Herido de seis disparos un dirigente patronal milan¨¦s
Felipe Schiavetti, presidente de los industriales de G¨¦nova, result¨® herido ayer a la salida de su domicilio por seis disparos realizados por unos desconocidos que posteriormente reivindicaron el atentado para las Brigadas Rojas. Por otra parte, la lluvia, constante pero no muy fuerte, ca¨ªda durante la tarde de ayer en Roma, ha bastado para acabar con la manifestaci¨®n de protesta de la joven izquierda extraparlamentaria que se anunciaba de extrema violencia.
, ENVIADO ESPECIAL
Una asamblea celebrada ayer por la ma?ana en la facultad de Letras romana hab¨ªa decidido llevar a cabo este acto de protesta, pese a la prohibici¨®n de las autoridades pero con una variante: no ser¨ªa una manifestaci¨®n propiamente dicha sino peque?as y r¨¢pidas acciones de guerrilla urbana a desarrollar en distintos puntos de la ciudad. Ni lo uno ni lo otro se ha producido. Queda en pie, no obstante, un mitin convocado Fiara ma?ana domingo en un cine por el ala m¨¢s moderada de la contestaci¨®n juvenil.Por otra parte, un comando de las Brigadas Rojas hiri¨® ayer por la ma?ana, cuando sal¨ªa de su casa, al presidente de los industriales de G¨¦nova, ingeniero Felipe Schiavetti. Los agresores, al parecer dos j¨®venes de veintitantos a?os, dispararon por la espalda y a los pies del se?or Schiavetti seis o siete golpes de pistola con silenciador. Luego, seg¨²n testigos del hecho, escaparon del lugar a pie. Minutos despu¨¦s, una voz masculina anunciaba al peri¨®dico genov¨¦s Corriere Mercantile que un comando de las Brigadas Rojas hab¨ªa atacado al presidente de los industriales, al que calific¨® de ?siervo del Estado?.
La jornada en Roma, que se esperaba de violencia, ha estado marcada en cambio por dos llamamientos contra el terrorismo. El primero de la Conferencia Episcopal italiana, en la que se condena el secuestro de Aldo Moro y el asesinato de los cinco hombres de su escolta. El comunicado episcopal se?ala como uno de los males de la sociedad italiana el concepto individualista y abstracto de la libertad y aprovecha la ocasi¨®n (en estos momentos el Parlamento discute la ley sobre el divorcio) para declararse en contra de disolubilidad del matrimonio.
El segundo mensaje contra el terrorismo procede de los hombres de la resistencia, es decir, los hombres que hicieron posible la Italia democr¨¢tica de hoy. A la cabeza de las sesenta personas que suscriben el documento figura Luigi Longo, presidente del Partido Comunista. ?El terrorismo, la violencia, que han truncado tantas vidas humanas, la vil coacci¨®n del secuestro del que es v¨ªctima Aldo Moro -di ce este segundo mensaje-, son la negaci¨®n de todo aquello que ha sido el esp¨ªritu de la resistencia y del antifascisino militante.? Y concluye con estas palabras: ?No cabe plegarse al desafio de las bandas criminales manchadas ya de tanta sangre.?
Por su parte, el diario La Rep¨²blica dio cuenta ayer de una ?agitada? reuni¨®n del secretario de la Democracia Cristiana, Benigno Zacagnini, con los familiares de Moro, cuando el pol¨ªtico lleg¨® a casa de ¨¦stos a referir que la Democracia Cristiana se hab¨ªa pronunciado sin vacilaciones por el rechazo de negociaciones.
Eleonora Moro, acompa?ada por sus cuatro hijos (un joven de veinte a?os y tres mujeres de entre veinticuatro y treinta a?os), la ment¨® tal decisi¨®n.
Carta de la esposa de Moro
Eleonora Moro, esposa del presidente de la Democracia Cristiana italiana, Aldo Moro, secuestrado por las Brigadas Rojas el 16 de marzo, tiene confianza en volver a abrazar a su marido.As¨ª lo expresa en una Carta que ayer public¨® el diario milan¨¦s Il Giorno, de centro-izquierda, y cuyo texto alude a que sus familiares ?queremos, adem¨¢s, que sepa que estamos junto a ¨¦l, que vivimos con ¨¦l, momento a momento, las horas de estos largu¨ªsimos d¨ªas, que rezamos por ¨¦l, que teniendo, a pesar de todo, fe en los hombres, creemos que es todav¨ªa posible despu¨¦s de tanto dolor, volver a abrazarle, con viva gratitud?.
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