La energ¨ªa del viento

En el peri¨®dico del 3 de noviembre aparece una informaci¨®n con declaraciones de don Jos¨¦ V. Zapata, ingeniero promotor del sistema e¨®lico y bajo el t¨ªtulo Se intenta silenciar la obtenci¨®n de energ¨ªa a partir del viento, referente al Simposio Internacional sobre Fuentes de Energ¨ªa y Desarrollo, que tuvo lugar en la Universidad Polit¨¦cnica de Barcelona, del 19 al 21 de octubre pasado. Dado que en la misma se me alude directamente, espero publicar¨¢n ustedes esta correcci¨®n.En primer lugar, me llama la atenci¨®n que el se?or Zapata base sus comentarios sobre el simposio en un programa de televisi¨®n posterior y no en el propio desarrollo del mismo. Deseo aclarar a este respecto que tuvimos, efectivamente, contactos telef¨®nicos con los se?ores Arreo y Muntan¨¦ y qu¨¦ en ellos invitamos a su grupo a asistir al simposio con el coste de la inscripci¨®n a nuestro cargo y con la consiguiente oportunidad de llamar la atenci¨®n a su sistema e¨®lico en el curso de los coloquios. Si alguno de ellos se hubiera tomado la molestia de asistir, hubiera visto c¨®mo en el tablero de avisos anunci¨¢bamos las cinco comunicaciones que se hab¨ªan recibido fuera de programa, entre las cuales figuraba la suya. Dichas comunicaciones, multicopiadas por nuestra secretar¨ªa, eran facilitadas a quienes las solicitaban, en sus versiones castellana e inglesa. Su difusi¨®n se ajust¨® as¨ª escrupulosamente a lo convenido, habida cuenta de lo tard¨ªo de su presentaci¨®n, lo que no prejuzga cu¨¢l habr¨ªa podido ser la decisi¨®n de nuestro Comit¨¦ Cient¨ªfico Asesor en el caso de que se hubiera sometido a tiempo para su consideraci¨®n como posible ponencia. Los periodistas de EL PAIS, que s¨ª asistieron a todo el simposio e informaron sobre el mismo de forma ejemplar, pueden atestiguar de lo que aqu¨ª se dice.

En segundo lugar, y puramente a fines de correcci¨®n informativa, quiero hacer constar que de las treinta conferencias dictadas en el simposio, cuatro solamente se refirieron a energ¨ªa nuclear, contra quince dedicadas a energ¨ªas alternativas, entre las cuales la e¨®lica (las restantes fueron dedicadas a energ¨ªas convencionales y temas generales). Dada esta proporci¨®n y la absoluta libertad de discusi¨®n en los coloquios, mal puede hablarse de una predisposici¨®n en favor de las centrales nucleares.

Por fin, y ya refiri¨¦ndome concretamente al programa televisivo de La Clave, sobre la energia nuclear, que parece s¨ª vio el se?or Zapata, no puedo aceptar los procesos por omisi¨®n de todos los temas que no cubr¨ª en los pocos minutos de que dispuse. Ninguno de los otros siete participantes en el programa se refiri¨® tampoco al mismo, pese a que la mayor parte de ellos eran t¨¦cnicos en energ¨ªa.