar una guerra civil en Alemania?.
Hoy, s¨¢bado, representantes de los tres partidos presentes en el Parlamento federal se manifestar¨¢n en el lugar del asesinato del fiscal, en Karlsruhe, para reafirmar sus deseos de ?libertad y de "libertad y democracia".
La sicosis terrorista ha movido a la opini¨®n p¨²blica alemana a cambiar de actitud respecto de la pena de muerte. El ¨²ltimo sondeo, realizado el mismo d¨ªa del funeral y el entierro del fiscal asesinado, arroj¨® un resultado claramente favorable a la restauraci¨®n de la pena capital, sin especificar ocasiones de aplicaci¨®n: el 45 % de los alemanes quiere el restablecimiento, mientras que un 37 la considera inadecuada y un 18 % no se ha decidido a¨²n. En 1973 era s¨®lo el 30 % de la poblaci¨®n la que quer¨ªa la pena de muerte como supremo medio vindicativo. El clima social ha llegado a tal grado de sicosis que la polic¨ªa elemana registraba ya, en las ¨²ltimas horas, m¨¢s de 2.000 indicios comunicados por.ciudadanos particulares sobre el posible paradero de los asesinos del fiscal Buback. Al tiempo, las fuerzas de Seguridad han manifestado que la detenci¨®n de los autores del atentado se presenta muy dif¨ªcil.
Informe en el Parlamento
Las previsiones de una crisis parlamentaria a prop¨®sito del terrorismo se confirman plenamente. La proxima semana el Gobierno presentar¨¢ un informe en el Bundestag, a requerimiento de la oposici¨®n, y en ¨¦l deber¨¢ decirse claramente si el equipo del canciller Schmidt estima que procede elaborar nuevas leyes antiterroristas o si considera, como hasta ue para erradicar este fen¨®meno bastan las actuales.Seg¨²n las ¨²ltimas estad¨ªsticas, hechas p¨²blicas el jueves pasado, desde que existe Alemania Federal se ha dictado sentencia contra 117 personas, acusadas de implicaci¨®n en actos violentos de intenci¨®n pol¨ªtica, en los que perecieron cinco particulares, cuatro polic¨ªas, cuatro representantes de la Administraci¨®n de Justicia y dos diplom¨¢ticos.
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