Los robos de obras de arte, amenaza constante para los museos

El robo de Las tres gracias de Rubens y de otros nueve cuadros, es el primero que se comete en el palacio Pitti y uno de los m¨¢s sensacionales entre la plaga de sustracciones y atentados que se est¨¢n registrando en Italia contra obras de arte p¨²blicas y privadas en los ¨²ltimos tiempos. Los ladrones usaron una escalera para alcanzar el tejado del palacio desde otro edificio contiguo, y del tejado, con otra escalera de cuerda, se descolgaron hasta la galer¨ªa en la que se encontraban los cuadros.Esta operaci¨®n inicial externa de los ladrones no pudo ser descubierta debido a que los sistemas exteriores de seguridad del palacio Pitti, verdadera fortaleza medieval, aparentemente inexpugnable, se hallan todav¨ªa en fase de instalaci¨®n. Cuando los ladrones accedieron al interior del palacio, los guardias se encontraban cumpliendo con su servicio de vigilancia, ?pero no pod¨ªan atender a todas las galer¨ªas a la vez? -explic¨® la polic¨ªa italiana-. Por eso los ladrones tuvieron que esperar dos o tres horas entre las inspecciones de la galer¨ªa. Los ladrones estaban perfectamente informados de las circunstancias y llevaban las operaciones perfectamente cronometradas.

Los ladrones respetaron varias pinturas de Rafael y otras de Tiziano, que se exhib¨ªan en salas adyacentes. Parece que llevaban la intenci¨®n de arrancar ¨²nicamente las obras que se mostraban en el llamado Corredor de la Columna, de la Galer¨ªa Platina.

La obra de Rubens, adquirida entre 1650 y 1660, por el cardenal Leopoldo de Medici, es la m¨¢s valiosa entre las pinturas robadas (dos son de Cornelis van Poelenburg, dos de Paul Bril, dos de Gaspare Vanviteli y una de Pier Molyn El Viejo). Las tres gracias fue asegurada el a?o pasado, a?o dedicado a Rubens por celebrarse el cuatrocientos aniversario de su nacimiento, en cerca de treinta millones de pesetas, con motivo de una exposici¨®n en Amberes (B¨¦lgica). ?Su valor, por supuesto -asegura el superintendente de arte de Florencia-, es mucho mayor que el de su seguro.?

Seg¨²n opiniones recabadas por EL PA?S a algunos expertos en el mundo del arte, no es extra?o en principio, que se produzcan tantos robos de arte en Italia, dada la cantidad de obras que existen en esta naci¨®n. Y todav¨ªa es menos extra?o que este pillaje suceda en Florencia, ciudad monumento, en la que existen no menos de cincuenta centros considerados a todos los efectos como museos.

?Naturalidad?

Los sistemas de seguridad de los museos, seg¨²n estos mismo expertos, son suficientes. Normalmente estos sistemas se coordinan en tres fases: control de entrada, vigilantes en las salas y protecci¨®n de timbres de alarma en las obras de arte. Los ladrones suelen elegir normalmente el procedimiento de penetrar por las ventanas u otras v¨ªas de acceso secundarias, cuando los museos se encuentran cerrados. Otros, los menos, utilizan el sistema de la naturalidad, que consiste en descolgar el cuadro en presencia del p¨²blico y salir con ¨¦l debajo del brazo como si nada sucediera.Como explicaci¨®n de los m¨®viles de los robos de obras de arte cualificadas, se cita como m¨¢s id¨®nea la de que los ladrones son man¨ªacos o que lo hacen por m¨®viles pol¨ªticos o personales, de notoriedad, por ejemplo. Dif¨ªcilmente pueden hacerlo por dinero, dado que son cuadros perfectamente catalogados y no hay manera de venderlos. Existe otra versi¨®n veros¨ªmil y que parece que est¨¢ arraigada en Italia, que tendr¨ªa su fundamento en el robo para el chantaje. Los propios museos y a veces el Estado, ser¨ªan los compradores de sus propias obras que tras ser robadas se encontrar¨ªan en el extranjero.

La posibilidad de que exista una internacional de robos de obras de arte, no goza de muchas adhesiones, por lo menos en lo que respecta a obras de arte famosas, aunque s¨ª existen grupos perfectamente coordinados de intermediarios y anticuarios que organizan batidas a centros donde existen obras de arte que no est¨¢n catalogadas.

De cualquier manera, existe una gran preocupaci¨®n oficial sobre el tema de los robos de obras de arte. Recientemente en Italia se ha creado el llamado ministerio para la Salvaguarda de los Bienes Culturales, que se ocupar¨¢ de resolver de alguna manera el problema del creciente despojo del patrimonio art¨ªstico nacional. Paralelamente se ha creado un cuerpo especial de polic¨ªa para la persecuci¨®n de este tipo de delitos, como ya ocurre en Francia, Estados Unidos, Canad¨¢, Gran Breta?a y la Rep¨²blica Federal de Alemania.

