La sufrida seleccion

M¨¢s vale prevenir que lamentar. Espa?a a¨²n puede clasificarse para el Campeonato del Mundo de f¨²tbol de Argentina, si consigue mejor resultado el d¨ªa 30 en Yugoslavia que Rumania en su terreno el pr¨®ximo domingo ante el mismo rival. Pero que ning¨²n federativo del f¨²tbol espa?ol se queje ni eche mano de malas suertes o similares si ello no se logra. Habr¨¢ sido merecido.No es posible que haya un solo pa¨ªs en el mundo, por muy ?tercermundista? que sea futbol¨ªsticamente hablando, peor preparado -que no se prepare, vamos- que Espa?a para su principal meta.Resulta lamentable, por ejemplo, que en la concentraci¨®n de compromiso finalizada ayer en Madrid ya hubiera ausentes lesionados. Es normal que los haya, porque en el f¨²tbol, deporte de choque, debe haber necesariamente !esiones. Pero lo indignante una vez m¨¢s, cuando se trata de preparar la sufrida selecci¨®n de Espa?a, es que ¨¦sta tenga que pagar siempre los intereses de los clubs. En efecto, los lesionados del pasado domingo y los que l¨®gicamente pueda haber el pr¨®ximo, se producir¨¢n porque ante una cita tan fundamental como la de Yugoslavia, la Federaci¨®n Espa?ola no ha tenido las suficientes agallas como para sustituir -es un ejemplo- dos jornadas m¨¢s de la Liga de clubs por dos partidos internacionales preparatorios de entidad.

La Federaci¨®n, formada por los clubs, ha preferido ahorrarse los tres millones o seis que costar¨ªan esos partidos ante enemigos incluso m¨¢s fuertes que los yugoslavos y que hubiesen servido perfectamente de preparaci¨®n. Ese no hubiese sido un dinero malgastado y se habr¨ªa justificado cualquier lesi¨®n. Pero no, se ha ?salvado? el momento con un partidillo in¨²til contra los sub-21, que se parecen tanto a Yugoslavia como un cordero a un lobo. Y, encima, ante la lesi¨®n de Juan?, la Federaci¨®n no tendr¨¢ ahora ni disculpa moral para ji,istificar el perjuicio ocasionado al Las Palmas. Los tiempos ,est¨¢n para jugar fuerte o, si no, para romper la baraja.