Manuel D¨ªez-Alegr¨ªa: "Nunca he tenido un puesto clave en la historia de Espa?a"
?Yo nunca he tenido un puesto clave en la reciente historia de Espa?a. Si lo hubiera tenido, posiblemente hubieran salido las cosas de otro modo?, nos dijo ayer desde su casa de El Cairo el nuevo acad¨¦mico de la Lengua, el embajador de Espa?a en Egipto, teniente general Manuel D¨ªez-Alegr¨ªa. ?Mi gran esperanza en este momento -se?al¨® tambi¨¦n el autor de Ej¨¦rcito y sociedad- es que en mi pa¨ªs se siga. desarrollando la vida p¨²blica lo mejor posible. Y ruego a Dios no tener que tomar parte en esa vida p¨²blica en ning¨²n momento en el futuro.? El sucesor de Jos¨¦ Mar¨ªa de Coss¨ªo en la Real Academia de la Lengua dijo, asimismo, que sigue siendo un soldado, ?cuyo cometido es servir y obedecer?.
?El nombramiento que ha reca¨ªdo en m¨ª ha supuesto un deslumbramiento. Jam¨¢s me pude imaginar, ni en mis instantes de mayor ambici¨®n, que yo pudiera llegar a formar parte de una de las instituciones m¨¢s admirables de Espa?a.? Como acad¨¦mico, Manuel D¨ªez-Alegr¨ªa espera aportar sus conocimientos en el plano militar para agilizar y poner al d¨ªa un lenguaje que ha sido revolucionado en los ¨²ltimos tiempos. ?Desde la ¨¦poca de la segunda guerra mundial, y sobre todo a ra¨ªz del descubrimiento del armamento nuclear, nos hemos estado alimentando del vocabulario militar ingl¨¦s. Creo que ese lenguaje deb¨ªamos adaptarlo al castellano. A nivel general, en cuanto a los cambios de lenguaje, yo me definir¨ªa m¨¢s bien como evolucionista que como revolucionario. ?Con respecto al cambio pol¨ªtico y social operado en Espa?a en los ¨²ltimos dos a?os, ?casi no me atrevo a hablar. Hab¨ªa empezado ya cuando me vine a Egipto como embajador. A estas distancias y con tan malas comunicaciones, me cuesta mucho trabajo decir nada. Cuando vuelva a Espa?a tendr¨¦ que darme un ba?o de seis meses para poder expresarme sobre la situaci¨®n. Mientras tanto, seguir¨¦ callado?. El teniente general D¨ªez Alegr¨ªa no quiere decir que vaya, en efecto, a volver a Espa?a, ?lo que le he dicho es s¨®lo una hip¨®tesis. Antes de ser embajador en Egipto, Manuel D¨ªez Alegr¨ªa figur¨® en listas de posibles jefes de Gobierno y apareci¨® como la pieza clave del per¨ªodo que hubo entre la muerte de Franco y la toma de posesi¨®n del rey don Juan Carlos como titular de la Corona. Pero en el terreno que le es propio, donde m¨¢s hab¨ªa destacado era en el del planteamiento de una reforma a fondo de la instituci¨®n militar. ?Ahora lo ¨²nico que puedo decir es que me reafirmo en lo que siempre he dicho: creo que habr¨ªa que buscar una mayor eficacia y una mayor compenetraci¨®n del Ej¨¦rcito con el pueblo.?
?Por otra parte -nos dice el nuevo acad¨¦mico-, yo nunca he tenido un puesto clave en la historia de Espa?a. Si lo hubiera tenido, posiblemente hubieran salido las cosas de otro modo. Yo ¨²nicamente he tenido el anhelo de llegar a alcanzar cosas que contribuyan al servicio que deseo prestarle a mi Patria. Entre las pocas cosas que he conseguido est¨¢ este nombramiento de acad¨¦mico que me acaba de llegar.?
Desde su puesto de diplom¨¢tico, el teniente general D¨ªez-Alegr¨ªa ha tenido ocasi¨®n de reflexionar sobre la definici¨®n actual del militar. ?El militar sigue manteniendo propiedades-que le son inherentes, que no cambian y que necesariamente forman parte de su columna vertebral. Ahora bien, como hace poca gimnasia intelectual, se muestra reacio a los cambios.? Personalmente, el nuevo acad¨¦mico considera que ¨¦l es ?un hombre consciente de que sabe muy poco; estoy deseoso de saberlo todo y no me preocupo demasiado de m¨ª mismo?. El nombramiento ha servido ?para que crea que no soy completamente analfabeto?. De su Patria, finalmente, ?espero verla m¨¢s de cerca muy pronto?.
En cuanto a sus antecesores militares en la Academia, Manuel D¨ªez-Alegr¨ªa destaca al duque de la Torre, ?que realiz¨® una obra envidiable?. El primer trabajo acad¨¦mico del embajador espa?ol en El Cairo podr¨ªa ser un amplio estudio sobre el final del siglo XIX espa?ol, ?que tiene resonancias muy actuales?.
Ante las definiciones que se hacen de ¨¦l como militar y como protagonista de algunos acontecimientos pol¨ªticos recientes, Manuel D¨ªez-Alegr¨ªa rectifica: ?Soy callado, en efecto; de lo que no estoy tan seguro es de haber sido eficaz. Ya soy un retirado sin apetencias de aparecer en la vida p¨²blica.
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