Crisis en la Associaci¨® Catalana de la Dona
La crisis interna que aquejaba a la Associaci¨® Catalana de la Dona (ACD) trascendi¨® plenamente al cumplirse ayer su primer a?o de existencia. Su presidenta, Anna Mercader, manifest¨® a EL PAIS que ?no pod¨ªamos continuar permitiendo que el Partido del Trabajo de Espa?a (PTE) tuviese en sus manos la ACD?.La crisis se manifest¨® en ocasi¨®n de la ¨²ltima reuni¨®n de la comisi¨®n permanente, ¨®rgano formado hasta ahora por diez personas, de las cuales ocho eran militantes del PTE. Ante este control de hecho por el PTE de la ACD, Anna Mercader y Judith Ib¨¢?ez, ¨²nicas independientes de la comisi¨®n permanente, amenazaron con escindirse si no se permit¨ªa el ingreso en el m¨¢ximo organismo de la ACD de ocho feministas m¨¢s que no militaran en ning¨²n partido pol¨ªtico.
Despu¨¦s de intensas discusiones -de tono muy subido-, las militantes del PTE aceptaron el ingreso en la comisi¨®n permanente de la Associaci¨® de ocho feministas independientes, con lo cual ha desaparecido ya la preeminencia del PTE. Anna Mercader a?adi¨® que ?la crisis no ha terminado a¨²n. Es posible que algunas militantes del PTE, que permanecen en la comisi¨®n permanente, decidan abandonar la ACD?.
Inicialmente, la Associaci¨® Catalana de la Dona hab¨ªa sido una organizaci¨®n pluralista, en la qu¨¦ participaban feministas dem¨®crata-cristianas, como Rosa Griso, y numerosas, independientes, como Magda Oranich. El pasado mes de febrero muchas de estas feministas abandonaron la ACD, dando a conocer un comunicado conjunto por el que protestaban ante el control de hecho ejercido por el PTE. Ahora, Anna Mercader manifiesta desear vivamente que la ACD recobre su anterior car¨¢cter ?pluralista, democr¨¢tico y abierto a todas las tendencias democr¨¢ticas catalar¨ªas?.
La participaci¨®n de la ACD en las pasadas elecciones, en el seno de la coalici¨®n electoral Esquerra de Catalunya, increment¨® a¨²n m¨¢s el malestar interno, ante el papel determinante de las feministas del PTE a la hora de inclinarse hacia dicha coalici¨®n. Ahora, Anna Mercader, que fue candidata a diputada, en el cuarto lugar, por el distrito electoral de Barcelona, recuerda su participaci¨®n en las elecciones de forma ambigua: ?Fue positiva, pero si tuvi¨¦semos que volver a hacerlo no participar¨ªamos en aquella coalici¨®n.?
La ACD, que cuenta con m¨¢s de un millar de militantes, lo que la convierte en la primera organizaci¨®n feminista catalana, est¨¢ a¨²n pendiente de legalizaci¨®n. Inicialmente present¨® su documentaci¨®n acogi¨¦ndose a la ley de Asociaciones de 1964. Un inconveniente para su legalizaci¨®n es el hecho de que el ¨¢mbito de su actuaci¨®n sea estrictamente catal¨¢n, lo cual crea una confusi¨®n legal entre las competencias de los gobiernos civiles y las del actual. Ministerio del Interior.
Anna Mercader inforni¨® tambi¨¦n que la nueva comisi¨®n permanente debatir¨¢, el pr¨®ximo martes, la conveniencia de continuar o no en el seno de la Federaci¨®n de Organizaciones Feministas del Estado Espa?ol, en la que ingres¨® a instancias de las militantes del PTE. Mercader, autora del importante libro Feminisme avui (la versi¨®n castellana lleva por t¨ªtulo El despertar del feminismo en Espa?a), se mostr¨® contraria a la coordinaci¨®n con otras organizaciones feministas de ¨¢mbito espa?ol, inclin¨¢ndose en cambio por mantener estrechos contactos con todos los grupos feministas catalanes, los cuales, por cierto, tambi¨¦n est¨¢n atravesando una importante crisis.
La ACD formul¨® ayer, con ocasi¨®n de su primer aniversario de ilegalidad, un llamamiento a todos los partisos pol¨ªticos democr¨¢ticos para que obren en favor de su pronta legalizaci¨®n.
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