Los funcionarios de la prisi¨®n de Carabanchel amenazan con la huelga

Los funcionarios de la plantilla de la prisi¨®n de Carabanchel, iniciar¨¢n esta semana una huelga total, si las autoridades penitenciarias no resuelven la sanci¨®n impuesta a un compa?ero suyo, sanci¨®n que los funcionarios califican de injusta y desproporcionada.

Si la huelga se lleva a cabo, hecho que se considera falta muy grave en el reglamento de los funcionarios, ser¨ªa la primera vez que se adoptara este sistema de protesta en las prisiones espa?olas precisamente por el sector de vigilancia que, parad¨®gicamente, est¨¢ siendo la v¨ªctima de la opini¨®n: por un lado frente a los reclusos, y por otro, frente a las autoridades.El problema se remonta a los conflictos del pasado mes de febrero. Los funcionarios fueron autorizados a llevar pistola, ante las amenazas que hab¨ªan recibidio por parte de algunos reclusos. En ese estado de cosas, a uno de los funcionarios le fue robada el arma. Se propuso una sanci¨®n de cinco d¨ªas, y se le surgiri¨® que prestara recurso para que quedara en dos, y se considerara falta leve. Ahora, cuando se resuelve su apelaci¨®n, el funcionario se ve condenado a traslado con cambio de residencia. Esa sanci¨®n es considerada excesiva por sus compa?eros, que plantean la situaci¨®n l¨ªmite de ir a la huelga si no se obtiene un indulto especial. Se da la circunstancia de que la esposa del funcionario sancionado no puede salir de Madrid por estar enferma y, adem¨¢s, embarazada.

La evoluci¨®n

Los funcionarios de prisiones -seg¨²n, han declarado a EL PAIS- se encuentran absolutamente desamparados. Por un lado est¨¢n obligados a cumplir las ordenes sin la m¨¢s m¨ªnima cr¨ªtica -dos compa?eros que censuraron las ¨®rdenes han sido degados a funciones consideradas menores-, y por otro, no tienen la m¨¢s m¨ªnima protecci¨®n por parte de quien da las ¨®rdenes. Cuando comenzaron las peticiones de amnist¨ªa, comenzaron tambi¨¦n las amenazas a los funcionarios. Ante ello, se les recomend¨® llevaran pistola. Se ordenaron los cacheos, y aparecieron cantidad de pinchos. Entre los mismos reclusos comienzan tambi¨¦n los ataques con esos pinchos. ? Para 350 presos, multirreincidentes, s¨®lo hay tres funcionarios, y, seg¨²n los reglamentos, tienen que estar desarmados?. As¨ª se llega al conflicto de febrero, planteado por tres pe¨²ciones claras de los presos que los propios funcionarios apoyan: la amnist¨ªa, los talleres y el economato. La situaci¨®n de los talleres parece ser ca¨®tica. Los presos, con jornada laboral normal, ingresan por t¨¦rmino medio unas 2.000 pesetas. Se sienten, naturalmente. explotados. Por otra parte, en relaci¨®n al economato,se encue ntran con que los art¨ªculos resultan m¨¢s caros que en la calle. En ese conflicto , los funcionarios fueron obligados a actuar con esparadrapos, esposas y porras, como ya se ha dicho. Los internos denuncian a los funcionarios,y la Direcci¨®n General no quiere saber nada.

Copel: huelga de hambre

La Coordinadora de Presos en Lucha (COPEL), de Carabanchel, ha hecho un llamamiento en el que anuncia para ma?ana, d¨ªa 6, el comienzo de una huelga de hambre indefinida, como una etapa m¨¢s en su postura contra la situaci¨®n de las c¨¢rceles espa?oIas.En su comunicado, la COPEL asegura que continuar¨¢ con sus aceciones hasta alcanzar una amnist¨ªa general, como paso previo a la reforma democr¨¢tica del C¨®digo Penal; supresi¨®n de las jurisdicciones especiales; de la ley de Peligrosidad Social, salud p¨²blica, supresi¨®n del reciente reglamento de prisiones, y mayor apoyo y comprensi¨®n social para la situaci¨®n de los presos y sus familias.