Ayer comenzaron los cursos del Col.legi de Filosof¨ªa de Barcelona
Reunidos a fines de 1976 Jordi Lovet, Xavier Rubert de Vent¨®s, Eugenio Tr¨ªas y quien esto escribe, decidimos construir una instituci¨®n que significara un espacio para la reflexi¨®n filos¨®fica. Este lugar, a diferencia de los ya instituidos, debe ofrecer un terreno no urbanizado en el que instalar pr¨¢cticas filos¨®ficas de diverso orden, estilo, intenci¨®n o pol¨ªtica y realizarlas en p¨²blico. Sin presupuestos estrictos, lo ¨²nico que nos proponemos es dialogar en el lenguaje m¨¢s ampliamente entendido como filos¨®fico.
En el prop¨®sito de definirla de una vez, dimos al curso primero, que tuvo lugar en el primer trimestre de 1977, el objeto de mostrar lo que significaba para nosotros la filosof¨ªa.Ocupando el amable ¨¢mbito que nos ofrece la escuela de dise?o Eina, empez¨® a rodarse la expresi¨®n plural que nos hab¨ªa reunido. Las lecciones, que aparecer¨¢n pr¨®ximamente en un volumen de Tusquets Editores, tuvieron los t¨ªtulos siguientes: Toni Vicens, El concepte de sistema; Eugenio Tr¨ªas, La filosof¨ªa y el poder; X. Rubert de Vent¨®s, Filosof¨ªa i designaci¨®; Jordi Llovet, Els l¨ªmits literaris de la filosof¨ªa. Adem¨¢s de ello, recibimos las visitas de los profesores Jos¨¦ Luis L. Aranguren, Pep Calsamiglia y Francois Ch¨¢telet.
Curso anterior
Eugenio Tr¨ªas efectu¨® una puesta en cuesti¨®n de las coordenadas nietzscheanas del ver, hacer y padecer y una reivindicaci¨®n, despu¨¦s de un rodeo cr¨ªtico por el cristianismo, de la posici¨®n del que padece, esto es, del que accede por el padecimiento a la pasi¨®n. La filosof¨ªa ser¨ªa as¨ª una confluencia de lo pasional amoroso y lo pasivo que hace que lo pasivo quede transmutado -como la pasividad de los m¨¢rtires pod¨ªa acabar con los verdugos- en poder, hacer o crear.Para Xavier Rubert, la filosof¨ªa era una estrategia del yo para deshacerse de un mundo que aparece siempre e indefectiblemente codificado, que si bien produce sensaciones, las acompa?a de su modo de empleo. El yo necesita de un discurso no sistematizado que le revele, no su esencia, sino su desajuste, no lo que hipot¨¦ticamente tiene de original, sino lo que de singular tiene la confluencia de coordenadas universales que lo constituyen. La filosof¨ªa ofrece como respuesta la posibilidad de lecturas cruzadas del desajuste objetivo que constituye, seg¨²n Kierkegaard, al hombre.
Jordi Llovet se mostr¨® quiz¨¢ m¨¢s arisco con el pensamiento filos¨®fico. Empez¨® investigando magistralmente el nacimiento de lo que ¨¦l llam¨® la neurosis plat¨®nica. Partiendo de un an¨¢lisis de la escritura de Plat¨®n, nos situ¨® en el coraz¨®n del problema cuando se refiri¨® al mito de la caverna: los salidos de ella quedan confundidos, no ante la presencia de lo real, sino por la relaci¨®n que se les pide entre lo real y lo simb¨®lico. El hilo del lenguaje que situar¨ªa el abismo entre lo real y lo imaginario es escamoteado y las ideas aparecen reales. Esta neurosis es profesional entre los fil¨®sofos y su cotejo con los discursos que bordean al filos¨®fico (Ram¨®n Llull, Novalis, Mallarm¨¦) as¨ª lo mostr¨®.
Por mi parte, supuse a los repetidos actos inaugurales de la filosof¨ªa una voluntad de sistema. La imposibilidad de la completud de tal operaci¨®n es un ingrediente que la filosof¨ªa puede afirmar: esta imposibilidad negativa se traduce en seguida en una nueva posibilidad de afirmar y, con ello, de sistematizar. Es inevitable la remisi¨®n a un punto cero de olvido absoluto, a un lugar de juego esencial, sin tiempo, es decir, sin intempestivo, sin discurso, que s¨®lo la filosof¨ªa podr¨ªa bordear.
Las actividades por el momento programadas para este a?o son las siguientes: ayer, jueves, una sesi¨®n de presentaci¨®n y los cursos siguientes: Jordi Llovet, Nostalgia de la lletra: Ram¨®n Llull, X. Rubert de Vent¨®s, Amor i psique, Eugenio Tr¨ªas, Raz¨®n de amor; Toni Vicens, Desigualtat (Rousseau, dos-cents anys despr¨¦s). A lo que hay que a?adir el de Jacobo Mu?oz, La crisis del marxismo y dos conferencias de los profesores Emilio Lled¨® y Jean Baudrillard.
Contenido de las lecciones
El contenido de las lecciones ser¨¢, aproximadamente, el que sigue:Eugenio Tr¨ªas partir¨¢ del mito de Trist¨¢n y de los caballeros andantes, de la l¨ªrica trovadoresca y de la filosof¨ªa c¨¢tara, para pasar a una reflexi¨®n sobre el comportamiento amoroso en Occidente y sus vinculaciones con la muerte y la violencia (v¨¦ase Denis de Rougemont, L'Amour et l'occident). Es el caso que hay una general carencia de reflexi¨®n filos¨®fica sobre el tema, que en los mejores casos deriva a una doctrina de las pasiones o a una idea m¨¢s o menos, cristiana del amor como ¨¢gape. En contrapartida, es objeto privilegiado de la l¨ªrica, la novela, la ¨®pera.
Conocimiento de lo singular
Xavier Rubert de Vent¨®s continuar¨¢ con el problema del conocimiento de lo singular entendido como deseo de algo. En lugar de ello, los sistemas han tenido como oponente al deseo en general, ya sea el deseo de conocer, o de poseer, o de gozar. Del mismo modo que la historia de Eros y Psique muestra c¨®mo el amor personal de Psique fue arrancado a Afrodita y no concedido por ella, los sistemas conceden el amor, pero dif¨ªcilmente el enamoramiento de lo singular.Jordi Llovet centrar¨¢ su trabajo en torno de Ram¨®n Llull, en quien se manifiesta una nostalgia de la escritura, una persistencia de la pasi¨®n por la letra pura, por la literatura. Aun considerando la importancia de Llull, como fil¨®sofo, pedagogo o propagandista, lucir¨¢ lo que tiene de literato.
Mis propias lecciones tendr¨¢n como objeto la obra de Rousseau y girar¨¢n en torno de la noci¨®n de desigualdad. Ser¨¢n un intento de circular entre los dos extremos de la vida de Rousseau: la soledad y la sociedad. El propio fracaso de su tentativa de vivir entre los hombres es una primera nota que nos puede conducir a su sociedad armonizada.
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