Cuatro ataques en abril

El robo del palacio Pitti constituye el cuarto ataque (robo o perjuicios) de importancia que se produce en Europa en el transcurso de este mes de abril. El d¨ªa 3, el s¨²bdito italiano residente en Londres, Salvatore Borzi, de veintisiete a?os, destroz¨® con una navaja la obra de Poussin La Adoraci¨®n del Becerro de Oro, expuesta en el Museo Nacional de Londres. Los gastos de restauraci¨®n se elevar¨¢n, seg¨²n los expertos, a unos sesenta millones de pesetas.El d¨ªa 5 de abril de este a?o, un individuo no identificado acuchill¨® varios cuadros de Van Gogh en el museo del mismo nombre en Amsterdan, en un intento de llamar la atenci¨®n sobre las necesidades que pasaban los artistas j¨®venes. El cuadro La Berceuse, valorado en m¨¢s de setenta millones de pesetas, qued¨® muy deteriorado.

El pasado d¨ªa 11, un grupo de j¨®venes arrojaron materias inflamables y colorantes rebeldes sobre algunos cuadros del Museo del Estado de Frankfurt. Los expertos est¨¢n todav¨ªa estudiando las posibilidades de restaurar los dos cuadros m¨¢s da?ados: el Joyful Company, del maestro holand¨¦s Franz Hals del siglo XVII, y un tr¨ªptico del siglo, XV, de un autor espa?ol desconocido.

Otros robos de importancia en el resto del mundo en los dos ¨²ltimos a?os han sido:

-El d¨ªa 1 de febrero de 1977, roban en el palacio de los Papas de Avignon (Francia), 119 lienzos de Pablo Picasso, todos ellos catalogados. Los ladrones ejecutaron el golpe por la noche. Iban armados y encapuchados. Fueron recuperados 118 cuadros. El mismo d¨ªa, en el Museo de Louvre, de Par¨ªs, un visitante descolgaba una pintura de un disc¨ªpulo de Giotto y sali¨® del museo con ella debajo del brazo.

-El d¨ªa 8 de marzo, un grupo de ladrones expertos hacen un agujero en la pared del edificio del Museo de Chicago y, se llevan obras de Renoir, Rembrandt, Da Vinci y Durero.

-El d¨ªa 14 de julio, roban aun financiero italiano en Par¨ªs, cuadros de Picasso, Mir¨® y Fernando Leger, valorados en m¨¢s de catorce millones de pesetas.

-El 24 de junio desaparece, en el camino de Londres a Nueva York, el dibujo de Goya Un monje, valorado en unos seis millones de pesetas. La obra hab¨ªa sido enviada por una galer¨ªa londinense a Nueva York, pero el cuadro nunca lleg¨® a su destino.

-D¨ªa 13 de agosto. Son robados varios bocetos, apuntes y estudios a carboncillo de pintores como Murillo, Carracci, Vel¨¢zquez, Rubens, Tiepolo y Tiziano, a la familia de industriales italiana Sala, en Lombard¨ªa.

-D¨ªa 25 de agosto. Son robados veinte grabados de Durero en la galer¨ªa de arte de la Universidad de Calgary en el estado de Alberta, de Canad¨¢.

-D¨ªa 29 de septiembre de 1976. Once cuadros, entre los que figuran algunos de Modigliani y Toulouse Lautrec son robados en la galer¨ªa de arte de Llagostera (Gerona).

-D¨ªa 4 de octubre. Robo de varios cuadros de Zuloaga y el pintor Fortuny. Son robados del museo Zuloaga, de Segovia.

-El d¨ªa 30 de noviembre de 1976, roban en el museo municipal de Tossa de Mar (Gerona) doce cuadros, entre los que se encuentra El viol¨ªn celeste, de Marc Chagall.

-El d¨ªa 6 de mayo de 1977 se produce un robo frustrado en el museo L¨¢zaro Galdiano. Un individuo intent¨® apoderarse de una tabla pintada por Leonardo da Vinci. A la salida del museo fue detenido por personal de vigilancia. El d¨ªa 17 de mayo del mismo a?o son robados de una galer¨ªa de arte del norte de Texas (Estados Unidos), cuatro cuadros de Picasso.

- El d¨ªa 21 de mayo, un individuo disfrazado de limpia ventanas roba un cuadro de Rubens y otros dos de Brueghel, en una casa particular de Par¨ªs. El d¨ªa 1 de junio se descubre el robo, ejecutado unos meses antes, de varios cuadros de Goya, Van der Meer, Werber y otros maestros en la casa de Madrid del duque de Hernani.