En espera de medidas

En los ¨²ltimos a?os, pr¨®digos en sustituciones de Gobiernos, no se hab¨ªa registrado un ambiente tan apagado en la Bolsa como el que los inversores dedicaron al nuevo Gobierno que tom¨® las riendas del poder el pasado lunes. Con un ambiente retra¨ªdo, sin apenas operaciones y con p¨¦rdida en el ¨ªndice general de medio punto, el mercado de valores ha dado una recepci¨®n fr¨ªa a un Gobierno que se pretende de la reforma econ¨®mica.En medios burs¨¢tiles se destacaba el hecho de que m¨¢s que los nombres interesan las intenciones y unas medidas iniciales que demuestren la actitud, el mercado de valores no dar¨¢ ninguna respuesta.

De cualquier forma, es de destacar que la mano oficial no ha hecho acto de presencia en estas jornadas ni directamente ni a trav¨¦s de entidades amigas.

La semana comenz¨® con inter¨¦s por ver lo que pasaba el martes, pero luego la atenci¨®n fue decayendo para llegar el viernes a un ambiente de franca apat¨ªa y desinter¨¦s.

No podemos hablar de valores m¨¢s animados y otros m¨¢s tristes. Todo el mercado estaba a la expectativa. Para algunos la Bolsa va a entrar en una fase de profundas reformas que la, alejar¨¢n del mercado especulativo conocido en los ¨²ltimos a?os. Para otros, los proyectos fiscales del Gobierno incidir¨¢n enormemente en el inversor y en las empresas y por ello conviene estar a la expectativa de lo que pase.

La declaraci¨®n de intenciones hecha por el vicepresidente Fuentes Quintana en la noche del viernes constituye ya una piedra de toque que el mercado tendr¨¢ que valorar el martes, una vez que los peri¨®dicos hayamos desbrozado y analizado la primera declaraci¨®n del Gobierno. El Consejo del lunes, que, seg¨²n parece, se dedicar¨¢ b¨¢sicamente a nombramientos, ser¨¢ la otra piedra de toque para el mercado.

Hay que se?alar finalmente que en la Bolsa comienzan a considerarse con peso las expectativas econ¨®micas de las empresas que son poco halag¨¹e?as y justifican una parte de la ca¨ªda de los cambios.