Posible reconciliaci¨®n interna en la socialdemocracia alemana
Peter Oertzen, presidente de la Uni¨®n Socialdem¨®crIta en el land de Baja Sajonia, y miembro del presidium del Partido Socialdemocrata (SPD), ha dado un signo de moderaci¨®n, quiz¨¢ comienzo de una reconciliaci¨®n en su partido, despu¨¦s de la agitaci¨®n provocada por la exclusi¨®n del presidente de los jusos (organizacion juvenil del SPD), Benneter, y de la apertura de un procedimiento disciplinario, que puede conducir tanbi¨¦n a la expulsi¨®n de 56 militantes de Hamburgo que hab¨ªan expresado su solidaridad con Benneter. Por medio de un art¨ªculo publicado en el ¨®rgano del partido, el semanario Vorwaerts que apareci¨® el mi¨¦rcoles, Oertzen excluye expl¨ªcitamente actos de solidaridad y posiciones ideol¨®gicas divergentes del cat¨¢logo de razones disciplinarias.En el punto medio de la actual agitaci¨®n que conmueve a los socialdeni¨®cratas, se encuentran, como otras tantas veces, las relaciones con los comunistas. Tres uniones federales de la organizaci¨®n Juvenil son partidarias de posturas ideol¨®gicas deducidas de la teor¨ªa del capitalisnio nionopolista de Estado (stamokap, en el argot pol¨ªtico). Este art¨¢lisis de las sociedades occidentales es compartido por algunos partidos comunistas, en l¨ªneas generales, lo que explica la predisposici¨®n de Benneter y otros a llepar a coincidencias t¨¢cticas con los comunistas en Alemania Federal.
Incompatibilidad
Pero esto es absolutanlente inconipatible con uno de los principlos estrat¨¦gicos del SPD, formulado por ¨²ltinia vez en febrero de 1971 en forma de decisi¨®n del consejo del partido. Oertzen no debilita en su art¨ªculo esta decisi¨®n pero concede a los partidarios del stamokap, aunque considera el analisis faIso un sitio en el foro de la organizaci¨®n.Una coincidencia, que quiz¨¢ no lo es evidencia las serias dificultades que representa para la estrategia del Partido Socialdem¨®crata la posible convivencia pol¨ªtica con partidos comunistas en el marco europeo, como consecuencia de la presencia de ¨¦stos en el futuro Parlamento, o por su participaci¨®n gubernamental en los pa¨ªses del Mediterr¨¢neo.
El jueves la presidencia del SPD ha reeditado la mencionada decisi¨®n del a?o 1971, acompa?ada de un nuevo prefacio de Willy Brandt.
Esta resurrecci¨®n de un texto casi olvidado, repentinamente lanzado a la circulaci¨®n, ha concentrado la atenci¨®n sobre lo que el presidente del SPD pod¨ªa haber a?adido en los comentarios finales. Porque lo que se escribi¨® hace seis a?os pensado en la ostpolitik se lee ahora con los ojos dirigicios al Sur Para Brandt, la ?contradicci¨®n de principios? se ha transformado en ?concurrencia? en las relaciones con los partidos comunistas. Los cristianodem¨®cratas se han apresurado a preguntar qui¨¦n determina la pol¨ªtica de los socialdem¨®cratas, Willy Brandt o Egon Bahr, el ejecutor de las exclusiones del SPD.
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