La emigraci¨®n espa?ola en Gan Breta?a la m¨¢s dura y desprotegida
Pero hay otros visitantes espa?oles en Londres. Exactamente, 75.000 o 76.000 compatriotas nuestros trabajan aqu¨ª en circunstancias m¨¢s desagradables que las de prepararse un t¨¦ y convivir con la se?ora de la casa, como hacen las au pair y mucho m¨¢s desagradables, desde luego, que las de servir en uno de los numerosos restaurantes baratos de la ciudad para luego gastar horas de la tarde en compras o en aventuras sentimentales con las abundantes visitantes femeninas del pa¨ªs.Estos compatriotas nuestros han vivido una emigraci¨®n, seguramente m¨¢s dura que ninguna de las padecidas por los trabajadores es pa?oles fuera de Espa?a. Dependientes casi en exclusiva de la protecci¨®n de las autoridades brit¨¢nicas y de los sindicatos brit¨¢nicos, ha sido necesario que pasasen muchos anos hasta que ellos mismos adquiriesen conciencia de su importancia y de su dificil situaci¨®n. As¨ª se fund¨® hace ya un a?o la Federaci¨®n de Asociaciones de Espa?oles Emigrados en el Reino Unido, FAEERU, una extra?a sigla no muy afortunada, que bien pudiera hacerse famosa en las pr¨®ximas semanas o en los pr¨®ximos meses Esta Federaci¨®n, que integra a los centros y grupos espa?oles m¨¢s importantes por lo menos de la ciudad de Londres (Centro Antonio Machado, el Hogar Espa?ol, el Centro Alvarez del Vayo, el Centro Gallego, etc¨¦tera) se organiz¨® con el casi patrocinio de la agregadur¨ªa laboral espa?ola en Londres, y de otras entidades. Pero a poco tiempo de su creaci¨®n, cuando las elecciones para elegir la junta directiva decidieron que tal junta directiva fuera realmente libre y ¨²til, los problemas comenzaron.
Desde por lo menos el mes de diciembre de 1976, la presidencia colegiada de FAEERU viene intentando conseguir una entrevista con el embajador de Espa?a. La consiguieron, desde luego, con el agregado laboral, en el mes de febrero, no sin haber pasado antes por un calvario tremendo. En esa conversaci¨®n con el agregado laboral los representantes de FAEERU hicieron saber cu¨¢les eran sus pretensiones de cara al futuro de la emigracion espa?ola en ese pa¨ªs. Y solicitaron, a trav¨¦s del c¨®nsul general, que el marqu¨¦s de Perinat, actual embajador de Espa?a en la corte de Saint James, les recibiese para poder intercambiar con ¨¦l ideas respecto a los problemas y las soluciones arbitradas por la propia Federaci¨®n.
Pero desde ese instante hasta ayer, fecha en que por fin tuvo lugar esa entrevista, todo han sido sospechas y malentendidos. En algunos peri¨®dicos espa?oles se calific¨® a la FAEERU de ?entidad dominada por los comunistas? e incluso se mencion¨® que la mayor parte de sus miembros pertenec¨ªan a grupos extremistas y extra?os como los FRAP, o los GRAPO, u otros de m¨¢s distinta calificaci¨®n. En realidad nada de eso es cierto, o por lo menos nada de eso es objetivamente cierto ni relacionado con la materia que importa en verdad. La junta directiva o presidencia colegiada de FAIZERU fue elegida libremente, y lo que no cabe la menor duda es que no puede esperarse de emigrantes espa?oles, que han sufrido durante muchos a?os, que sean todos ellos votantes de Alianza Popular.
