Algunos sectores alemanes dudan de la efectividad de la bomba

El ministro de Asuntos Exteriores de la Rep¨²blica Federal de Alemania, Hans Dietrich Genscher, regres¨® ayer anticipadamente de Washington y coment¨® que Estados Unidos no tiene formado a¨²n un criterio decisivo sobre si se introducir¨¢ la bomba de neutrones en Europa occidental. Seg¨²n otras versiones, la Administraci¨®n Carter hace depender la producci¨®n de este arma a la aceptaci¨®n por la RFA si se dan por v¨¢lidas las declaraciones del experto en materia de defensa del Partido Socialdem¨®crata, Moellemann, al diario Bild Zeitung.Seg¨²n Moellemann, Genscher hab¨ªa presentado en Washington la aceptaci¨®n por la RFA de la nueva arma, pero algo debi¨® de fallar en los canales de la comunicaci¨®n germano-norteamericana y el viaje de Genscher qued¨® en cap¨ªtulo poco airoso para la diplomacia alemana. Esto ha significado una dura cr¨ªtica del Partido Socialdem¨®crata a su especialista Moellemann, por anticipar situaciones.

En el seno del ej¨¦rcito alem¨¢n tambi¨¦n se han alzado voces discordantes. El general Christian Krause dice en. un art¨ªculo que public¨® ayer en el peri¨®dico del SPD, Vorwaerts, que cabe dudar de la efectividad de la bomba de neutrones como instrumento disuasorio o como ?arma prodigiosa con la que quedar¨ªa resuelto de una vez por todas el problema de la seguridad europea?.

La raz¨®n del general para no introducir este arma en los efectivos de la OTAN es que el organismo defensivo occidental no se encuentra en guerra contra la URSS y, por tanto, no existe la urgencia de ?ganar la pr¨®xima batalla entre carros de combate?. ?Nuestro objetivo es -dice Krause- el de eludirnos de la propaganda artificiosa que busca convencer al mundo de que el Este es superior en efectivos militares a Occidente. Nuestro adelanto respecto de la Uni¨®n Sovi¨¦tica cabr¨ªa cifrarse- en diez a?os.?

Desde el punto de vista t¨¢ctico, el general ve un inconveniente en la introducci¨®n y efectividad de la bomba neutr¨®nica: al no destruir ni edificios ni fortificaciones, no impedir¨ªa el cruce de formaciones blindadas ni la consistencia de un bunker. Incluso quedar¨ªan intactos en un ataque con este arma pasadizos fortificados que el enemigo podr¨ªa trazar en un plan de invasi¨®n.

Por su parte, la revista Imagen de la Ciencia coment¨®, en su n¨²mero de abril, que otro de los inconvenientes de este arma es su enorme costo, unos 750.000 d¨®lares por unidad, factor ¨¦ste que sin duda ha movido a los norteamericanos a considerar la rentabilidad de su comercializaci¨®n con car¨¢cter de obligatoriedad para sus aliados europeos. Por este precio se podr¨ªan adquirir cincuenta granadas antitanques de tipo convencional o 5.500 proyectiles de artiller¨ªa pesada contra carros.