Deja de publicarse la revista "Teima"

A partir de esta semana no volver¨¢ a publicarse la revista Teima, semanario gallego de informaci¨®n general, que alcanz¨®, en su ¨²ltima edici¨®n, el n¨²mero 35 desde su aparici¨®n, el 15 de septiembre del a?o pasado. Dificultades econ¨®micas, derivadas fundamentalmente de la falta de publicidad, son la causa de la muerte de esta publicaci¨®n, que por primera vez se edit¨® ¨ªntegramente en gallego dentro de Galicia.Una nota oficial emitida por la empresa editora, la Sociedade Galega de Publicacions, SA informa de que es de esperar que esta suspensi¨®n pueda tener solamente car¨¢cter temporal y que no represente la definitiva desaparici¨®n de la revista. Por otra parte, esta suspensi¨®n habr¨¢ de ser refrendada por la junta general de accionistas, que se va a celebrar el d¨ªa 13, en Santiago.

No obstante, la impresi¨®n que se extiende ante este cierre de Teima es la de que puede significar, por lo menos, una larga desaparici¨®n. Desde su comienzo tuvo dificultades de publicidad y su l¨ªnea editorial fue combatida por sectores pol¨ªticos de la derecha y de la izquierda. Concretamente, una coalici¨®n nacionalista de izquierdas lleg¨® a emitir entre sus militantes la consigna de darse de baja en la suscripci¨®n. ?Lo que est¨¢ aqu¨ª en juego son las enormes dificultades que se encuentran hoy en Galicia para hacer realmente periodismo independiente?, declar¨® a EL PAIS el director de la revista, Anxel Vence.

Algunas fuerzas pol¨ªticas que hab¨ªan apoyado su aparici¨®n y que participaron en el capital de la empresa, como el Partido Socialista Galego, no ocultaron en los ¨²ltimos tiempos sus cr¨ªticas a la publicaci¨®n, muchos de cuyos accionistas no atendieron siquiera a los requerimientos de la empresa para desembolsar parte del capital suscrito. Accionistas independientes y otros de la Asamblea Popular Galega fueron quienes m¨¢s lucharon por la continuidad del semanario, que ahora se ve obligado a cerrar sus p¨¢ginas.

Con su desaparici¨®n, los cinco periodistas que constitu¨ªan la redacci¨®n y otros tres que trabajaban como colaboradores fijos, quedan sin sus puestos. Es la segunda revista gallega de informaci¨®n general que no consigue salir adelante en la d¨¦cada del setenta.