El "bunker" deportivo cierra filas
La Asamblea General ha llegado a la conclusi¨®n de que los hombres del deporte deben ser justos y ben¨¦ficos. En lo mismo se pusieron de acuerdo los de la Constituci¨®n de C¨¢diz, pero r¨¢pidamente surgi¨® el ?vivan las caenas? que tir¨® por los suelos toda la buena voluntad de los amantes de la libertad. M¨¢s o menos le va a pasar a la asamblea deportiva porque, adem¨¢s de los que tienen motivos para discrepar, de pronto, han surgido contestatarios de derechas que piden que nada cambie para que todo contin¨²e igual; o sea, con sus prebendas. Lo que m¨¢s ha dolido a los de siempre es que se les haya dicho que est¨¢n al margen de la ley. Menos mal que el Madrid nos ha salido este a?o dem¨®crata y s¨®lo pierde en los campos de los modestos.
Antes de 1975 hab¨ªa muy poca gente que estuviera contra la estructura y funcionamiento de la Delegaci¨®n Nacional de Educaci¨®n F¨ªsica y Deportes. Ahora han surgido m¨¢s contradictores, pero esta nueva hornada se queja porque ve que el tema se le escapa de las manos. Empieza a escocer la posibilidad de que haya renovaci¨®n.El bunker deportivo cierra filas. Hasta tal extremo que alguno de sus miembros se atreve a preguntarle al senador, Jos¨¦ Alonso, por su representatividad. Jos¨¦ Alonso, para empezar, fue atleta destacado en sus a?os mozos, le vot¨® medio mill¨®n de madrile?os el pasado junio y es padre de un atleta internacional expulsado de la Residencia Blume. La expulsi¨®n de Alonso jr. no tuvo m¨¢s motivo que la rojez de su padre.
La representatividad y los galardones de algunos son m¨¢s que discutibles. El d¨ªa de la apertura de la asamblea recibi¨® un trofeo, proviniente por cierto de entes verticalistas, la empresa Pegaso. Curiosamente Juan Borraz, atleta internacional, medalla de plata en los europeos de pista cubierta, era delineante en la citada empresa. Juan Borraz, atleta con porvenir, abandon¨® aburrido la pr¨¢ctica del deporte de alta competici¨®n porque no encontr¨® apoyo en su medio laboral.
El deporte espa?ol, adem¨¢s de una cura de humildad, necesita una adecuaci¨®n a los tiempos modernos. Hay que acostumbrarse a ganar y perder elecciones. Hay algunos que, aun siendo vencedores no saben hacer honor a la confianza depositada en ellos. Los hay que, tras haber sido derrotados, quieren recuperar terreno a base desalidas de pata de banco.
El pa¨ªs necesita calma para celebrar las navidades sin sobresaltos, pero al tiempo requiere motivaciones que le distraigan. Aqu¨ª es donde el Madrid le acaba de echar una mano al presidente Su¨¢rez. El Madrid practica esta temporada la pol¨ªtica de la democracia y con ello le da inter¨¦s a la Liga. Si el domingo las huestes de Bernab¨¦u hubiesen ganado en C¨¢diz, a estas alturas el campeonato hubiera estado algo m¨¢s que definido. Con esta derrota ha hecho posible que los gaditanos aumenten sus esperanzas de salvaci¨®n del descenso y ha conseguido ponerle al Barcelona un gota a gota que le ayude a intentar salir adelante.
El Madrid ¨²nicamente ha perdido tres encuentros y los tres ante conjuntos modestos: Salamanca, Rayo y C¨¢diz. Claro que de la modestia salmantina hay que comenzar a dudar porque, con un equipo hecho a base de recortes del Bar?a, anda con los mismos positivos que los del Camp Nou.
El Madrid con su derrota le ha dado nuevas alegr¨ªas al torneo. Ahora, para distraer al personal catal¨¢n, tenemos a la vista las elecciones presidenciales para suceder a Montal que se despidi¨® el domingo del palco. En el Barcelona s¨ª votan las mujeres. En este club no hay machismo. Lo aclaro para que no se interprete que he llamado machistas, en la asamblea del deporte, a todos los clubs. El Barcelona tiene socias y, puesto que ahora hay sufragio universal, entiendo que los candidatos tendr¨¢n que cuidar mucho esta parcela votante.
La lucha entre los candidatos a la presidencia del Barcelona va a dejar chiquitas las tensiones por lo de la Generalitat de Tarradellas. El candidato que arranca mejor, situado es Raim¨®n Carrasco; es hijo de Carrasco Formiguera, es el hombre de Jordi Pujol y est¨¢ en la actual directiva, que es tanto como decir que le benefician los resortes del poder establecido.
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