Juan Bautista Comes, en v¨ªas de recuperaci¨®n

Las estrellas de primera magnitud de la polifon¨ªa espa?ola del siglo XVI, Crist¨®bal de Morales, Tom¨¢s Luis de Victoria, Francisco Guerrero, han eclipsado a figuras de importancia trascendental para comprender todo su ulterior desarrollo. Esto ocurre con el compositor valenciano Juan Bautista Comes (1582-1643), cuya vida y obra ha sido estudiada con el m¨¢ximo rigor en el libro de Jos¨¦ Climent yJoaqu¨ªn Piedra Miralles, este ¨²ltimo recientemente fallecido. Mientras Joaqu¨ªn Piedra examinaba el archivo.del Colegio y Capilla del Corpus Christi o del Patriarca, el organista y music¨®logo valenciano Jos¨¦ Climent consultaba, en agotadora tarea, los de las catedrales de Valencia, L¨¦rida, Segorbe y el de la Biblioteca Nacional de Madrid, con el fin de tener un conocimiento completo del gran m¨²sico de Valencia, artista fundamental en la transici¨®n de la polifon¨ªa renacentista al m¨¢s rico mundo contrapunt¨ªstico del barroco.Si Vicente Ripoll¨¦s fue el primero en llamar la atenci¨®n hacia el villancico y la cantata dieciochesca en el Pa¨ªs Valenciano, tan rico en elementos plenaMente barrocos, a Climent (que, por cierto, est¨¢ trabajando a fondo sobre la obra para teclado de Vicente Rodr¨ªguez, 1685-1761), le toca la gloria de haber puesto en pie, con sus transcripciones, la compleja producci¨®n multicoral de Comes, quien en sus obras de hasta diecis¨¦is voces nos ha dejado el m¨¢s importante legado polif¨®nico de la primera mitad del siglo XVII en Espa?a.

Piedra y Climent han trabajado con materiales de primera mano, la mayor¨ªa in¨¦ditos, ya que Comes no sali¨® de Espa?a y, por tanto, no pudo ver publicadas sus obras en el extranjero como otros maestros espa?oles de aquel momento. Hasta 1888 no aparecen los dos vol¨²menes de Juan Bauti.sta Guzm¨¢n con obras de Comes, en las que apreciamos la perfecci¨®n de su t¨¦cnica contrapunt¨ªstica, comparable en cierto modo a Palestrina y Andrea Gabrieli.

Pero, advierte Climent, no debemos buscar la raz¨®n de ser de las innovaciones de Comes en el arte italiano, sino en el mismo ambiente ampuloso d.e la vida valenciana de su ¨¦poca. A ese momento brillante y espectacular de las artes pl¨¢sticas corresponde un formidable compositor que ya pide el bajo continuo, cierta independencia instrumental y posee una complicada estructura coral, claros anticipos del arte barroco. Ahora se dar¨¢ preponderancia a la m¨²sica sobre el texto, cosa que no ocurr¨ªa en la ¨¦poca precedente.

Juan Bautista Comes y su tiempo rectifica numerosos errores biogr¨¢ficos, algunos de tanta importancia como la fecha de nacimiento, que no es 1568, como crey¨® Guzm¨¢n, sino 1582, deducci¨®n l¨®gica y muy probable de acuerdo a otras fechas conocidas. Se sigue la vida y actividades del maestro valenciano con gran aportaci¨®n documental, entre la que merece destacarse una parte de su correspondencia particular. Muy valioso resulta el estudio de la ¨¦poca y de los compositores anteriores y contempor¨¢neos, tanto los de las diferentes capillas valencianas como los de la corte madrile?a. Esperemos ahora que las transcripciones de las obras de Comes, que anuncia el profesor Climent, vean pronto la luz.