FAEERU fue elegida libremente y libremente tambi¨¦n ha intentado plante ar ante el embajador de Espa?a sus problemas. Que son, por lo menos tres muy, importantes. Uno, el problema de la ense?anza de los hijos de emigrantes espa?oles en el Reino Unido. Por ahora existe en Inglaterra un colegio de la Fundaci¨®n Ca?ada Blanch en Londres y unos cuanto llam¨¦mosles subcolegios, que administra y trata de ordenar el Instituto Espa?ol de Emigraci¨®n, en los que de muy mala manera los hijos y las hijas de los trabajadores espa?oles tratan de completar los estudios que necesitan para continuar los grados iniciados en Espa?a, y, al mismo tiempo, disfrutar de un marco educacional en el que les sea posible hablar en su propio idioma.
Pero el panorama educacional es negativo en general y una iniciativa seria del Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia espa?ol se hace cada d¨ªa m¨¢s necesaria. Este tema, que ha sido uno de: los que se ha tratado ayer en la reuni¨®n celebrada con el se?or embajador, abruma no sola mente a los espa?oles, sino tambi¨¦n a otros grupos de emigrantes en el Reino Unido, fundamental mente italianos, griegos, y franceses, que lo han resuelto con el apoyo de sus respectivas autoridades diplom¨¢ticas y consulares, de una forma digna y decente, bastante diferente de la que hasta ahora se ha seguido para resolver el problema de los hijos de nuestros emigrantes.
El segundo problema es de car¨¢cter sindical laboral. FAEERU cree que ha llegado el momento de establecer un comit¨¦ sindica laboral que estudie detalladamente la situaci¨®n de los trabajadores espa?oles en el Reino Unido, tanto en lo que respecta a su documentaci¨®n como inmigrantes, como al que respecta al establecimiento d sus contratos con las empresas e las que trabajan. En teor¨ªa, es e Instituto Espa?ol de Emigraci¨®n e que se encarga de garantizar estas cosas, pero la emigraci¨®n espa?ola en Gran Breta?a ha sido num¨¦ricamente tan corta, que ni siquiera ha llegado a la situaci¨®n dram¨¢tica en que la actuaci¨®n del Instituto se hace inevitable e innecesaria.
El tercer tema planteado durante la conversaci¨®n mantenida por el embajador con los representantes de la emigraci¨®n espa?ola ha sido el de las elecciones generales, que habr¨¢n de celebrarse en nuestro pa¨ªs en el pr¨®ximo mes de junio. FAEERU se queja, a juicio del cronista con bastante raz¨®n, de que la informaci¨®n a los emigrantes ha sido deficiente en extremo. Es dif¨ªcil comparar la situaci¨®n normal de un madrile?o, un barcelon¨¦s o un valenciano, siempre dotado de una informaci¨®n masiva en tomo a las elecciones, que la de un ciudadano espa?ol en Londres, trabajando largas y abrumadoras jornadas, en un pa¨ªs extra?o, muy alejado casi siempre de los centros espa?oles en que esta informaci¨®n es m¨¢s f¨¢cil de obtener. Naturalmente, en estas condiciones era necesario un esfuerzo, por parte de nuestras autoridades consulares, muy distinto al que de hecho se ha llevado a efecto, para que todos y cada uno de los emigrantes espa?oles en este pa¨ªs, hubiesen tenido la oportunidad al menos de enterarse qu¨¦ es lo que ten¨ªan que hacer para censarse en sus lugares respectivos de residencia, en Espa?a, y para adquirir derecho al voto que cada ciudadano tiene seg¨²n la ley Electoral.
Los espa?oles se han quejado, entendemos que con honradez y buenas maneras en varias ocasiones, ante el embajador y las autoridades consulares de Londres. En la reuni¨®n de ayer se plante¨® el problema de nuevo e incluso tambi¨¦n algunas soluciones posibles. Cree saber este cronista que FAEERU ha remitido hoy mismo una carta al presidente del Gobierno espa?ol, Adolfo Su¨¢rez, explic¨¢ndole la situaci¨®n en que se encuentran los emigrantes espa?oles en Inglaterra respecto a las elecciones generales y solicitando del presidente del Gobierno una soluci¨®n de emergencia, que permita a la mayor¨ªa de ellos acceder a las urnas en las jornadas, sin duda hist¨®ricas, del mes de junio pr¨®ximo.
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