Respuesta del arzobispo de Par¨ªs

?Ahora, es necesaria una clarificaci¨®n?, declar¨® ayer escuetamente el arzobispo de Par¨ªs, monse?or Marty, tras la ordenaci¨®n de catorce sacerdotes y veintid¨®s subdi¨¢conos, en Ec?ne (Suiza), por el ?papa? de los tradicionalistas de la Iglesia Cat¨®lica, monse?or Lef¨¦bvre.

El gesto del purpurado integrista se interpret¨® como un desaf¨ªo al papa, Pablo VI, y nadie imagina que este ¨²ltimo no responda de manera adecuada. El conflicto que opone a la iglesia paralela nacida ayer en Ec?ne, y al Vaticano, ?no se limita al problema de la misa en lat¨ªn. La rebeli¨®n de monse?or Lef¨¦bvre va mucho m¨¢s lejos y, en definitiva, pone en entredicho el funcionamiento de la Iglesia, definido por el Vaticano II?. Este argumento lo expon¨ªan ayer cat¨®licos y no cat¨®licos, tras las ordenaciones de por la ma?ana en el seminario tradicionalista. Por otra parte, se evocaban igualmente las implicaciones pol¨ªticas del movimiento dirigido por monse?or Lef¨¦bvre.

No pocos especialistas en materia religiosa ya hab¨ªan predicho hace algunos meses que, al final, el ?anti-papa? corr¨ªa el riesgo de convertirse en v¨ªctima de los movimientos de extrema derecha que, en todo momento, han intentado recuperar a los fieles nost¨¢lgicos del pasado que, de la noche a la ma?ana, se han encontrado con un l¨ªder pol¨ªtico-religioso que, no se sabe exactamente hasta qu¨¦ punto, ha llegado a lo ?irreparable?, cumpliendo sus previsiones o empujado por una din¨¢mica que han atizado sin cesar esos grupos pol¨ªticos de tendencia fascista.